Los controles de Francia bloquean en España a refugiados que quieren llegar al centro de Europa
“¿A España? No, no. A España no quiero ir. No hay trabajo, es más difícil... Yo quiero ir a Alemania, allí tengo amigos...”, explicaba Samir hace dos meses en Melilla. Desde el pasado 13 de noviembre, sus planes serán aún más difíciles de cumplir. El restablecimiento de los controles fronterizos en Francia está frenando el paso de algunos de los solicitantes de asilo que alcanzan este país con la intención de continuar su viaje hacia el centro de Europa, según ha confirmado a eldiario.es el Ministerio del Empleo. La medida, aplicada por Francia debido al dispositivo de seguridad de la Cumbre del Clima y aplicada en otros países tras los atentados de París, ha empezado a impedir el paso y a devolver a demandantes de protección mientras trataban de viajar en autobús a Alemania o a Bélgica durante las últimas semanas.
Cada semana, entre 100 y 200 sirios llegan a la Península Ibérica trasladados desde Melilla pero, hasta ahora, la mayoría continuaba su viaje hacia otros países de la Unión Europea donde cuentan con más contactos o confían en tener más oportunidades de futuro. Desde el 13 de noviembre su proyecto se ha visto truncado tras el refuerzo de los controles fronterizos en la frontera francesas, paso obligado para continuar su travesía.
A ello se suma el restablecimiento de Alemania del Sistema de Dublín, la normativa que obliga a devolver a los demandantes de asilo al primer país europeo que pisan. Angela Merkel suspendió de forma temporal su aplicación debido a la llegada constante de refugiados aunque, a finales de octubre, anunció que volvería a implantarlo. Además, otros países comunitarios también han comenzado a realizar controles en sus fronteras tras los atentados de París. Con lo que, aunque consiguiesen atravesar Francia, cada vez se encuentran más obstáculos en su viaje hacia su destino final.
La documentación entregada a los solicitantes de asilo de la Unión Europea no permite el movimiento de circulación por los diferentes países comunitarios. Sin embargo, debido a la falta de controles en las fronteras europeas, las personas de origen sirio que entraban en España como demandantes de protección podían continuar su camino.
“No sabemos si están frenando a todos o solo a algunos. Sabemos que hay gente que se ha salido del sistema de protección con la intención de viajar al norte de Europa y está volviendo diciendo que no les dejan pasar. Está ocurriendo desde hace aproximadamente una semana”, confirman desde el Minisiterio de Empleo y Seguridad Social, encargado de la acogida de los solicitantes de asilo.
Reingreso en el sistema de acogida
Una vez abandonadas las ciudades autónomas, los solicitantes de asilo sin recursos ingresan en el sistema de protección español. Determinadas ONG se encargan de su acogida en España y, una vez llegados a la Península son trasladados a diferentes centros o pisos del país. Si deciden continuar su viaje, los refugiados salen de facto de la red de acogida oficial.
Después de encontrar este nuevo obstáculo, algunos refugiados han optado por cambiar de decisión y permanecer en España, pero otros optan por volver a intentarlo de nuevo, según informa la red ciudadana de acogida de refugiados de Madrid. Aquellas personas que deciden permanecer en España, deberán pedir el reingreso en el sistema de acogida estatal. En este sentido, el Ministerio de Empleo ha asegurado a este medio que todos ellos “serán readmitidos en el sistema de protección, solo serán rechazados aquellos que tienen recursos”.
Muchos siguen intentándolo. “Les explicamos que pueden ser devueltos en aplicación del sistema de Dublín. Les contamos las novedades: el aumento de los controles en la frontera de Francia, el cierre de fronteras de otros países europeos... pero algunos lo tienen muy claro. Después de pasar lo que han pasado quieren llegar adonde aspiran”, explican desde la red ciudadana de acogida, que desde Madrid ayuda a los solicitantes de asilo a lo largo de este periplo.
“Algunos han tenido muy mala experiencia en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) y temen las condiciones de acogida en España, aunque les contemos que son diferentes. Muchos tienen familia en otros países europeos y quieren reencontrarse con ellos. La situación económica de España también influye...”, explican después de estar en contacto con cientos de refugiados que desean continuar su viaje migratorio hacia el centro de Europa.