Seis abstenciones, un olvido y opacidad en su trabajo con empresas: los tres meses del concejal de contratación de València

Ni grandes proyectos presentados, ni capacidad de contratación por incompatibilidad. Es la paradoja en la que se halla inmerso el concejal de Grandes Proyectos y delegado de contratación del Ayuntamiento de València, José Marí Olano, que cumple este julio tres meses en su nueva responsabilidad. El edil, que fue nombrado el pasado abril como presidente de la Mesa de Contratación del consistorio, el órgano de asistencia técnica especializada al órgano de contratación del consistorio, ha tenido que abstenerse en al menos seis procesos por haber trabajado en los dos últimos años con firmas que concurrían a las licitaciones públicas.

Este julio se cumplen tres meses de la última remodelación de gobierno municipal para tratar de sortear la crisis de Vox, que sirvió a la alcaldesa, María José Catalá, para acometer algunos retoques internos. Entre ellos, dotar a su fichaje estrella, el responsable de 'Grandes Proyectos' de la capacidad de presidir la Mesa de Contratación del Ayuntamiento, el órgano que evalúa las propuestas económicas y propone las adjudicaciones de las empresas que quieren trabajar con la administración pública para cubrir un servicio, pese a que el edil ha trabajado en los últimos años en una consultora de renombre, la firma KPMG, con la que mantuvo vínculos profesionales en los primeros seis meses de gobierno.

El edil de contratación se ha negado sistemáticamente a revelar a la oposición con qué empresas ha trabajado y con cuáles sigue teniendo vínculos profesionales, dado que compatibiliza su trabajo como concejal con su actividad privada como abogado. Marí Olano remite al secreto profesional de la abogacía para no desvelar quienes son sus clientes, las firmas a las que asesora, y se limita a recalcar que se abstiene cuando legalmente ha de hacerlo. En una ocasión, el edil 'olvidó' apartarse de un proceso y remitió un escrito meses después, comunicando en qué sesiones de la Mesa debería haberse abstenido.

La opacidad y las abstenciones por incompatibilidades del concejal de contratación han llevado a la oposición a reclamar que se le releve en el cargo. Este martes, Compromís ha anunciado una moción para pedir su salida, mientras que los socialistas presentan una este miércoles en la Comisión de Grandes Proyectos para exigir transparencia al consistorio sobre lo que consideran un conflicto de intereses. El equipo de gobierno de Catalá defiende que Marí Olano ya cumple con esa transparencia y pone como prueba de ello que el edil se aparta, algo que se recoge en las actas del órgano de contratación.

A los seis procedimientos de los que Marí Olano se ha apartado han concurrido más de 50 empresas. Uno de ellos es el contrato de 293 millones de euros del alcantarillado de Valencia, recurrido por dos mercantiles tras la adjudicación a la UTE de Acciona. Otro de ellos es el de la remodelación de la Avenida Pérez Galdós, dos de los más cuantiosos que se han tramitado este año.

La coalición Compromís ha hecho balance del ecuador de mandato considerando que “la concejalía de Grandes Proyectos y Contratación no ha generado ningún evento nuevo para València. En dos años, no se ha logrado ni una competición internacional, ni un congreso de relevancia, ni ninguna cita cultural o deportiva significativa”. La portavoz de los valencianistas, Papi Robles, recordó que el concejal fue cazado ojeando una web de compra de vinos durante un pleno, cuando se estaban debatiendo ayudas por la dana, un “episodio vergonzoso” que la portavoz considera “el símbolo perfecto de su gestión: desconexión total con la realidad y una falta de respeto a la ciudadanía”.

“Tenemos un concejal y presidente de la Mesa de Contratación que debe estar constantemente absteniéndose y no puede contratar. Cada expediente que toca queda contaminado con sospechas”, ha afirmado la concejala Eva Coscollà. En este sentido, Compromís denuncia que Olano oculta sus relaciones con empresas privadas, escudándose en el “secreto profesional”, a pesar de haber sido socio de KPMG hasta diciembre de 2023, justo cuando la consultora recibió un contrato de 130.000 euros del Ayuntamiento.

La coalición ha registrado una moción en la Comisión de Hacienda que reclama la destitución de Olano como presidente de la Mesa de Contratación. Asimismo, solicita la designación de una nueva presidencia imparcial y con dedicación exclusiva, además de la aplicación de medidas de transparencia, como la publicación de declaraciones de intereses e informes sobre abstenciones. “Catalá debe dar la cara. Ella puso a Olano en ese cargo sabiendo de sus conflictos. Si no actúa, se convierte en cómplice de la opacidad y la desconfianza institucional”, ha concluido Papi Robles. Compromís insiste en que València necesita responsables públicos que trabajan por la ciudad, no figuras con negocios privados o con dedicación parcial. “Cada día con Olano en el cargo es un día más de desprestigio para el Ayuntamiento.

El PSPV pide una lista de empresas

El edil socialista Javier Mateo registra este miércoles una moción en la que reclama al Ayuntamiento de València a que requiera al concejal José Marí Olano a que, “en el plazo máximo de 30 días, elabore y presente ante el Pleno un listado detallado de todas las empresas (personas físicas o jurídicas) con las que ha mantenido relación profesional en los dos últimos años con expresa indicación de aquellas que han concurrido o concurren a procedimientos de contratación pública en los que se ha abstenido”.

El texto también insta a la Alcaldía a “incorporar en el Reglamento Orgánico Municipal la obligación de registrar y publicar en el Portal de Transparencia del Ayuntamiento de València todas las incompatibilidades y abstenciones de los concejales por motivos de incompatibilidad en contratación pública”. Por el momento, son más de medio centenar las empresas afectadas en estos procesos de contratación de los que se ha abstenido.

El concejal del PSPV justifica la moción para que “ningún atisbo de corrupción vuelva al Ayuntamiento de València”. “No es tolerable que solo dos años después de que llegara Catalá la UCO haya tenido que volver a registrar este Ayuntamiento por una investigación por corrupción”, apunta, en referencia al exportavoz de Vox en el gobierno, Juanma Badenas, y añade: “Ahora, el concejal de contratación, José Marí Olano, parece que tiene relaciones con múltiples empresas, tanto es así que se ve obligado a abstenerse en múltiples procesos de contratación e incluso ha tenido que rectificar tres meses después, cuando ya estaba adjudicado un contrato, para poder abstenerse como exige la ley”.

En base a estos antecedentes, el socialista expresa: “Lo que exigimos es la máxima transparencia y que en este caso el señor Marí Olano, si no es relegado por María José Catalá, elabore un informe detallado sobre las empresas con las que ha tenido y tiene relación y con las que no debería tener ninguna participación durante los procesos de contratación”.

“Exigimos la máxima transparencia, la máxima pulcritud y que el buen nombre del Ayuntamiento de Valencia no vuelva a ponerse entredicho bajo la posible corrupción con la gestión del Partido Popular”, concluye el socialista.