Silicon Valley busca el Google de la marihuana

Durante las últimas décadas los inversores de Silicon Valley han puesto grandes cantidades de dinero en empresas emergentes de todo tipo. De ahí han salido gigantes como Twitter, Uber o Instagram, pero también sonados fracasos, como la licuadora Juicero o la empresa de análisis de sangre Theranos. Ahora, los inversores buscan nuevas estrategias para revitalizar el valle y empiezan a apostar por un mercado emergente, la marihuana.

Más de la mitad de los estados de EEUU ha legalizado de alguna forma el consumo de marihuana medicinal, lo que ya suponía un negocio millonario sobre el que muchas empresas habían echado el guante en los últimos años. Sin embargo, la legalización de esta droga para uso recreativo en el estado de California supone un paso más allá que promete un enorme crecimiento del mercado. 

La nueva regulación californiana entrará en vigor el próximo 1 de enero, con lo que se unirá a los otros siete estados que también permiten su consumo recreativo: Alaska, Colorado, Maine, Massachusetts, Nevada, Oregon y Washington. Sin embargo, la incorporación del estado del sol, el más poblado del país con 40 millones de habitantes y una de las economías más grandes del planeta, supone un salto cuantitativo importante.

Las ventas del mercado legal de marihuana en EEUU alcanzaron los 6.700 millones de dólares en 2016 y podrían superar los 20.000 millones al año en 2020, según un informe publicado por Arcview, una compañía especializada en el mercado del cannabis.

Los datos publicados confirman un crecimiento anual superior al 25% durante los últimos 5 años y “las únicas industrias de consumo que han tenido un crecimiento similar han sido la televisión por cable en los 90 (19%) y la banda ancha de internet en la década de 2000 (29%)”, aseguró Tom Adams, uno de los responsables de Arcview.

Aun así, la mayoría de las grandes farmacéuticas y las biotecnológicas que cotizan en bolsa se han mantenido al margen de este mercado, algo que también han hecho mayor parte de las grandes empresas de capital riesgo, que suelen mantener ciertas cláusulas de moralidad en sus acuerdos con los inversores y que temen que invertir en cannabis afecte a su reputación.

Silicon Valley apuesta por el mercado verde

Pero si los actores tradicionales no están prestando atención a esta industria, hay todo un ejército de emprendedores que buscan oportunidades en los negocios que rodean el mercado de la marihuana. Las nuevas empresas ya no se centran solo en cultivo de diferentes cepas para uso médico o recreativo, sino que están desarrollando aplicaciones para controlar las plantaciones mediante el móvil, creando nuevos productos comestibles, sistemas de seguimiento de semillas, nuevos mecanismos de distribución y un largo etcétera.

En los últimos años no son pocos los trabajadores que han abandonado gigantes como Microsoft, Facebook o Apple para apostar decididamente por el nuevo mercado verde y tratar de convertirse en el Google o el Facebook de la marihuana y los inversores de Silicon Valley han tomado buena nota de ello.

Uno de los grandes inversores de la zona sur de la Bahía de San Francisco es Benchmark Capital, que en el pasado financió proyectos como Twitter, Instagram o Uber y que hoy está apostando decididamente por empresas como Hound Labs, en la que ha invertido unos 8 millones de dólares. Esta empresa ha sido la primera en desarrollar un dispositivo que detecta y mide los niveles de tetrahidrocannabinol (THC) en el aire expirado y que podría ser utilizado tanto por los consumidores como por la policía (de forma similar a un alcoholímetro).

Otra de las grandes firmas de capital de riesgo que ha apostado fuerte por las empresas emergentes de la marihuana es Founders Fund, creada entre otros por Peter Thiel, uno de los fundadores de PayPal. Esta firma ha invertido grandes cantidades de capital en Privateer Holdings, una compañía de Seattle que administra varios negocios de cannabis, entre los que destaca Tilray, un laboratorio especializado en el desarrollo e investigación de cultivos de marihuana.

Buscando alternativas al 'porro'

Pero uno de los mercados que más está creciendo es el de las formas alternativas de consumo de marihuana, ya que, según Arcview, los productos comestibles se están convirtiendo en los favoritos de los consumidores. Empresas como Defonce Chocolatier, impulsada por Eric Eslao, antiguo trabajador de Apple, que produce y vende distintos tipos de chocolate con marihuana medicinal o la compañía Plus, impulsada por el extrabajdor de Facebook, Jake Heimark, que se ha centrado en la producción de chicles y caramelos de cannabis.

También existen empresas que han surgido en el ámbito de la distribución y que permiten recibir la droga en casa de forma rápida y discreta. Entre ellas, la que más destaca es Eaze, conocida popularmente como el 'Uber de la marihuana' y que vende su servicio a los consumidores, que son los que contratan a los conductores para hacer las entregas.

Estos son tan solo algunos de los múltiples ejemplos que están surgiendo en torno al mercado de la marihuana y muchos están orientados a resolver algunos de los problemas a los que aún se tienen que enfrentar las empresas del sector, como el hecho de que las instituciones financieras no acepten el dinero que genera esta industria, por ser ilegal a nivel federal, o el intento de algunos senadores de prohibir el merchandising publicitario de las nuevas empresas.

Microsoft también se apunta

Aún así, el crecimiento de este mercado parece imparable e incluso un gigante del sector tecnológico como Microsoft anunció en junio del pasado año que se asociaría con la startup Kind para crear un software destinado a facilitar las ventas y hacer más transparente el comercio de marihuana en los estados en los que esté legalizado.

El sistema, que está siendo desarrollado a partir de la plataforma de alojamiento de datos en la nube de Windows, denominada Azure, servirá para etiquetar, catalogar y realizar un seguimiento y control de las distintas especies que se distribuyan por el estado, desde la plantación hasta el punto de venta.

Por otra parte, algunos medios especulan con la posibilidad de que Apple vaya a apostar por un dispositivo para fumar marihuana, ya que el pasado mes de enero publicó la patente de un vaporizador o cigarrillo electrónico. Aunque apenas hay detalles sobre este dispositivo, la patente describe “una sustancia que se va a vaporizar o sublimar en un vapor”, sin especificar qué sustancia podría ser.