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Amparo Pérez permanece “estable dentro de la gravedad”

Amparo Pérez, en su vivienda de la Vaguada de Las Llamas.

Laro García

Amparo Pérez continúa ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la Residencia Cantabria, se encuentra sedada y su estado de salud es “estable dentro de la gravedad”. Las próximas 24 horas serán determinantes para saber cómo evoluciona.   

La mujer de 86 años fue trasladada a la UCI en parada cardiorrespitatoria. Ha estado “intubada y muy grave” y la familia ha decidido entregar las llaves de la vivienda y dar “máxima prioridad” a la recuperación de la anciana, cuyo desalojo estaba previsto para este mismo jueves.

Desde las 7.00 horas de la mañana, un grupo de unas 60 personas convocadas por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) permanecían en la finca de Amparo, expropiada debido a la construcción de un nuevo vial entre la Avenida de Los Castros y la autovía S-20. La PAH se había puesto al servicio de la familia, que se encuentra en el centro hospitalario. Su deseo era que no se produjese el desalojo pero tampoco que se tomaran medidas de fuerza. 

Tras las últimas informaciones recibidas desde el hospital, la PAH ha decidido disolver la protesta y convocar una nueva concentración para este viernes, a las 12.00 horas, frente al Ayuntamiento de Santander, como muestra de apoyo del colectivo hacia Amparo Pérez y su familia.

El estado de salud de la afectada ha sufrido un deterioro “muy importante” desde que el pasado martes mantuvo una reunión con el alcalde de la ciudad, Íñigo de la Serna, y otros miembros del equipo de Gobierno municipal. Previamente, un informe médico había alertado del riesgo que suponía la tensión a la que se había visto expuesta la anciana, con un cuadro de dolencias muy amplio.

Del encuentro con el máximo responsable municipal, Amparo y su familia salieron con la idea de que podría permanecer en su hogar hasta que se encontrase una solución, una nueva vivienda cercana a la de sus nietos y con similares características a la que ha vivido durante las últimas seis décadas. Una idea que se vino abajo tras escuchar las declaraciones ante los medios de comunicación del alcalde, que señaló este jueves 5 de febrero como fecha límite para el desalojo.

En la mañana del día siguiente acudió a Urgencias, donde los médicos le aconsejaron que permaneciese al menos 24 horas en vigilancia ante su delicado estado de salud, que ha ido a peor y que hace temer por su vida. Ante esta situación, la familia ha decidido dejar en un segundo plano sus reivindicaciones y sigue pendiente de su evolución, que conocerán en un nuevo informe hospitalario partir de las 11.00 horas de este viernes.

Además, miembros del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Santander han manifestado su “apoyo” a la familia de Amparo Pérez, y el alcalde ha afirmado a preguntas de los periodistas que “lo importante” y “lo único que les preocupa” es que se recupere. “Lo importante es lo importante”, ha aseverado De la Serna. La familia ha rehusado hablar telefónicamente con el portavoz del equipo de Gobierno.  

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