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El Consell invierte 15 millones en la compra de 160 viviendas a particulares para destinarlas a alquiler social

La consellera María José Salvador en la presentación del Plan de Adquisición de Viviendas

Carlos Navarro Castelló

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La Conselleria de Vivenda se lanza al mercado inmobiliario mediante la adquisición de viviendas a personas o entidades particulares con el objetivo de sacarlas al mercado del alquiler a precios asequibles.

La consellera, María José Salvador, ha presentado este lunes el Plan de Adquisición de Viviendas que en esta primera fase supomndrá una inversión de 15 millones de euros en la compra de inmuebles en València, Alicante, Elx, Casellón, Torrevieja y Sagunt, “donde se concentra el 50% de demandantes”, según la propia Salvador.

No obstante, “es un plan a tres años en el que en total se invertirán 50 millones de euros y llegará a otros municipios de la Comunitat donde también hay gran demenda de este tipo de viviendas”.

Y es que, según Salvador, “existe una segunda burbuja inmobiliaria en cuanto a precios de alquiler se refiere y la administración está en la obligación de intervenir con sus mecanismos para ofrecer viviendas dignas a precios asequibles tal y como establece la Ley de Función Social de Vivienda de la que nace este Plan”.

Tal y como ha explicado, con estos primeros 15 millones de euros esperan poder adquirir unos 160 inmuebles a precios de entre 80.000 y 90.000 euros: “según los estudios que manejamos, en estos municipios el precio del metro cuadrado está de media en torno a 1.000 euros”, ha explicado la consellera.

De esta forma, a principios de agosto se publicará la orden a partir de la cual, los propietarios que deseen vender sus inmuebles tendrán de plazo hasta el 28 de septiembre para registrarlas.

Las viviendas deberán cumplir con una serie de parámetros, como por ejemplo, que estén en perfecto de conservación, que tengan entre una y dos habitaciones, que estén edificios que no tengan más de 40 años, que no tengan deudas con la comunidad de vecinos o con la administración por impago de impuestos, que tengan dada de alta la luz, el gas y el agua y que estén en edificios con ascensor si están por encima del primer piso.

Además, se valorará su ubicación en cuanto a la cercanía con zonas verdes, colegios, centros de salud y transporte público.

El perfil al que irá destinado este tipo de viviendas será, en primer lugar, a personas en riesgo de exclusión social, para los que los precios de alquiler va en función de sus ingresos y, unido a las bonificaciones que ofrece la Conselleria, pueden salir a partir de 10 euros al mes.

En sugundo lugar, a personas o familias con sueldos precarios que no pueden acceder al mercado de la compra o alquiler de viviendas de renta libre. En estos casos, los precios oscilarán entre los 125 y los 375 euros al mes.

La Conselleria de Vivienda cuenta en estos momentos con 10.000 personas apuntadas en el registro de demandantes de viviendas sociales, a las que se unen otras 6.000 apuntadas en el listado de la Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo (EVha), aunque han puntualizado que puede haber personas apuntadas en ambos registros, incluso en otros municipales: “estamos trabajando para actualizar los registros y crear uno único”, ha afirmado Salvador.

La Generalitat cuenta con un parque público de casi 13.000 viviendas, de las que 8.600 están destinadas a arrendamiento.

En la actualidad hay 1.189 viviendas protegidas dependientes de la EVha que se destinan a alquiler. Las personas que residen en ellas son susceptibles de beneficiarse del Plan de Alquiler Asequible si cumplen los requisitos establecidos. En la actualidad 234 familias ven reducido su arrendamiento tras aplicarles dicho plan.

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