Un alcalde del PP, contra la difusión de los plenos: “Las cosas van a cambiar”

Al alcalde de la localidad conquense de Casasimarro (Cuenca), Juan Sahuquillo, del Partido Popular, no le gusta que se graben los plenos del Ayuntamiento. Así lo ha manifestado en el pleno celebrado el pasado 5 de enero, donde mostró su indignación por el hecho de que el contenido de la sesión saliera a la luz pública y de la misma se hagan eco los medios de comunicación. Responsabilizó de ello al portavoz de Ahora Casasimarro, Andrés Fernández, quien, atendiendo a su mandato de transparencia, publica las grabaciones de las sesiones plenarias.

“De aquí en adelante las cosas van a cambiar, claro que con la ley... pero la ley hay que dejarla un poco aparte y sobre todo a los partidos, estamos aquí para trabajar por los ciudadanos”, advertía el primer edil quien acusó al portavoz de Ahora Ganemos de “no ser quién para sacar públicamente las cosas del pueblo”. “Se dicen aquí y nosotros veremos si están bien o mal, si se rectifican o no”, señalaba Juan Sahuquillo, advirtiendo al edil de que por estos hechos sus compañeros de Corporación “te van a mirar con antipatía”. Estas palabras se producen al comienzo del pleno:

Algo que para el portavoz de Ahora Casasimarro es “muy grave”, puesto que “parece que no importa qué se hace o cómo se hace si la gente no se entera. Es como si la mayoría absoluta les diera carta blanca para hacer lo que les venga en gana. Nosotros defendemos la transparencia y seguiremos grabando los plenos para que los vecinos puedan tener toda la información”, apostilla.

Se da la circunstancia de que la indignación del alcalde se produce por el pleno en el que se planteó que un el edil ya jubilado, Isidoro Bernal, cobrara del Ayuntamiento sin pagar a la Seguridad Social para seguir recibiendo su paga de pensionista. “O cobro 1.900 euros brutos al mes del Ayuntamiento o me voy a mi casa”. Es el ultimátum que dio al pleno este edil, quien tras saltar a la luz pública la polémica propuesta de cobrar una retribución municipal sin tener que cotizar, finalmente solventaba su situación de incompatibilidad con la aprobación de una liberación que entraba en vigor a principios de este 2016.

Se trata de la primera vez que un concejal se libera en el Ayuntamiento de Casasimarro, una cuestión a la que, por la entidad del municipio, ampara el derecho, aunque desde la oposición critican la exigencia del concejal y las formas del equipo del PP en la aprobación de un sueldo que marca el propio edil, quien de forma categórica insistió una y otra vez que no se movía de su postura: “700 euros de mi paga más otros 700 del Ayuntamiento, incluida la furgoneta” es el sueldo neto que solicitó como condición para seguir en el equipo de Gobierno y que ya podrá percibir en este mes de enero.

La opción de Ahora era que no fuera liberado

La oposición entiende que la decisión de liberar o no a un concejal de su equipo corresponde al equipo de Gobierno, pero con todo, desde Ahora Casasimarro, su portavoz, Andrés Fernández, considera que si el objetivo es el ahorro, como así defendían tanto el alcalde como su concejal cuando proponían a los miembros del pleno que pensasen en las ventajas que para las arcas municipales suponía que Isidoro Bernal pudiera percibir un sueldo sin pagar la Seguridad Social, en lugar de liberarlo, su tarea podrían asumirla entre los siete concejales restantes que perciben una remuneración de 400 euros mensuales.

El primer edil, Juan Sahuquillo defiende la postura de su concejal tanto por “ser una persona que ha hecho más que ningún alcalde” al dedicar todo su tiempo al Consistorio, apostillando que ningún concejal podría hacerlo por sus obligaciones laborales, como porque considera que aunque la ley diga que para percibir su pensión no puede cobrar un sueldo, entiende que “duele” no poder hacerlo.

De esta forma, el edil percibirá el total del que disfrutaba mientras mantuvo la pensión y el sueldo de 500 euros brutos en concepto de su liberación parcial en el Ayuntamiento, a lo que suma los 300 euros mensuales de indemnización por el uso de una furgoneta de su propiedad durante el tiempo que dedica a realizar sus labores municipales como concejal de Urbanismo y Hacienda, aunque el Ayuntamiento dispone de vehículos. La explicación que da el Consistorio a este tema, como así consta en las actas del pleno celebrado en el 23 de noviembre (publicadas en la web municipal) ante las preguntas de Ahora Casasimarro, es que “el problema es que no quiere coger el vehículo del Ayuntamiento porque tiene que echar gasoil y públicamente le ven, y que si hace una gestión privada tiene que estar cambiando de vehículo”.

Eso sí, Isidoro Bernal, tras indicar que nunca ha pretendido beneficiarse del Ayuntamiento y que es tan legal “como el que más” insistió en destacar que trabaja más de 35 horas semanales por lo que consideró que si el Ayuntamiento puede prescindir de él y que otro hiciera su tarea por menos dinero “yo me voy tan tranquilo a mi casa”. La propuesta de liberación salió finalmente adelante con los votos en solitario de la mayoría del PP, la abstención del concejal liberado y la oposición de PSOE y Ahora Casasimarro.