Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
Gobierno y PP reducen a un acuerdo mínimo en vivienda la Conferencia de Presidentes
Incertidumbre en los Altos del Golán mientras las tropas israelíes se adentran en Siria
Opinión - ¡Con los jueces hemos topado! Por Esther Palomera
Sobre este blog

Carta con respuesta es un blog del escritor Rafael Reig. Dejad vuestros comentarios en este blog sobre vuestras preocupaciones políticas, sociales, económicas, teológicas o de cualquier índole, y él os responderá cada martes.

A Su Santidad

Rafael Reig

He leído con interés la entrevista que le han hecho en Il Messagero y me ha sorprendido (entre otras muchas majaderías que suelta usted por esa boca) su intensa preocupación por la natalidad y por la situación de la mujer.

Usted, Sumo Pontífice, está al frente de una organización de hombres solos que hacen voto de castidad y en la cual las mujeres no pintan nada, ni siquiera pueden ser sacerdotes. Sin embargo, se muestra alarmado por la baja natalidad en Italia y en España. Menudo cuajo, ¿no le parece? ¿Cuál es el Estado con menos natalidad del mundo? Exacto, Ciudad del Vaticano, del que por cierto es usted el jefe, aunque no elegido democráticamente, por supuesto.

Su posición en este punto debe de ser la misma que la de ese tipo, fundador del Opus Dei, al que Francisco Franco nombró marqués (a petición del interesado) y su iglesia nombró santo por la vía más rápida.

San Josemaría (todo junto, como los pijos de Serrano) decía: “El matrimonio es para la clase de tropa y no para el estado mayor de Cristo” y añadía que “engendrar es exigencia sólo para la especie, pudiendo desentenderse las personas singulares” (Camino, punto 28).

Hay que fastidiarse con las “personas singulares”, pero en cualquier caso, si se desentiende, no tenga la desvergüenza de darnos consejos a la clase de tropa que sí tenemos hijos, haga usted el favor. A mí no me cuente que “avere un figlio è una cosa complessa”. Qué sabrá usted.

En cuanto a las mujeres, ¿usted cree que a estas alturas se pueden decir tantas tonterías machistas juntas?

Le donne sono la cosa più bella che Dio ha fatto”. ¡Olé y olé! ¡Vaya piropo! Me parece que ya ni José María Pemán ni Manolo Escobar ni un albañil desde su andamio se atreverían a decir una sandez semejante.

Y si le preguntan más, entonces responde con una broma francamente casposa: “Il fatto è che la donna è stata presa da una costola… (ride di gusto). Scherzo, la mia è una battuta”. El hecho es la mujer fue sacada de una costilla, ja, ja, y al parecer se ríe a carcajadas, para luego disculparse: que era broma, una inocente battuta, mujer, no te pongas así, ja, ja, ja.

Formidable. Chiripitifláutico incluso. Recuérdeselo a nuestra reina cuando vaya a verle, seguro que también se ríe a mandíbula batiente con su battuta.

No creo que ahora nadie pueda dudar de su capacidad y sensibilidad para combatir el machismo, ¿verdad?

Y encima añade que “la Chiesa è donna”. ¿Que la Iglesia es mujer? Será por eso que no pueden ordenarse sacerdotes las mujeres, ¿verdad?

En vista de lo leído, la pregunta que le quiero hacer es: ¿y si Dios fuera mujer?

Piénselo. Si Dios fuera una mujer, ¿qué pensaría de sus chistes y sus piropos?

¿O por qué no una mujer de raza negra? Al fin y al cabo, las feministas solían decir: “Dios es negra”.

Le transmito la pregunta desde la obra de un compatriota suyo, Juan Gelman (que tuvo muchos más problemas con la dictadura argentina que usted). Si todavía no lo ha hecho, le recomiendo que lo lea.

¿y si Dios fuera una mujer? alguno dijo

¿y si Dios fuera las Seis Enfermeras Locas de Pickapoon? dijo alguno

¿y si Dios moviera los pechos dulcemente? Dijo

¿y si Dios fuera una mujer?

Piénselo. Piense en el dulce pero inquietante balanceo de las tetas de Dios, y lea el poema de Juan Gelman para saber cómo acaba la historia, cualquier historia, en todos los sitios de Dios:

¡tetas de Dios! ¡blancos muslos de Dios! ¡lechosos! Dijo

¡leche de Dios! gritaba por los techos de toda la ciudad

así que lo quemaron

hicieron una hoguera alta al pie de la colina del Este

y también quemaron a las Seis Enfemeras Locas de Pickapoon

todas eran rubias y cada día habían visto a la muerte trabajar

eso es todo

así acaban con los temblores mortales e inmortales en Carolina

y otros sitios de Dios

¿y si Dios fuera una mujer?

¿y si Dios fuera las Seis Enfermeras Locas de Pickapoon? dijo alguno.

Sobre este blog

Carta con respuesta es un blog del escritor Rafael Reig. Dejad vuestros comentarios en este blog sobre vuestras preocupaciones políticas, sociales, económicas, teológicas o de cualquier índole, y él os responderá cada martes.

Etiquetas
stats