Esto es un experimento periodístico. El titular que encabeza este texto no es falso. No lo has leído ni vas a leerlo probablemente como titular en ningún medio de comunicación. “Podemos y PP se ponen de acuerdo en Andalucía” es un intento de combinar nuestra seducción por los titulares y nuestra resistencia a lo mainstream. Un titular menos llamativo y todavía más situado sería este: “Podemos, PP e IU se ponen de acuerdo con la Ley de Atención Temprana en Andalucía”. Esto ha pasado. No es mentira ni es una manipulación.
Sin embargo, los titulares que hemos podido leer en prensa han sido: “Ciudadanos deja caer una ley en Andalucía que apoyaba hasta hace dos días para complacer al PSOE” (publico.es), “PSOE y Ciudadanos tumban la Ley de Atención Temprana planteada por Podemos” (ABC Andalucía), “Una reunión de Susana Díaz con C's evita que la oposición saque la Ley de Atención Temprana” (eldiario.es Andalucía) o “Díaz evita un nuevo revés por la atención temprana con un pacto exprés con C's” (El Diario de Sevilla).
Casi todos estos titulares de lo que ha pasado protagonizan al PSOE y en menor medida a Ciudadanos. Podríamos pensar que es lógico dado que a nivel nacional hace unos días que ambos partidos anunciaron un acuerdo para la investidura de Pedro Sánchez. Lo que me gustaría formular con este texto es, ¿Qué debe haber pasado para que dos partidos enfrentados en la esfera mediática mainstream y tratándose como enemigos, se pongan de acuerdo en algo en un contexto determinado? La respuesta suele estar fuera de los titulares pero presente en el cuerpo de texto: la sociedad civil.
La esfera mediática mainstream de la política requiere de un constante baile. En dicho baile, debe haber resistencias pero también concesiones. Las concesiones implican reconocer que todos nos sentimos seducidos por los titulares como punto de acceso a una determinada realidad. Y las resistencias son nuestra obligación de llevar a cabo el sano ejercicio de atender a informaciones situadas: ampliar nuestro campo de mirada y aprender de incidentes políticos que tienen que ver con el contexto de un determinado territorio y que en ocasiones niegan la inercia de lo mainstream.
Antonio Guerrero es el representante de la Plataforma de Atención Temprana en Andalucía. Con bastante desazón, Antonio publicaba un breve texto en la web de la plataforma enlazando al diario de sesiones de la jornada en la que se rechazó la propuesta de Ley y decía “que cada uno saque sus propias conclusiones”. La Plataforma de Atención Temprana llevaba meses trabajando en conjunción con todos los partidos de la oposición. Como muestra este detallada publicación que firma el propio Antonio, en Diciembre el acuerdo parecía total e incluso Ciudadanos lanzó un comunicado sellando el apoyo.
La realidad es muy compleja y hay titulares para todos. Por eso PSOE y Ciudadanos se esmeraban el otro día en defender cuestiones tales como que “Se aumenta el presupuesto de 11 a 15 millones este año”. Y claro, ese podría bien ser un titular y no sería falso. También podría ser un titular la siguiente cita de Guerrero: “El PSOE y Ciudadanos han dejado vendidos a 30.000 niños”.
¿Qué conclusiones podemos extraer de este pequeño experimento?
- Escucha y apoyo a la sociedad civil organizada. Este caso demuestra que organizaciones no partidistas luchando por un bien común como puede ser la Plataforma de Atención Temprana de Andalucía han estado a punto de poner de acuerdo a todos los partidos de la oposición. El descontento de dicha Plataforma debería ser motivo suficiente para el sonrojo de quién ha decidido rechazar la Ley, puesto que la Plataforma ha dejado clara que tanto PP, como Podemos como IU registraron la proposición de Ley y que a pesar de ser impulsada por Podemos, éste era concebido “como un mero instrumento” por parte de la Plataforma. La revolución democrática tendrá que seguir dándose dentro y fuera de la institución, y lo que se buscan son interlocutores que infiltren como meros instrumentos propuestas que provengan de ese afuera. Y el afuera institucional ha de existir, fuerte y sano, alejado de intereses partidistas.
- Periodismo situado. Como decíamos al principio, el titular es un arma de seducción masiva y los forcejeos con la compleja realidad y la búsqueda de la síntesis hacen de este oficio una artesanía con muchas aristas y matices. El periodismo no solo lo ejercen los periodistas. “Podemos y PP se ponen de acuerdo en Andalucía” era otro titular tramposo. Pero la provocación de usarlo como gancho sugiere que tomando a la sociedad civil organizada como punto de partida, hemos de trascender la absurda lógica polarizante en la que estamos instalados ahora mismo. Visto con cierta perspectiva, el juego de tronos político y mediático que vivimos a cuenta de la investidura puede encerrarnos en una burbuja comunicativa donde desplacemos hasta el olvido los problemas reales que siguen acuciando a miles de familias.
- El PSOE en Andalucía es una máquina de mantener el poder. Haciendo un análisis con brocha gorda (en el que podemos excluir fundamentalmente a Cádiz) Andalucía sigue siendo un territorio donde el vuelco electoral hacia propuestas transformadoras distintas del PSOE sigue siendo muy bajo. Así como en otros lugares el PSOE ha entrado en una crisis que lo convierte en tercera o incluso cuarta fuerza, en Andalucía y a pesar de los casos de corrupción, mantiene el poder. Cabría preguntarse si además de mantener el poder no está capitalizando de alguna forma (y por tanto neutralizando) iniciativas provenientes de la sociedad civil que pudieran convertirse en un momento dado en alternativa electoral real.
Hace años, hubo un acuerdo en Extremadura para que IU permitiera al PP gobernar, expulsando al PSOE de dicha posibilidad. El propio Cayo Lara se presentó en Extremadura para poder forzar un acuerdo con el PSOE. Resulta representativo recordar que ahora que se solicitan transparencia y democracia interna (casi que como mantras post.15M) en aquel momento fueron las bases de IU Extremadura quiénes apoyaron aquella decisión. No fue el aparato central de IU, no fue Cayo Lara. Fueron las bases. Y los titulares de aquellos días se llenaban de furia bienpensante y mainstream contra IU y clamaban contra Cayo Lara para que éste fuera a poner orden. Probablemente la realidad era tan compleja que no bastaba con titulares para entenderla. Solo que a veces, los titulares alternativos y un ejercicio de lectura crítica pueden darnos muchas pistas para posicionarnos críticamente. Y como decía Antonio Guerrero: ahora, saquen ustedes sus propias conclusiones.