Soy Dani Álvarez, presento y dirijo cada mañana Boulevard en Radio Euskadi entre las 6 y las 10 de la mañana. A los 12 años escuché por primera vez a Iron Maiden y me dije “esto es lo mío”. Desde los 22 busco y cuento noticias, y a todas horas escucho Metal. He entrevistado a más lehendakaris (5) que veces he visto a Metallica o he ido a Wacken (4). Decir más sería reiterativo.
Solo fue un mal sueño
Hace unos días durante la siesta tuve un mal sueño. No llegó a ser una pesadilla, porque no soñé ni con Justin Bieber ni con Miley Cirus, pero lo pasé mal. Soñé que el reloj del Heavy Metal se había parado en 1985 en España, pero por suerte sólo fue un sueño. Abría una revista y las crónicas de los conciertos eran sobre Obús, UFO y Los Suaves. Como si nada hubiera cambiado en treinta años. Espantado ante semejante día de la marmota, revisaba las últimas aportaciones de la gente en las redes sociales y se hablaba de un locutor de radio que acostumbraba a “cambiar diametralmente de onda” y poner el nuevo “plástico” de los AC/DC.
Ese locutor hablaba de que ya no había grupos grandes como los de antes, y que los jóvenes se tenían que trabajar más su porvenir dentro del Rock. Lo hacía mientras en la radio sonaban Status quo. Y me dije: “no es posible, de esto se hablaba hace treinta años”. Sus seguidores le hablaban sobre grandes conciertos en los que no habían estado y añoraban unos años que no habían vivido. Sin embargo, todo era en tiempo presente.
En ese mal sueño, en el que el periodismo musical lo hacían los mismos de hace treinta años y sonaban los mismos grupos de hace treinta años, ante mi desesperación, cogía una revista europea y me encontraba con los siguientes nombres: Babymetal, Decapitated, Machine head, Slipknot, Tesseract, While she sleeps, Bury tomorrow, Thy art is murder, Bring me the horizon, Halestorm, Killswitch engage, Asking Alexandria, Gojira, Five finger death punch y otros que, como no existía Internet, no podíamos escuchar.
Había anuncios de grandes compañías discográficas con nombres raros: Warner, Roadrunner, Nuclear blast, y los metaleros de sus respectivos países hablaban de ellas con orgullo, en lugar de llamarles chupópteros, sátrapas o llenabolsillos a cuenta de los sacrificados 'jevis'.
Afortunadamente, me desperté, y me encontré otra vez con la bella realidad. En la única emisora de Rock volvían a sonar Leño, nadie compraba discos porque la música era gratis y a mi alrededor la gente seguía quejándose de que hace treinta años las cosas eran mejores porque entonces los periodistas apoyaban a los nuevos grupos.
Qué mal sueño.
Sobre este blog
Soy Dani Álvarez, presento y dirijo cada mañana Boulevard en Radio Euskadi entre las 6 y las 10 de la mañana. A los 12 años escuché por primera vez a Iron Maiden y me dije “esto es lo mío”. Desde los 22 busco y cuento noticias, y a todas horas escucho Metal. He entrevistado a más lehendakaris (5) que veces he visto a Metallica o he ido a Wacken (4). Decir más sería reiterativo.