La única ZBS confinada de Tetuán sigue marcando récords de Covid-19 un mes después de su cierre Diego Casado

En poco más de dos semanas, los 42.000 coches con etiqueta A empadronados en Madrid tendrán más difícil moverse por la capital. A partir del 1 de enero, los parquímetros no emitirán tickets para este tipo de vehículos, por lo que no podrán estacionar legalmente en ningún punto del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER).
La restricción afecta a todos los coches a los que no les corresponde la etiqueta ambiental de la DGT, conocidos como los de etiqueta A. Estos son los diésel matriculados antes de 2006 o gasolina matriculados antes del año 2000. La medida estaba incluida en la Ordenanza de Movilidad Sostenible aprobada en 2018 por el gobierno de Carmena y será aplicada por el actual Ayuntamiento de Madrid, que ha iniciado una campaña informativa de cara a la entrada en vigor de la norma.
La medida tiene excepciones. La más importante es que los residentes con coches con etiqueta A podrán seguir aparcando en su propio barrio de referencia hasta el año 2025. Estos son los colectivos sobre los que no se aplica la norma:
Las multas por incumplir esta norma serán de 90 euros, 45 por pronto pago.