Desde un bizcocho a una mousse: cinco postres fáciles para hacer con melocotón
El melocotón es una de las frutas veraniegas más sabrosas: con un color que vira del amarillo al rojo y su piel aterciopelada, una vez en la boca su pulpa dulce se deshace. Con ellos se pueden preparar postres frescos y deliciosos en esta temporada, desde los más tradicionales hasta los más sencillos.
El resto del año —y también en verano— existe la posibilidad de disfrutar de esta fruta en almíbar. De hecho, añadiéndole a la conserva nata montada o leche condensada obtendremos un postre delicioso de toda la vida.
No hay que tener miedo de mezclar sabores y texturas porque el melocotón le aportará siempre un sabor espectacular a cualquier dulce que preparemos para degustar en la sobremesa o para contar con una buena merienda. Aquí os contamos cinco recetas en las que el melocotón se convierte en el ingrediente estrella.
Bizcocho de melocotón
El bizcocho de melocotón es un postre muy fácil de preparar y con un resultado muy esponjoso en el que puedes añadir trocitos de melocotón tanto fresco como en almíbar. Solo necesitas la base típica (huevos, azúcar, harina, aceite o mantequilla, levadura) y mezclar con los dados de fruta. Al hornear, los melocotones aportan jugosidad y un sabor afrutado.
Para preparar esta receta, se elabora una mezcla típica de bizcocho y, después, se cubre con melocotones frescos cortados finos. Con el fin de obtener un bizcocho suave y jugoso es necesario montar a punto de nieve las claras y mezclar con las yemas batidas con el azúcar y sobre todo, ir añadiendo los ingredientes con suavidad.
Se colocan dos capas de melocotón, una que se hunde al hornearse y otra que se añade cuando esté el bizcocho casi hecho y subido. De este modo, se obtiene un bizcocho húmedo muy jugoso con fruta en su interior además de la fruta del exterior.
Con el molde de 20 cm de diámetro se consigue un bocado perfecto entre bizcocho y fruta. En el caso de usar un molde de 26 cm, se pueden duplicar las cantidades y adaptar el tiempo de horneado.
Ingredientes:
- 3 huevos
- 150 g azúcar
- 100 ml aceite de girasol (o mantequilla derretida)
- 150 g yogur natural (1 vaso)
- 200 g harina
- 1 sobre de levadura química (16 g)
- 2 melocotones (frescos o en almíbar), en trozos
Preparación:
- Bate los huevos con el azúcar hasta que espumen.
- Añade el yogur y el aceite, y mézclalo.
- Tamiza la harina con la levadura y agrégala poco a poco.
- Incorpora los trozos de melocotón.
- Vierte la mezcla en un molde engrasado y hornea a 180 °C durante 35 o 40 minutos.
Crumble de melocotón
El crumble de melocotón es un postre exquisito y sabroso muy fácil de preparar: coloca rodajas de melocotón en una fuente, cúbrelas con una mezcla de mantequilla, harina, azúcar y avena (puedes añadir canela o almendra molida). Amasa los ingredientes con los dedos hasta que obtengas una textura granulada, como si fueran migas compactas y, por último, hornea hasta que esté dorado y crujiente en un horno precalentado a 180 °C.
Retira el postre del horno y deja que repose unos minutos a temperatura ambiente. Si le añades helado de vainilla, la dulzura alcanza su punto máximo.
Ingredientes (4 personas):
- 4 melocotones
- 50 g azúcar moreno
- 100 g harina
- 75 g mantequilla fría en dados
- 40 g copos de avena (opcional, para más textura)
- Canela al gusto
Preparación:
- Pela y corta los melocotones en gajos, ponlos en una fuente y espolvorea con un poco de azúcar y canela.
- Mezcla harina, azúcar, avena y mantequilla con las manos hasta tener una textura arenosa.
- Cubre la fruta con esa mezcla.
- Hornea a 190 °C durante 25 o 30 minutos, hasta dorar.
Tarta de hojaldre y melocotón
El hojaldre es otra manera de degustar los melocotones en la época estival y que, además, le aporta el toque crujiente que tan delicado hace este postre.
En primer lugar, precalienta el horno a 200 °C, calor arriba y abajo. A continuación, extiende una lámina de hojaldre, unta un poco de mermelada de melocotón o crema pastelera, y coloca rodajas finas de melocotón encima. Por último, hornea hasta que el hojaldre esté crujiente y brillante.
Ingredientes:
- 1 lámina de hojaldre
- 3 melocotones
- 3 cucharadas mermelada de melocotón (o crema pastelera)
- 1 huevo batido (para pintar)
Preparación:
- Extiende el hojaldre sobre papel de horno.
- Unta con la mermelada dejando un centímetro de borde.
- Coloca rodajas finas de melocotón por encima.
- Pinta los bordes con huevo batido.
- Hornea a 200 °C unos 20 ó 25 min.
Ensalada dulce de melocotón con yogur y miel
Existe una opción de tomar el melocotón de forma ligera y rápida en esta ensalada deliciosa que se puede disfrutar como un postre saludable e, incluso, como un buen desayuno. En este último caso, se puede añadir avena.
Trocea melocotones frescos, mezcla con yogur natural o griego, un chorrito de miel y añádele frutos secos picados. Otra opción es utilizar requesón en lugar de yogur y la combinación queda igualmente deliciosa.
Ingredientes (2 personas):
- 2 melocotones frescos
- 250 g yogur griego natural
- 2 cucharadas de miel
- Un puñado de nueces o almendras picadas
Mousse de melocotón
Para preparar esta mousse podemos utilizar la variedad de melocotón que más nos guste, pero es importante que, en cualquier caso, la fruta esté en su punto de maduración, ni muy verde ni demasiado madura.
Esta mousse es muy sencilla de preparar. Para conseguir su característica textura, sin huevo, utilizaremos gelatina y nata para montar. Para que quede esponjosa es muy importante montar bien la nata y que, una vez montada, la mezclemos con el puré de melocotón con un ritmo suave.
Para hacerla, bate melocotones (frescos o en almíbar) hasta obtener un puré, mezcla con nata montada (crema batida) y un poco de gelatina disuelta para dar consistencia. Refrigera unas horas antes de servir.
Ingredientes (4 vasitos):
- 300 g melocotón en almíbar (escurrido) o fresco maduro
- 200 ml nata para montar
- 50 g azúcar
- 4 hojas de gelatina (o 1 sobre de gelatina neutra)
Preparación:
- Hidrata la gelatina en agua fría (5 minutos).
- Tritura los melocotones con el azúcar hasta hacer un puré.
- Calienta tres cucharadas del puré y disuelve ahí la gelatina. Mezcla con el resto del puré.
- Monta la nata bien fría e incorpórala con movimientos suaves.
- Reparte en vasitos y refrigera 3 ó 4 horas.
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