Puig ve “muy irresponsable” que se esté “jugando con fuego” con la financiación autonómica
El president de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, ha pedido que no se “juegue con ambigüedades” en la financiación autonómica y que se actúe sobre “el fondo de la cuestión”, al tiempo que considera “muy irresponsable aquellos que están jugando con fuego” en este tema. A su juicio, “es actuar de una forma desleal plantear desde una parte solo de unos pocos presidentes autonómicos y de un partido político unos límites y unas fronteras a una negociación en la que debe participar todo el mundo”.
Puig se ha pronunciado en estos términos en Alicante, donde ha asistido en el ADDA a la jornada 'Reto al futuro. La ciencia, el derecho y la economía ante el desafío del envejecimiento de la población' organizada por Garrigues, al ser preguntado por la posición del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en relación a una posible quita de la deuda.
El 'president' ha lamentado, en primer lugar, que el Gobierno central ha “incumplido” el compromiso alcanzado hace un año en la Conferencia de Presidentes, en la que se llegó a un “gran acuerdo” para elaborar en 2017 el nuevo sistema de financiación, para el que la Comunitat presentó una propuesta “que era para toda España”. “El Gobierno no lo ha hecho, y eso le quita credibilidad al conjunto de las instituciones y fundamentalmente al Gobierno de España”, ha considerado.
En segundo lugar, ha sostenido que es “actuar de una forma desleal plantear desde una parte solo de unos pocos presidentes autonómicos y de un partido político unos límites y unas fronteras a una negociación en la que debe participar todo el mundo”. A su juicio, esto supone “no entender la pluralidad ideológica y del Estado” y cree que ahí existe un “componente” que “debilita la calidad democrática del país”.
En tercero, ha instado a preguntar “por qué se ha producido esa deuda” de las comunidades autónomas. En el caso valenciano, ha subrayado que obedece a “la mala gestión, despilfarro y corrupción” de los anteriores gestores, por tanto “heredada”, pero que ahora “la tenemos que asumir los valencianos”. Sin embargo, ha precisado que existe una parte de ella “muy importante” que tiene que ver con la infrafinanciación.
Según Puig, “como mínimo” desde el año 2000, la Generalitat se ha tenido que endeudar, pese a gastar “menos”, al tener una financiación “inferior” al resto de autonomías. Así, ha hecho hincapié en quelo que a unas comunidades se les ha dado como financiación “ordinaria”, a la Generalitat se ha concedido “como crédito”.
“Por tanto, lo que exigimos es que haya una compensación a esa deuda, que es una cuestión simplemente de justicia y de igualdad de oportunidades”, ha enfatizado y ha mantenido que “no se puede jugar con unas reglas del juego en la que no todos somos iguales”.
Para Puig, la “ruptura de la equidad es un problema grave para un país” y ha tildado de “muy irresponsable aquellos que están jugando con fuego en esta cuestión”. “Deberían volver las aguas al cauce razonable” en el que “siempre” ha estado la Comunitat Valenciana, ha pedido, y ha identificado a la autonomía como una región “de diálogo, no confrontación y que busca encontrar un espacio razonable de la convivencia desde la igualdad”.
Mensajes “contradictorios”
En esta línea, ha lamentado la sucesión de mensajes “contradictorios” sobre la quita de la deuda desde el Gobierno y ha aseverado que hace unas semanas Montoro dijo que se debería estudiar la condonación; este pasado lunes se vivió “con sorpresa” que el PP “expropiando los intereses colectivos, decidía que no se podía hablar de la deuda” y más tarde, el propio ministro de Hacienda “decía que se pueda llamar quita o de otra manera pero que habrá que reestructurar la deuda”.
En este contexto, ha reclamado “que no se juegue ambigüedades” y se actúe sobre “el fondo de la cuestión”, “que es hay una desigualdad entre españoles”, ha dicho Puig, quien ha destacado que en este tiempo la Comunitat ha logrado situar en el debate político y la agenda la cuestión de la deuda y infrafinanciación de la autonomía, “la peor financiada” de todas.
