Asaja amenaza con colapsar la región cortando 19 carreteras

El presidente de Asaja-Cáceres, Ángel García Blanco, ha anunciado que su organización “colapsará” Extremadura si en quince días no hay avances a los problemas que plantea el campo extremeño.

García Blanco ha hecho esta amenaza, que según ha explicado posteriormente consistiría en cortar 19 carreteras de la región al mismo tiempo, tras reunirse este viernes con el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara y con el resto de organizaciones presentes en el Consejo Asesor Agrario de Extremadura para abordar los problemas del campo.

Frente al talante más positivo y dialogador planteado por las otras organizaciones presentes en la reunión, UPA-UCE y APAG, el representante de Asaja Cáceres ha dicho que la agricultura y la ganadería extremeñas están “en estado de shock y lógicamente Extremadura está al lado”, porque “de continuar así, Extremadura desaparece”.

Un salario mínimo “populista”

Blanco afirma que los agricultores reciben precios del siglo XIX y los costes de producción son del siglo XXI y ha criticado que “hay gente que legisla de una manera populista” sin haberse acercado a los territorios y analizar “hasta donde podemos llegar”, ha dicho en referencia a la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

“Menos mal que el presidente de la Junta creo que se ha dado cuenta que la influencia del SMI está provocando un efecto devastador en el paro en nuestra región”, ha añadido, además de mostrar su intención de explicárselo a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, para que Madrid “tome buena nota”.

Blanco se ha encargado de subrayar que es competencia exclusiva de la Junta de Extremadura impedir que en las campañas agrícolas se lleven a cabo los trabajos del AEPSA (PER), plan que provoca que “el campo se quede sin gente para trabajar”.

No obstante agradece a Fernández Vara que se ponga al frente para “avanzar en una ley de precios mínimos por encima de los costes de producción, como tiene Francia, para que nosotros podamos pagar ese salario del siglo XXI, pero con precios del siglo XXI”.