Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
La guerra entre PSOE y PP bloquea el acuerdo entre el Gobierno y las comunidades
Un año en derrocar a Al Asad: el líder del asalto militar sirio detalla la operación
Opinión - Un tercio de los españoles no entienden lo que leen. Por Rosa María Artal
Sobre este blog

Ciencia Crítica pretende ser una plataforma para revisar y analizar la Ciencia, su propio funcionamiento, las circunstancias que la hacen posible, la interfaz con la sociedad y los temas históricos o actuales que le plantean desafíos. Escribimos aquí Fernando Valladares, Raquel Pérez Gómez, Joaquín Hortal, Adrián Escudero, Miguel Ángel Rodríguez-Gironés, Luis Santamaría, Silvia Pérez Espona, Ana Campos y Astrid Wagner.

La Universidad Rey Juan Carlos en positivo: una carta para nuestros alumnos, sus familiares y sus amigos

Campus de la URJC

Adrián Escudero / Fernando Valladares

Casi anestesiados por la lluvia que no cesa de escándalos de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC) aventados por la prensa, de chistes poco imaginativos en los bares, de caras de sorpresa o dolor de los que nos quieren, gritando sin abrir la boca, de indignación y frustración de los que están con nosotros, que conocen nuestro esfuerzo de cada día, parece absurdo volver a repetir que todo ha resultado del quehacer torticero y deshonesto de unos pocos, combinado, quizás, con una exacerbación de los problemas de gobernanza de nuestro sistema público de universidades a los que nunca se ha querido o se ha sabido meter mano. Los colegas de profesión, no sólo españoles, nos dan su apoyo mientras los chicos y chicas que trabajan y se forman en nuestras aulas y laboratorios se dan de bruces con dificultades extra para desarrollar una carrera científica en nuestro país mientras ahí fuera su esfuerzo es vilipendiado o cuando menos ridiculizado.

No sé, solo queda contar lo que hacemos y poner números de nuestro desempeño sobre la mesa. Puede que sólo alguno de vosotros sea consciente de que llevamos instalados en el buque de Ciencia Crítica desde el principio de la aventura del eldiario.es, realizando su trabajo en la universidad, en la URJC más concretamente. Desnudémonos delante de todos para que quede claro lo injusto y desatinado que es abandonar a los que trabajamos allí. En la URJC intentamos llevar a cabo nuestro servicio público como investigadores, docentes y trabajadores honestos. Como Umbral en su día, hoy hemos venido a hablar de nuestro libro; de lo que hemos hecho unos cuantos investigadores en este entorno; en realidad, la mayoría, porque los ejemplos de buen hacer en la URJC son numerosos. Da pudor, mucho, pero no sé cómo se puede ayudar de otra manera a los estudiantes que osan completar sus grados y sus másteres con nosotros, a todos aquellos que están haciendo sus tesis doctorales o se forman como investigadores postdoctorales aquí, gente que viene de rincones diversos del planeta y que tienen que vivir con ese estigma y, por supuesto, a los profesores, profesoras y personal de administración que desarrollan su trabajo a nuestro lado. Nuestro grupo es un ejemplo entre muchos, un exponente de lo que es una universidad pública, con sus méritos y sus limitaciones, y un caso que ilustra bien lo injusto de generalizar a partir de personas y actividades extremas que están de hecho siendo analizadas en sede judicial.

Nuestro grupo comenzó su andadura con la entrada del milenio vistiendo una etiqueta de Unidad de Biodiversidad y Conservación para cubrir las necesidades docentes y de investigación en cuestiones de urgente demanda de conocimiento relacionados con la mitigación y adaptación al Cambio Global, la Restauración Ecológica y la Conservación de la Biodiversidad (BdCo-URJC Unit). Nuestro objetivo era constituir un centro de referencia a nivel mundial con la incorporación de investigadores de reconocido prestigio procedentes de cualquier rincón del globo. La utilización de las herramientas disponibles para la captación de lo mejor de nuestra diáspora en régimen ultra competitivo como son las ayudas Ramón y Cajal o Juan de la Cierva financiadas por nuestro gobierno, las ayudas Marie Curie de la Unión Europea y la posterior consolidación de estos contratos nos permitió conformar una de las mejores plantillas de investigadores en estos temas de nuestro entorno europeo. Es una historia de éxito. Puede que esté mal que lo digamos nosotros. Pero alguien debe decirlo con la que está cayendo, la que ha caído y la que aún puede que caiga sobre la URJC. Los indicadores al uso, las estadísticas y todos los índices están disponibles y son públicos. Nuestro grupo está entre los mejor situados no sólo en Móstoles o en Madrid, ni siquiera en España, sino a nivel internacional.

