El final de la temporada de caza trae nuevos galgos abandonados en carreteras y campos
No existen datos oficiales sobre perros abandonados, aunque la Fundación Affinity estima que en torno al 9 por ciento de casos se registran tras el final de la temporada de caza. Esta fundación no sitúa nada bien a Extremadura, ya que estima que en la comunidad extremeña esa cifra puede hasta triplicarse.
El mes pasado terminó la temporada de caza y de nuevo vuelven los casos de galgos y otros animales de caza abandonados. Se repite lo que parece un ritual: canes que deambulan por carreteras y campos porque dejaron de ser útiles.
La utilidad responde al instinto cazador de su mascota, de sus capacidades para perseguir a las presas o las camadas de crías que “producen”.
ANIMAEX Animales Maltratados Extremeños confirma a este diario que nuevamente han crecido los casos de abandono desde finales de febrero. No han detectado la agresividad de temporadas anteriores, con canes a los que sus dueños asesinaron con métodos tan cruentos como la horca -para ahorrarse el precio de una bala--. No obstante el abandono sigue estando a la orden del día.
Comentaba meses atrás la Federación de Protectoras de Animales regional a eldiario.es que son muchos quienes respetan a sus animales y optan por pasarlos a otros galguero cuando no los quieren, pero por desgracia siguen existiendo personas que optan o por el abandono.
En esta ocasión ANIMAEX piensa que en su entorno más cercano su labor de diálogo y concienciación con el mundo de la caza ha valido para que no maten a sus perros cuando no les ‘sirven’, optando muchos por la adopción o por dejarlos en un refugio, según explica Petri, voluntaria de esta asociación.
En su caso el problema reside en que su refugio de Montijo está al completo, y ahora ante el nuevo repunte de abandonos tiran de casas de acogida, de familias que de manera temporal se quedan con ellos.
Más casos de abandono
Salvemos Animales de Mérida también confirma abandonos que coinciden con el final de la temporada de caza. Ponen de manifiesto que ante la ausencia de estudios reales que constaten una cifra aproximada, solo pueden aportar su experiencia como colectivo.
Y se refieren al caso de un galgo que les ha llegado con un cuchillazo, tras arrancarle su dueño el chip. También otro galgo que apareció tirado en una cuneta abandonado, en la carretera de Alange, y ante el colectivo no tiene dudas de que ha sido víctima del abandono.
Hablan también del caso de ‘Lola’, una galga que era para su sueño “una herramienta con la que cazaban”. Un día tropezó corriendo y se partió la pata. La llevaron al veterinario para ver el alcance de la lesión, al ver que era algo grave y difícil de recuperar decidieron dormirla (eutanasia).
Alessandra, una de las voluntarias de esta asociación, piensa que la galga era muy querida por su dueño –dentro de la lógica de alguien que es capaz de abandonar a su mascota—porque en vez de deshacerse de ella por el método más violento, pidió al veterinario que la durmiera.
La casualidad fue que el veterinario avisó a esta asociación, que se puso a ayudar a la galga con otra asociación extranjera. La operación no salió del todo bien por su extrema delgadez, y le salieron unas úlceras que dejaron las heridas de su pata infectadas, los puntos desprendidos y el hueso al aire. Ahora por suerte esta perrita se recupera.
