La CUP tiende la mano a Sí que es Pot para evitar “reconfortar a los poderosos que nos quieren enfrentados”
Crítica y propuesta de la CUP hacia Catalunya Sí que se Pot, dos grupos parlamentarios en teoría próximos en cuanto a su posicionamiento ideológico -de izquierda y defensores ambos de un proceso constituyente, los primeros dentro de una República catalana independiente- pero que no acaban de encontrar complicidades en el Parlament. Los cuatro diputados y seis diputadas de la CUP han movido ficha. Han enviado una carta donde lamentan “la sensación de linchamiento en las redes y en el Parlament” hacia la CUP por parte de representantes de Catalunya Sí que se Pot, en especial de ICV. También instan a la confluencia de izquierdas a dejar atrás las críticas y “trabajar codo a codo en la construcción de alternativas y en la respuesta que necesitamos dar al proceso que vive el país”.
En una carta firmada por los 10 parlamentarios de la CUP, los anticapitalistas han querido trasladar la “preocupación por algunas conductas políticas” de miembros del grupo parlamentario de Catalunya Sí que se Pot. Han puesto como ejemplo la intervención en el último pleno de la diputada Hortènsia Grau (ICV), que en una moción sobre ATLL reprochó a la CUP impedir que se votara revertir su privatización.
A juicio de los anticapitalistas, estas declaraciones de Grau forman parte de una “estrategia clara de ataque a la CUP” por parte de algunos miembros de Sí que es Pot y de portavoces de ICV que tiene por objetivo “hacer evidenciar contradicciones” internas de la formación anticapitalista. Todo ello, según la CUP, sirve para “reconfortar a los poderosos que nos quieren enfrentados y divididos”.
El diputado de Sí que es Pot, Albano-Dante Fachin (Podem), ha sido el primero en contestar la CUP a través de Twitter. Por su parte, la portavoz de ICV, Marta Ribas, ha señalado que no coincide con el relato que hace la CUP a la carta, pero ha añadido que que su grupo sigue teniendo la mano tendida a los anticapitalistas para construir alternativas a las “políticas de derechas”. “No coincidiremos nunca para aprobar estrategias de la derecha de CDC”, ha alertado, en referencia al acuerdo de la CUP con Junts pel Sí.
Los cupaires han propuesto a CSQEP que, aunque “leen de forma diferente” la situación política entre Catalunya y España, “trabajar codo a codo en la construcción de alternativas, en la respuesta que necesitamos dar al proceso que vive el país , y sobre todo de diques de contención del capitalismo salvaje que castiga nuestro país y su gente”.
A juicio de los anticapitalistas, ambos grupos parlamentarios comparten “puntos de encuentro”, como el ecologismo o la defensa de los servicios públicos, lo que debería permitir “sacar adelante luchas de forma conjunta y como compañeras de barricada”.
Lee la carta de los representantes de la CUP en el Parlament