Puede sonar vacío, como cuando nuestros rectores hablan de Excelencia, pero creemos profundamente en ello, mas allá de los fríos números. La capacidad de nuestro pequeño grupo para captar fondos competitivos para la investigación es extraordinaria (más de 4 millones de euros para los últimos cinco años). Todo ello acoplado a una producción científica destacada que alcanza las casi 500 publicaciones en revistas internacionales para este periodo de cinco años, de las cuales un porcentaje elevado se ha situado en revistas del primer cuartil, es decir entre las del 25% mas importantes de nuestras áreas de trabajo. Estamos especialmente orgullosos de publicar con regularidad en revistas multidisciplinares de alto prestigio, como Science o Nature y, sobre todo, de liderar todos esos trabajos y esfuerzos internacionales desde nuestro discreto agujero mostoleño.

Como consecuencia de ello y pese a nuestra juventud hemos conseguido situar a nuestra universidad, la denostada URJC, en el puesto 152 en nuestro ámbito de trabajo del famoso ranking de Shangai que evalúa miles de universidades. Además, no podemos dejar de señalar que todo se ha conseguido en el marco de una universidad pública en desarrollo y durante un periodo de crisis económica. Eso quiere decir que todos los investigadores de la unidad han tenido que desempeñar tareas docentes y administrativas en el máximo de lo dispuesto por la normativa vigente a expensas del tiempo que queda para investigar y preparar una docencia de vanguardia. Es muy relevante tener esto en cuenta porque indica el nivel de compromiso con el servicio público de todos los miembros de la Unidad.

Un plan estratégico consensuado nos ha permitido crecer y resultar atractivos a nivel internacional. Hemos puesto en marcha medidas pioneras en una universidad pública como la nuestra para hacernos competitivos y ofrecer un mejor servicio: infraestructuras de investigación de uso común en las que cada grupo abona una tasa de funcionamiento permitiendo el trabajo de aquellos que no consiguen financiación o son emergentes; una estructura reticular y nada jerarquizada para que la diversidad sea nuestro motor de éxito; una utilización compartida de las infraestructuras de investigación incorporadas independientemente del grupo que las consigue; una renuncia a la contratación de ayudantes no doctores para centrarnos sólo en figuras que tengan acreditación por agencias externas o de contratos de formación como investigadores muy competitivos como los contratos FPI (Formación de Personal Investigador) o FPU (Formación de Profesorado Universitario) que deben abandonar nuestra unidad una vez concluidos sus contratos; una organización de la docencia por una unidad interna que compacta el periodo docente para favorecer la disponibilidad de tiempo para investigar y minimiza la distancia entre los temas de investigación y las áreas docentes; un plan para consolidar puestos para investigadores incorporados en programas externos competitivos; una captación activa y una formación de técnicos de investigación; una organización de los espacios para los investigadores en formación sin asignación a grupos o profesores.

Nuestro servicio docente fluye en paralelo como indica el hecho de haber situado nuestro máster oficial de Técnicas de Conservación de la Biodiversidad y Ecología entre los primeros de nuestro ámbito tal como indica el ranking de El Mundo. En la misma línea el máster oficial de Restauración de Ecosistemas de carácter interuniversitario es líder también en el mismo ranking.

Os contamos lo que hemos conseguido para todos vosotros y para que sepáis a quien confiáis la formación de vuestros hijos. Llevamos a cabo nuestro trabajo en un marco competitivo y duro gracias a vuestros impuestos y a vuestros esfuerzos individuales. Lo raro es lo que está en los medios, los plagios de nuestro ex rector, los chiringuitos de un catedrático deshonesto, la connivencia culpable de algunos políticos de alto rango, las malas prácticas y la falta de ética de unos pocos. Necesitamos un cambio radical y profundo en la gobernanza de nuestras universidades, no sólo en la URJC, para que lo mejor nos pilote y para que lo bueno, lo mucho bueno, pueda emerger y domine la toma de decisiones para dar el mejor servicio a los ciudadanos. No somos una excepción.

Si hemos contado estos detalles es porque los conocemos bien, pero no somos ni mucho menos los únicos ni los mejores en la URJC. Estamos muy orgullosos de lo que hacemos y de lo que se hace en muchas otras unidades y grupos de nuestra maltratada Universidad Rey Juan Carlos. Dejadnos insistir: no somos una excepción, somos la norma. Por favor, no hagáis chistes con nuestro esfuerzo porque estaréis tirando u tiro al pie. Vivimos un ataque global a la enseñanza pública; no os quepa ninguna duda. Hoy somos nosotros, pero mañana serán otras universidades. Exijamos responsabilidades a los que tomaron decisiones torticeras pero estemos orgullosos del trabajo que se hace en régimen de dedicación completa, desinteresada y vocacional, en nuestras universidades. Y no dejemos que se empañe la imagen de esfuerzo, saber y rigor que predomina en el mundo académico en general y en la URJC en particular.

Sobre este blog

Ciencia Crítica pretende ser una plataforma para revisar y analizar la Ciencia, su propio funcionamiento, las circunstancias que la hacen posible, la interfaz con la sociedad y los temas históricos o actuales que le plantean desafíos. Escribimos aquí Fernando Valladares, Raquel Pérez Gómez, Joaquín Hortal, Adrián Escudero, Miguel Ángel Rodríguez-Gironés, Luis Santamaría, Silvia Pérez Espona, Ana Campos y Astrid Wagner.

Etiquetas
stats