Renfe no prevé refuerzos en las líneas de cercanías de Valencia en septiembre pese a los problemas con la red habitual

Ni Renfe ni Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) prevén un refuerzo de las líneas de transporte público del área metropolitana de Valencia en septiembre pese a la COVID-19. La operadora de trenes de cercanías volverá a poner en circulación los 341 trenes que componen la red con origen o destino Valencia después de reducir las frecuencias en agosto, como cada año, por las vacaciones a partir del 31 de agosto.

Según explican fuentes de la empresa pública estatal, desde que se decretara el estado de alarma han detectado una caída de hasta el 50% de los usuarios y en junio, con la reposición de los horarios habituales, los trenes no se han acercado a su capacidad de aforo. La empresa pública asegura que tiene controles a tiempo real de los trenes y que, con una capacidad óptima de 180 viajeros por vehículo, apenas se ha llegado a los 120 en horas punta, siendo lo habitual contar con 80 y 90 viajeros por tren. Así, desde este lunes operarán todos los trenes de la red valenciana con las frecuencias habituales.

Mientras, la empresa pública que gestiona Metrovalencia prevé actuaciones para controlar los aforos en tiempo real y se reunirá con el conseller de Infraestructuras, Arcadi España, para evaluar la situación durante la primera semana de septiembre, aunque en principio indica que las frecuencias en el servicio se mantendrán con el horario de invierno.

El problema es que en la red de cercanías lo habitual ya venía generando conflicto. En enero se sucedieron una serie de protestas que finalizaron con la convocatoria de una reunión de seguimiento por parte del Ministerio de Fomento ante el aluvión de cancelaciones. Las asociaciones de usuarios se muestran muy críticas con la política de la empresa pública. No es comprensible que se impidan las reuniones de más de 10 personas pero en el transporte público se den aglomeraciones, explica Samuel Martínez, de Indignats per Renfe, que prevén que con la reincorporación al trabajo y a las clases presenciales se repitan los episodios ya conocidos. La plataforma Trens Dignes solicita la recuperación de las frecuencias de los trenes de media distancia en la comarca, reducidos drásticamente durante la pandemia. “Se ha hecho inviable su uso”, consideran. Los usuarios consideran que para mantener las distancias de seguridad impuestas en otros espacios es necesario aumentar la frecuencia de los trenes para poder limitar el aforo.

Las cancelaciones en el núcleo de cercanías de Valencia se han multiplicado desde 2015 y oscilan entre el 2% y el 8% de los trenes diarios, en función de la línea, según indicó el Gobierno a Compromís mediante respuesta en el Senado. Como muestra la tabla, en algunos casos las cancelaciones se han duplicado.

FGV instala controles de aforo

En el caso de Metrovalencia, FGV comenzará la próxima semana un programa piloto de control de aforo en tiempo real y restablecerá los servicios con horario habitual. La empresa de la Generalitat ha colocado 24 pantallas en los accesos a los andenes de las estaciones más concurridas de la red, en las que se ofrecerá información relativa a la superación del aforo, de forma que el usuario pueda saber si los pasos están bloqueados o no y en qué intervalo de tiempo se van a desbloquear si es el caso. Las pantallas se han instalado en las estaciones de Colón, Xàtiva, Àngel Guimerà, Machado, Benimaclet, Facultades, Alameda, Avinguda del Cid, Torrent Avinguda, Patraix, Jesús, Plaza España, Nou de Octubre, Mislata, Amistat-Casa de la Salud, Ayora y Beniferri. De esta forma, la empresa de la Generalitat determinará el número máximo de personas que podrán subir en cada estación y limitar así el paso de los viajeros y viajeras por la línea de validación de esa estación. A través de ellas, la empresa determinará el número máximo de personas que podrán subir en cada estación y limitar así el paso de los viajeros y viajeras por la línea de validación de esa estación.

La mascarilla es de uso obligatorio en todas las modalidades de transporte público y se recomienda a los pasajeros distribuirse a lo largo del andén, evitando aglomeraciones.

Inversiones del Estado en cercanías y metro

El Gobierno aprobó el pasado 4 de agosto un fondo de 275 millones de euros para financiar el déficit extraordinario de los servicios de transporte público que prestan las entidades locales. El déficit cubierto por este fondo será el que se haya producido durante el período de estado de alarma y el que se produzca hasta finales de 2020, como consecuencia de la reducción extraordinaria de los ingresos asociados a la venta de billetes, reducción motivada por la drástica reducción de la demanda, así como por los costes extraordinarios causados por las medidas de prevención, limpieza y desinfección y por la limitación de la ocupación de los vehículos por motivos sanitarios. Este fondo extraordinario complementa el anunciado meses atrás, con 800 millones de eurs para las principales capitales metropolitanas.

En febrero se convocó la Comisión de Seguimiento del Plan de Cercanías de Valencia, formada por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y la Generalitat Valenciana, donde se anunció un Plan de Acción para recuperar los niveles de puntualidad y fiabilidad de las Cercanías del núcleo de Cercanías de Valencia antes de final de año, de tal forma que sean equiparables a la media nacional. Por el momento no se han comunicado avances en esta cuestión, dado que semanas después se decretó el estado de alarma.

En los últimos 10 años Valencia solo ha recibido 20 millones de euros para su transporte público metropolitano frente a los 1378 de Madrid, 1091 de Barcelona, 312 de Canarias, 70 de Sevilla o 60 de Málaga, según datos del Gobierno en una respuesta parlamentaria al senador de Compromís, Carles Mulet.

La coalición registró en la Cámara Alta una Proposición de Ley de Financiación del Transporte Público Urbano y Metropolitano, pendiente de ser debatida para poner una solución efectiva que ponga fin a los conflictos por la financiación del transporte. La propuesta establece la creación de un Fondo Estatal para financiar la movilidad colectiva urbana e interurbana que financiará los déficits de operación e inversiones; la constitución de una comisión gestora con funciones sobre la liquidación, control, resolución de subvenciones y sobre los fondos que se dotarán anualmente en los Presupuestos Generales del Estado por un monto no inferior al 0,25% del PIB del año anterior. Así, para 2020 se contemplarían 3.000 millones.