La Junta de Gobierno Local aprueba el proyecto de reordenación de la Plaza de las Estaciones
La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Santander aprobará este lunes el proyecto de reordenación de la plaza de las Estaciones, que saldrá a licitación posteriormente por un presupuesto de 2.787.000 euros y un plazo de ejecución de 10 meses.
El concejal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda, César Díaz, ha explicado que esta actuación supone intervenir en una superficie total cercana a los 20.000 metros cuadrados para regenerar y consolidar esta zona.
Se llevará a cabo una mejora global que supondrá la recuperación de espacios degradados, la creación de zonas verdes, la optimización del tráfico rodado, la reurbanización de áreas infrautilizadas, como la propia plaza de las Estaciones, y la mejora y racionalización de los recorridos peatonales y de acceso a las estaciones, ha indicado.
La previsión del equipo de Gobierno es que el proyecto pueda estar adjudicado en este año, de manera que las obras comiencen a principios de 2017.
El concejal ha recordado que a finales de julio se firmó el convenio de colaboración entre el Ayuntamiento y ADIF por el que cede en uso los 6.200 metros cuadrados de los que es propietario dentro del ámbito de actuación, para que el Consistorio lleve a cabo la ejecución de las obras.
“Seguimos poniendo en marcha más y más inversiones productivas en la ciudad, que, además de la renovación del entorno urbano y de la creación de nuevas dotaciones e infraestructuras al servicio de los ciudadanos, suponen generar actividad económica y empleo, mejorando así la calidad de vida de los santanderinos”, ha subrayado el concejal.
El responsable municipal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda ha señalado que este proyecto va a afectar a un espacio céntrico y de gran valor que, a día de hoy, se encuentra “deteriorado”, tanto en lo que afecta al viario como a las áreas peatonales y estacionales, por lo que se ha planteado una propuesta global para conseguir un espacio “más amable y funcional”.
“Se trata de dar solución a un entorno que soporta un flujo desde Jesús de Monasterio hacia las Estaciones de aproximadamente 740 vehículos a la hora, en un área donde se concentran siete líneas del TUS, unos 60 autobuses regionales y de cercanías cada hora y un flujo peatonal adicional resultante de la llegada y salida de seis trenes a la hora”, ha apuntado Díaz.
En este sentido, ha indicado que para racionalizar el tráfico, se incorpora una rotonda elíptica que dé solución a las múltiples variables que inciden en esta área de la ciudad. La rotonda contaría con dos carriles de cuatro metros cada una, para dar cabida a las incorporaciones tanto del tráfico de paso como el de salida desde la estación de autobuses.
También se pretende optimizar los accesos a las áreas de aparcamiento, minimizando así su impacto sobre la circulación viaria. Para conseguirlo, se proyecta un vial de servicio en paralelo a la Calle Atilano Rodríguez con dos carriles, que daría acceso a los coches hacia las dos estaciones de tren, a la parada de taxis y a los accesos a los aparcamientos de RENFE y FEVE.
Se creará una zona verde con una nueva superficie ajardinada superior a los 2.000 metros cuadrados frente a los 995 metros cuadrados ajardinados actualmente, lo que significa más del doble.
Se propone un itinerario peatonal claro y definido que responda a las necesidades de los recorridos para favorecer el tránsito en este punto intermodal, que estará dotado de áreas estanciales, con bancos y zonas verdes.
El proyecto contempla la organización racional de los espacios destinados a la espera del transporte público. Para ello, se reparten las dársenas para autobuses municipales evitando aglomeraciones y problemas de espacio cuando se acumulan los vehículos.
Además, se llevarán a cabo mejoras como la reposición de toda la iluminación de la zona con alumbrado LED de alta eficiencia; una nueva señalización horizontal y vertical en todo el entorno de las estaciones; la incorporación de tres aparcamientos de bicicletas, tanto municipales como privadas; y la elección de un pavimento ecológico, que incorpora en su composición materiales reciclados y que tiene la capacidad de absorber los óxidos de nitrógeno.
