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Otra sentencia judicial obliga a paralizar oposiciones de la Junta

Trabajadores públicos

Pablo Sánchez / Pablo Sánchez

Mérida —

En tiempos tan difíciles para el empleo, un puesto de trabajo que garantiza estabilidad a largo plazo es el sueño de miles de trabajadores. Así, cuando la Junta ofertó a primeros de años 537 plazas (aún sin fecha para los exámenes) recibió hasta 156.806 solicitudes.

Ahora, esa convocatoria acaba de ser anulada por el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura. La sentencia del TSJEx obliga al Gobierno regional a paralizar la convocatoria de oposiciones para cubrir 306 plazas de personal laboral en la Administración. La razón es que dichas plazas se destinan solo al turno libre sin previamente haber realizado una convocatoria por el turno de ascenso --llamado de promoción interna en el caso del personal funcionario--, incumpliendo así lo establecido en el convenio colectivo de la Junta.

Son ya demasiadas las oposiciones de acceso a la función pública las que acaban en tribunales o con un notable revuelo a su alrededor. Reciente (y en tribunales también) está el caso de la ex consejera socialista Mejuto que se presentó a unas oposiciones sanitarias, convocadas cuando ella era consejera, y las aprobó meses después cuando ya no estaba en el cargo.

No menos revuelo está causando la convocatoria de cinco plazas en la Asamblea de Extremadura, una de ellas de antropólogo para estupor de cualquiera, excepto del presidente de la Asamblea Fernando Manzano. Sobre esta convocatoria planean tantas dudas sobre su limpieza que hasta un partido político ha hecho públicas las iniciales de las cinco personas que van a aprobar, antes incluso de que se hayan publicados las listas de admitidos.

El caso de Córdobilla de Lácara

El acceso a la función pública tiene demasiadas grietas y no todas en buen estado. A veces hay casos tan escandalosos como el que sucedió el pasado verano en Cordobilla de Lácara en donde el concejal del PP Julián Hierro apoyó con su voto de la elección del alcalde independiente Antonio Cruz y poco después el alcalde convocaba una plaza de policía local y sin pasar por academia alguna ¡oh casualidad¡ el número uno en las oposiciones es para el concejal.

Esos hechos merecieron titulares de prensa este verano. Las academias que forman a policías locales se quejaron, el PSOE pidió explicaciones, el PP no abrió la boca… y unos meses después Julián Hierro ha dimitido de concejal del PP, y ya se dispone a ocupar la plaza de funcionario de la policía local (1.100 euros al mes) .

Mucha discrecionalidad

El portavoz socialista en Cordobilla de Lácara que denunció todo este feo asunto, ha preguntado en el último pleno municipal por el proceso de selección. “Pregunté quién puso las pruebas, quién se encargó de los exámenes y el alcalde me dijo que había sido el jurado; pregunté entonces a la secretaria del ayuntamiento quien había nombrado el jurado y me dijo que había sido el alcalde, que había nombrado a varios funcionarios de algunos pueblos de la comarca. Les dije claramente que lo habían guisado todo entre ellos y no supieron qué responderme”, explica Ángel Serván.

En este caso se aprecia claramente que la grieta que desafina en el acceso a la función pública está en la discrecionalidad absoluta de un ayuntamiento para nombrar a un jurado y a partir de ese punto de partida se abren muchas puertas y no todas transparentes.

Ese caso de Cordobilla de Lácara no parece ser nada excepcional. El coordinador de UPyD Francisco Sigüenza explica a eldiarioex que una mujer lleva peleando en vano con un ayuntamiento extremeño porque había convocado una plaza muy a la medida y no admitían la titulación de su hijo como monitor deportivo. Y según Sigüenza, el problema es que ni siquiera el Servicio Extremeño de Empleo (Sexpe) tiene actualizadas las titulaciones, y mucho menos los ayuntamientos extremeños. “Actualmente el SEXPE no es útil para los ciudadanos a la hora de buscar empleo. Muchos ciudadanos se están viendo privados de poder optar a ofertas de empleo al no incluir el SEXPE sus titulaciones, pues el Servicio Extremeño Público de Empleo tiene un listado de titulaciones desfasado y que no corresponde con la realidad. UPyD solicita al SEXPE que con urgencia actualice el listado de titulaciones académicas, formativas y profesionales que existen en el mercado laboral”.

Homologar pruebas y plazas

Además de esa actualización de titulaciones, otra de las grandes grietas en las pruebas de acceso a la función pública está en la falta de homologación de pruebas, plazas, categorías o titulaciones entre la administración regional y locales.

En ese sentido el coordinador de UPyD pide también que se homologuen esas pruebas entre administraciones.

Tal vez con mayores niveles de homogeneidad y transparencia no sea tan sorprendente encontrarse casos como el de Cordobilla, la reciente convocatoria de una plaza de antropóloga en la Asamblea de Extremadura o las dudas en torno a si deben optar o no a plazas de la administración los altos cargos del Gobierno de turno mientras estén activo, ya que esos altos cargos es posible que tengan relación con el jurado de cada prueba… y luego pasa lo que pasa.

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