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Detenidos dos periodistas franceses en la sede central de la Asociación Marroquí de Derechos Humanos

Un furgón de la policía marroquí en los exteriores de la sede de la AMDH en Rabat. / AMDH.

Desalambre

La policía marroquí tomó el pasado domingo por la tarde la sede de Rabat de la Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH), para detener a dos periodistas franceses. “Entraron sin ninguna orden, tomaron las llaves con violencia y se llevaron a los periodistas y el material que tenían”, denuncia Youssef Raissouni, miembro de la AMDH desde la capital del reino alauí.

Los profesionales, Jean-Louis Perez y Pierre Chautard trabajan en la agencia Premières Lignes y estaban preparando un documental sobre la economía en Marruecos para el canal público de televisión France 3, según la información de la agencia AFP que recoge el diario Libération.

“Se llevaron a los periodistas porque decían que no tenían autorización para grabar y los han expulsado”, cuenta Raissouni, que afirma que los profesionales han llegado ya a Francia. “A las cinco de la tarde llegó un grupo de policía vestida de civil y entraron de manera ilegal”, continúa.

Según las declaraciones de Paul Moreira (director de la agencia Premières Lignes) recogidas por los medios franceses, los periodistas habían solicitado el permiso para filmar hace varias semanas pero no habían obtenido respuesta por lo que pensaron que no sería necesaria.

Los hechos tuvieron lugar cuando no habían pasado ni 48 horas de la visita del ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve, a la capital marroquí.

Según Youssef Raissouni, el ataque “forma parte de una campaña de acoso a las organizaciones de defensa de los derechos humanos, y especialmente de la Asociación Marroquí de Derechos Humanos, desde el pasado 15 de junio de 2014”. La AMDH es la organización de este tipo más grande del país.

El ministro Mohamed Hasad utilizó el pasado 15 de febrero el parlamento marroquí para atacar la actuación de varias ONG que “animan a organizaciones internacionales a tomar posiciones hostiles contra Marruecos” y que presentaban datos sobre violencia y torturas “erróneos”, apuntó.

Mohsin Heddad, miembro de la AMDH en Madrid, cree que, además de un ataque a la libertad de expresión, este suceso evidencia el ambiente de persecución hacia varias ONG por las autoridades alauíes: “Es muy grave que entren por la fuerza en una organización de defensa de los derechos humanos, han pegado a algunos actistas”. “Este hecho nos recuerda a la época de Hassan II. ¿Esto es democracia? No lo creo”, lamenta Heddad.

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