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Varias comunidades rechazan la vuelta al colegio de los menores de seis años y dejan sin opciones a miles de familias

Reunión de la Conferencia Sectorial de Educación entre Gobierno y Comunidades Autónomas, este jueves.

Daniel Sánchez Caballero

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Se atisba lío con la vuelta al colegio. Como anunciaron el miércoles, varias comunidades autónomas (al menos ocho) han rechazado este jueves el plan de desescalada educativa que propone el Gobierno para antes del verano, especialmente para los menores de seis años cuyos progenitores tienen que reincorporarse presencialmente al trabajo. El riesgo de contagio en este colectivo, aducen, es muy alto.

Los consejeros de Educación de Murcia, Castilla-La Mancha, Aragón, Baleares, Andalucía, Madrid, y el País Vasco así se lo han explicado a la ministra de Educación, Isabel Celaá, durante la Conferencia Sectorial que reúne a Gobierno central y autonómicos y en la que se han discutido los planes de retorno al colegio para cerrar el curso y la apertura del siguiente.

En este caso, y a diferencia del anterior choque entre ministerio y algunas comunidades, marcado por el signo político de los Gobiernos enfrentados, el rechazo llega desde administraciones gobernadas por grupos de todo signo, desde populares en Madrid o Murcia hasta socialistas en Castilla, pasando por el PNV en Euskadi o la coalición Més en Baleares.

El consejero madrileño de Educación, Enrique Ossorio, ha explicado (a través de una nota) que “todos los miembros de la comunidad educativa con los que hemos hablado en los últimos días insisten en la absoluta imposibilidad de cumplir las normas de distancia social e higiene con los niños de 0-6 años” y que “esta debería ser la última etapa educativa en volver a las clases presenciales”. También ha lamentado Ossorio que todo lo que haya salido de la reunión sea el compromiso de crear un grupo de trabajo para prever futuras actuaciones.

Celaá ha respondido a los consejeros que la normativa no obliga a los centros a abrir ni a las familias a acudir (el retorno es voluntario y solo para ciertos casos), por lo que la decisión es suya, como lo son las competencias en Educación. Fuentes del ministerio explican además que la conciliación no es tarea de la escuela.

El Ministerio, que de momento no tiene previsto hacer una rueda de prensa tras la reunión, ha enviado un vídeo con declaraciones de la ministra, en las que afirma: “El sistema es autonómico y vivimos en un sistema compuesto, de las autonomías, que tienen sus competencias educativas intactas. Todos somos agentes que hemos de colaborar, cooperar, en una respuesta eficiente para la ciudadanía. (...) Nos vemos en la necesidad de convertir esa incertidumbre en certidumbre para aportar a las familias, no queremos añadir más incertidumbre”.

Y sin embargo nadie ha dicho, hasta ahora, qué soluciones se ofrecen para las familias que tengan que reincorporarse presencialmente al trabajo y que tengan hijos pequeños que no puedan atender. Fuentes presentes en la reunión explican que la cuestión no se ha tratado. Desde Madrid, un portavoz de la Consejería comenta que están a la expectativa de lo que les diga el Ministerio al respecto, mientras desde el Ministerio consideran que es una cuestión de comunidades autónomas y ayuntamientos.

Comunidades, docentes y pediatras coinciden

Con carácter general, la propuesta del Gobierno para el retorno a las aulas antes del verano pasa por la apertura de escuelas infantiles para los menores de seis años cuyos progenitores tengan que volver al puesto de trabajo (para los demás no se ofrece nada); por clases voluntarias de repaso y preparatorias de otras pruebas como la Selectividad para los alumnos de los cursos que dan un título o acceso a otra etapa (2º de Bachillerato o 4º de la ESO); y por unos refuerzos, también voluntarios, para los estudiantes con problemas educativos (los seleccionarán los centros).

Todas estas medidas solo pueden entrar en vigor en la fase 2 de la desescalada y además son voluntarias para las familias. A este respecto, el Gobierno de Euskadi ha pospuesto una semana el retorno, que tenía previsto inicialmente para el día 18, aún en fase 1, plan que no tenía el respaldo del Gobierno y que finalmente ha sido modificado.

El rechazo de los consejeros regionales a la vuelta de los más pequeños –con los estudiantes de 2º de Bachillerato o 4º de la ESO hay menos pegas– se une al de pediatras y la totalidad de los sindicatos docentes de ámbito nacional (CCOO, Stes, Anpe, CSIF y UGT) a la vuelta al colegio antes de septiembre.

Tres escenarios

En la reunión también se ha acordado la creación de un grupo de trabajo para elaborar un documento de orientaciones, que debe estar listo antes del verano, para que las comunidades autónomas trabajen en los tres posibles escenarios que se contemplan para el inicio del curso escolar en septiembre en función de la evolución de la pandemia.

Los tres escenarios contemplados son: una vuelta normal, sin siquiera distancia de seguridad porque no sea necesaria; que haya que mantener la distancia interpersonal en los centros; y que se dé el caso de que haya que interrumpir la actividad presencial por un rebrote que obligue a un nuevo confinamiento como el vivido estos meses.

En todos los casos, explica la nota enviada por Educación, “será necesario adaptar los currículos y las programaciones de los cursos, áreas y materias” para prestar especial atención a las competencias fundamentales y para recuperar los déficits ocasionados“ por la suspensión de la actividad docente presencial.

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