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Ulibarri pidió a su abogado acercarse a los jefes de las fiscales de Gürtel para que diesen “directrices” a su favor

José Luis Ulibarri (EFE)

Laura Cornejo

Los pinchazos telefónicos de la Operación Enredadera incluyen una conversación del presunto cabecilla, José Luis Ulibarri, el constructor que ha levantado un emporio de medios de comunicación en Castilla y León, con su abogado y en la que ambos comentan la marcha del caso Gürtel, en el que Ulibarri está procesado y pactan tejer contactos con los superiores de las fiscales para que estos les den “directrices” sobre el caso.

El empresario de la construcción y los medios de comunicación, que se enfrenta a una petición de la Fiscalía de siete años de prisión por un presunto cohecho a la hora de conseguir la adjudicación de una urbanización de lujo en Boadilla del Monte (Madrid), pedía a su letrado, el reputado penalista Luis Rodríguez Ramos, hablar con alguien “de arriba” para que las fiscales recibiesen “directrices”. De lo contrario, afirma el constructor, estarán “perdidos”.

Esa conversación fue captada por la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional y figura en uno de los tomos del sumario Enredadera, que persigue amaños de contratos y sobornos en distintas administraciones y en la que Ulibarri ocupa un papel central, según los investigadores. Ambos interlocutores desconocían que al constructor se le estaba investigando en otro caso de corrupción.

La llamada de Ulibarri a su abogado se produjo el pasado 23 de febrero a las 12.07 horas. El empresario le pregunta si había alguna “novedad” o “algo que mereciera la pena” sobre el caso Gürtel, pero el letrado responde que todo lo que le estaba llegando era a través del procurador era sobre la pieza de Valencia, y que “lo de Boadilla” -otra de las ramas de la investigación- estaba “absolutamente parado”. “La fiscal están ocupadas por un lado con lo de Valencia [sic]”, le informa. “Hasta que no se abra la veda de este nuevo y se ponga en marcha pues no, no compensa volver a hablar con ellas ¿no?”, añade el letrado. A lo que Ulibarri responde: “Yo creo que tienes que mirar un poco más arriba, si no, estamos perdidos”. El abogado le dio la razón: “No, no, con ellas y más arriba, hombre con ellas siempre se puede ver y...pero empezando por arriba...”.

Para Ulibarri era importante empezar por “arriba”, tal y como advirtió a Rodríguez Ramos: “Claro porque al final, con ellas es con las que hay que hablar pero si no les viene la directriz ya te lo digo yo que va a ser complicado Luis...”.

Primero por “arriba” y luego “bajar el escalón”

Incluso le indicó cómo abordar una charla con el superior jerárquico de las fiscales, sin aclarar si lo que pretende es tratar con el fiscal general del Estado, Julián Sánchez Melgar, o con el fiscal Jefe de Anticorrupción, Alejandro Luzón, que asumió el cargo hace un año. “Pero bueno, lo que quiero decir yo que muchas veces es más fácil en un encuentro casual, hacer un comentario, oye sabes que me he hecho cargo de, de esta persona, tal bueno, pues al final ...”, aconsejaba Ulibarri la manera de acercarse a los superiores de las dos fiscales del caso Gürtel.

Rodríguez Ramos había asumido la defensa de Ulibarri tras el fallecimiento del anterior letrado. “Como tengo, por otro tema, querría verle y entonces pues sí, se lo puedo sacar con esa ocasión”, asintió el abogado. Ulibarri pide que no le diga a ese interlocutor en la Fiscalía mucho más en ese primer encuentro: “Yo creo que inicialmente, igual es suficiente con comentar que te has hecho cargo [...] y que en su día, pues, me gustaría hablar con ¿eh? y ya está [...] que no sea provocado”.

El abogado se muestra de acuerdo porque ve el juicio de Ulibarri “muy lejos”, y porque según dice, “luego se olvidan y hay que volver otra vez”. Así que comparte la idea de “anunciarlo así” -hacer saber que él había asumido la defensa del constructor-, para más adelante conforme se acerque la fecha del banquillo “volver a hablar con él” y después “bajar ya el escalón”, es decir, dirigirse a las fiscales del caso. “Eso bajar eso, yo creo que tiene que ser un poco por ahí, entonces de momento estamos tranquilos y...”, continua Ulibarri.

La conversación continúa con alusiones a las otras piezas separadas de Gürtel y algunas de las declaraciones de los principales acusados en esos otros procedimientos, que según el abogado no deben interferir en la estrategia de defensa. Ambos calculan que el juicio que afecta a Ulibarri no se señalará hasta el final del verano.

Este diario intentó sin éxito conocer la versión del abogado de Ulibarri, Luis Rodríguez Ramos, a lo largo de los dos últimos días. El letrado no ha respondido a las preguntas de esta redacción. Tras descolgar una de las repetidas llamadas y alegar falta de cobertura, ya no volvió a atender a eldiario.es.

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