Orihuela será la sede de un centro para el estudio de las inundaciones provocadas por el cambio climático
El president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha anunciado que Orihuela (Alicante) será la sede de un centro para estudiar las inundaciones provocadas por el cambio climático y “visibilizar” así la “compleja nueva situación”.
Asimismo, ha indicado que se habilitará un observatorio sobre cambio climático desde el que analizar “todos los indicadores” y “tener un cuadro de mandos” para hacer un seguimiento de la evolución del fenómeno.
Puig ha hecho el anuncio durante la 'Mesa institucional para la identificación de problemas y oportunidades en tres áreas: social, ambiental y económica', dentro de la jornada técnica de Vega Renhace, el plan de regeneración de la Vega Baja que la Generalitat impulsa tras las inundaciones por la gota fría del pasado septiembre y que se desarrolla este miércoles en el Aula de Cultura de Orihuela (Alicante).
Al término de su intervención y a preguntas de los medios, el presidente valenciano ha incidido en que la jornada sirve para analizar “cuál es el camino más oportuno” en materia de lucha contra las inundaciones y ha subrayado que ese centro tendrá su sede en Orihuela.
“Debe ser Orihuela el centro para estudiar todo lo que son estos cambios extraordinarios se están produciendo y ver de qué manera se pueden adoptar las respuestas más oportunas”, ha destacado Puig, que ha subrayado que la reunión de este miércoles “intenta analizar bien las distintas miradas y tener un diagnóstico certero”.
A su juicio, “no se puede actuar sin reflexionar” y, por ello, ha confiado en “acertar” el diagnóstico para evitar repetir “los errores que se cometieron en el pasado”.
El 'president' ha apostado por una nueva política territorial que se ajuste “a los nuevos tiempos y a los nuevos desafíos”, y para ello se ha programado esta jornada en la que se “aprende” de otras experiencias “trayendo experiencia y talento” de otros ámbitos “donde se han producido inundaciones de estas características”.
Sobre plazos, Ximo Puig ha pedido ser prudentes porque no se trata de una “ocurrencia” y ha señalado que se deberá contar con la incorporación de las universidades y de los “centros europeos que ya están trabajando” en esta materia.
“La especificidad de lo que presentamos no está en estos momentos planteada en ningún país europeo”, ha seguido y ha resaltado que la zona mediterránea es “donde está el centro de la implementación del cambio climático y donde hay más peligro real”.
De ese modo, ha considerado que debe ser aquí “donde se debe situar este centro de observación y de propuestas para minimizar el impacto de las inundaciones”.
Fondo de solidaridad
Preguntado a cerca del Fondo Europeo de Solidaridad, Ximo Puig ha recordado que es competencia del Gobierno de España y que debería pedirlo “no solo” para la Vega Baja sino para el conjunto de los efectos que se produjeron “en el conjunto de España”.
Así, ha aseverado que la Generalitat solicitó al Gobierno que acudiera al Fondo y ha confiado que “se produzca”. No obstante, ha precisado que esos fondos son “limitados” y, por ello, no son los fundamentales.
“Lo que sí es fundamental es que en el nuevo programa operativo de la Comunitat Valenciana se puedan introducir, a través de los fondos estructurales, acciones para las infraestructuras que se van a tener que realizar”, ha apuntado.
En ese sentido, el 'president' valenciano ha explicado que se ha debatido sobre cuáles son “las mejores” infraestructuras “para abordar una situación como la vivida”.
“Tenemos que ponernos de acuerdo en base a lo que los ingenieros y científicos, las personas que son los expertos que tienen que aportar, y después desde el ámbito público buscar los recursos suficientes y planificarlo adecuadamente para que se pueda hacer lo más rápidamente posible”, ha dicho.
Finalmente, Puig ha asegurado que en las próximas semanas el Consell aprobará el decreto ayudas por “no menos de 20 millones de euros, podría llegar a los 30 millones” para los agricultores que han sufrido directamente daños en las infraestructuras agrarias y que “no pueden resarcirse por la vía de los seguros”.
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