La regularización laboral de la enfermería especializada, una demanda todavía pendiente
El Servicio de Salud anunció recientemente que, a lo largo de marzo, se entregaría a los sindicatos involucrados un primer borrador del decreto de especialización en enfermería. El mismo organismo, reconocía que se trata de una de las “carencias” en la estructura profesional del Sescam, ya que sólo está regulada una de sus especialidades, la de matrona.
Con este borrador, se trabajará en dos nuevas especialidades: Salud Mental y enfermería del Trabajo. La “principal” característica del desarrollo será la creación de una categoría de enfermera especialista, de la cual dependerán las distintas especializaciones. Con esto, pretenden llevar a cabo una tramitación “más ágil y flexible” tanto de las especialidades que ya existen, como de las que se aprueben. El decreto debería estar aprobado este año, según las previsiones del Gobierno regional.
Una regulación reivindicada “desde siempre”
El secretario regional de SATSE, Juan Francisco Ruiz, explica que la enfermería especializada es una reivindicación que el colectivo profesional ha tenido “desde siempre” y que tanto el Gobierno anterior como el actual ya han anunciado. De hecho, afirma que el actual lo anunció ya durante 2016, tanto por parte de la gerente del Servicio de Salud regional, Regina Leal, como por parte del consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz.
“Entendemos que es algo básico por el bien asistencial. Pero, por ahora, sólo existe el de matrona gracias a una directiva europea”, asegura. Explica, que en otras comunidades como Aragón, Canarias o Euskadi, entre otras, esto ya se ha desarrollado. En el caso de Enfermería de Trabajo ya hay “varias” que la tienen, mediante la creación de un decreto especialista, dentro del cual se van “colgando” todas las especialidades.
“Hay mucho que perfilar, estudiar cuáles serán los puestos de trabajo y determinar cómo harán los centros para trabajar con la reconversión”, asegura Ruiz. Por eso, desde el Sindicato de Enfermería, abogan por respetar el proceso para elegir la especialidad, y estudiar el tratamiento que ya se ha visto en otras comunidades para que no se “perjudique” a los profesionales que no tienen la especialidad. A nivel académico, se convocan “muchas” plazas de especialidad, que llevan saliendo ya “varios años.
A pesar de que existe regulación académica, no la hay desde el punto de vista laboral, explica Ruiz. Ésto se lleva a cabo a lo largo de la residencia, y también en la región hay profesionales formándose de todas las especialidades, con la excepción de la enfermería médico quirúrgica. “Estamos un poco a la cola en el desarrollo de estas especialidades, y si, de hecho, se logran las de Salud Mental y de Trabajo avanzaríamos, pero existen otras regionales que ya las tienen todas creadas”, concluye.
