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El Gobieno vasco pospone la negociación de los presupuestos de 2020 hasta después de las generales

Pedro Azpiazu entregando el proyecto de presupuesto en el Parlamento

Iker Rioja Andueza

El Gobierno de Iñigo Urkullu ha decidido posponer la negociación con la oposición de los presupuestos de 2020 hasta después de las elecciones generales del 10 de noviembre. El Ejecutivo de PNV y PSE-EE, con 37 de 75 escaños, necesita al menos de la abstención de uno de los tres partidos opositores, EH Bildu, Elkarrekin Podemos o PP, para sacar adelante las cuentas. Rota la alianza de la primera mitad de la legislatura con los 'populares' después de la moción de censura contra Mariano Rajoy y fracasado el acercamiento a la izquierda abertzale del pasado año, ahora todas las miradas se posan en Elkarrekin Podemos. Una segunda negociación fallida y la consiguiente prórroga podrían marcar el final de la legislatura vasca y suponer un adelanto de las autonómicas, inicialmente previstas para otoño de 2020.

El consejero de Hacienda y comisionado de Urkullu para negociar con la oposición, Pedro Azpiazu, ya manifestó en la presentación de los números del Gobierno que “las elecciones no van a facilitar los acuerdos”. Así las cosas, tras una primera llamada telefónica a los líderes de EH Bildu, Elkarrekin Podemos y PP, Azpiazu ha decidido posponer unas semanas el diálogo. “El 'sailburu' ha llamado a los tres grupos de la oposición y han acordado retomar las reuniones tras las comparecencias de los consejeros en el Parlamento Vasco, en las que presentarán los presupuestos de sus respectivos D epartamentos”, indican fuentes de Hacienda. Esas comparecencias se realizarán, precisamente, al día siguiente de los comicios, el 11 de noviembre.

“Han quedado en fijar las reuniones a partir del 14 de noviembre”, indican estas mismas fuentes, que insisten en que hay tiempo a pesar del retraso porque “el plazo de presentación de enmiendas concluye el 4 de diciembre”. “Hay margen para la negociación y voluntad para alcanzar acuerdos”, asegura el Gobierno.

En la oposición, todas las miradas se posan sobre Elkarrekin Podemos, cuyo equipo analiza ahora el voluminoso documento con los números y memorias de 2020 entregado el viernes al Parlamento por Azpiazu. La coalición ya se ha dejado querer y ha agradecido gestos como el acento puesto por el Gobierno en materia de igualdad y emergencia climática, pero constata igualmente la insuficiencia de algunas medidas propuestas por PNV y PSE-EE, como ha indicado en rueda de prensa este lunes Andeka Larrea.

El punto más crítico lo ha puesto IU, uno de los tres socios de Elkarrekin Podemos. Abiertamente ha considerado “poco probable” el pacto con el Ejecutivo. Se requiere un “cambio en profundidad de las políticas del Gobierno vasco, en la estructura de gastos y también en la de ingresos, en la fiscalidad, algo que nos antoja poco probable”, ha manifestado Isabel Salud. Por poner un ejemplo, ha criticado que no se acabe con los recortes en la renta de garantía de ingresos.

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