Hereu dice que las competencias de pisos turísticos son de las comunidades aunque el Estado está “para ayudar”

El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, ha señalado que las comunidades autónomas son las responsables de la ordenación de la oferta turística y por tanto de regular la proliferación de los pisos de uso turístico, aunque el Estado está “también para ayudar”.

A su juicio, se debe “trabajar bien la oferta y apostar por la calidad” pensando en la vía de la “triple sostenibilidad”, que consiste en un modelo turístico, social y ambiental. “Quedan claras las reglas del juego”, ha dicho este miércoles a preguntas de los medios sobre qué administración debe tener más peso en la regulación de los pisos turísticos.

Hereu, que ha hecho estas declaraciones en su visita a Cantabria, y en concreto en las instalaciones de la fábrica de Solvay en Barreda (Torrelavega), ha respondido que “las leyes lo establecen de manera muy clara: son las autoridades locales y la administración autonómica los responsables de la ordenación de la oferta turística, por tanto, las competencias son claramente atribuibles a las comunidades autónomas”.

No obstante, cree que el Estado puede contribuir mediante reglamentos europeos que espera que “nos ayuden a poder facilitar instrumentos que ayuden a los que tienen que ordenar la oferta turística, en este caso los pisos de alquiler”.

El ministro ha destacado que España “tiene un enorme éxito y una atractividad” que hace que los visitantes internacionales estén creciendo, lo que ve como “un éxito compartido de país” y ante lo que ha insistido que “lo que tenemos que hacer es cada vez apostar más por la calidad de la oferta turística”.

“Esto, entre otras cosas, pasa por ordenar la oferta de pisos turísticos”, ha apostillado, señalando que “hay muchas iniciativas” en diferentes comunidades y ciudades que en la actualidad tienen abierto este debate para limitar esos alojamientos “después de una etapa donde esto no se ha regulado”.

Respecto al crecimiento de turistas, ha señalado que a Cantabria llegaron el año pasado casi medio millón de visitantes internacionales que hicieron un gasto de más de 500 millones.