Los sindicatos docentes de Cantabria advierten a Buruaga: sin una reunión urgente habrá nuevas huelgas

Los sindicatos docentes de Cantabria han lanzado un ultimátum a la presidenta autonómica, María José Sáenz de Buruaga (PP): o abre de inmediato una vía de diálogo para desbloquear el conflicto salarial del profesorado o habrá nuevas huelgas tras las recientes que han tenido lugar este mes de septiembre en el inicio del curso académico.

Así pues, la Junta de Personal Docente ha reclamado una reunión urgente con la jefa del Ejecutivo autonómico tras constatar que el consejero de Educación mantiene “bloqueadas las negociaciones” con su controvertida 'Cláusula Silva', que, a juicio de los sindicatos, “impide cualquier resolución”. “El consejero se niega a ofrecer una salida y rehúye la interlocución con el profesorado”, han denunciado los sindicatos.

El Gobierno de Cantabria ha justificado su negativa a reconocer la adecuación retributiva alegando falta de recursos. Sin embargo, la Junta de Personal ha recordado que, “tal y como ha trascendido en los medios de comunicación, el Ejecutivo dejó sin gastar 135 millones de euros del presupuesto del pasado ejercicio”. Una cantidad que, aseguran, “desmonta de raíz el argumento de que no hay dinero” para atender las reivindicaciones del profesorado.

Los representantes sindicales insisten en que la situación está bloqueada desde el pasado 25 de agosto, cuando el consejero abandonó la mesa de negociación, dejando sin alternativas la posibilidad de un acuerdo que evitara los paros. Desde entonces, añaden, no ha vuelto a reunirse con la Junta de Personal.

Y es que el inicio de curso ya estuvo marcado por huelgas en todos los niveles educativos y una movilización de más de 8.500 docentes en las calles de Santander. “El malestar es patente, el profesorado está cansado de excusas y exige soluciones”, han subrayado los sindicatos en un comunicado.

Así pues, consideran “imprescindible” que la presidenta asuma las riendas de la negociación “para recuperar la normalidad en los centros”. De no hacerlo, han advertido, la Junta de Personal “se verá obligada a intensificar las movilizaciones, continuar con las protestas en la calle y convocar nuevas huelgas”. “La educación pública de Cantabria merece respeto y compromiso, y el Gobierno no puede hacer oídos sordos a los más de 8.500 docentes protestando en las calles”, han concluido