Como defensa, el ataque. El exjefe de Mantenimiento del Ayuntamiento de Valladolid, Luis Alberto Samaniego, declaró ayer como imputado por adjudicar más de 1.300 contratos menores –de menos de 50.000 euros- a 13 empresas suyas o de sus familiares. Y como primera actuación, la fiscal le pidió prisión incondicional por “riesgo de fuga” y por posible “destrucción de pruebas”. Le imputa los delitos prevaricación, tráfico de influencias, negociaciones prohibidas a los funcionarios y falsedad documental.
En sus más de dos horas ante el juez, Luis Alberto Samaniego dejó clara cuál va a ser su línea de defensa: el “no adjudicaba”, sólo “proponía” a sus responsables, según señalaron a La Meseta fuentes judiciales. Un argumento que utilizó en diversas ocasiones.
Y cuando fue preguntado por los motivos que le llevaron a contratar con empresas del Grupo Samaniego, desveló tres: “urgencia, rapidez y eficacia”. Según las mismas fuentes, la urgencia, según su declaración judicial, se debía a que “por las tardes, los funcionarios no trabajan”, por lo que requería contratar de forma inmediata algunas tareas. La tesis de la rapidez la basó en la inmediatez “con la que había que contratar”. Y la de la eficacia, porque conocía “perfectamente” sus propias empresas y le daban más seguridad que los propios funcionarias de su servicio, “que cada vez son menos”.
Estos argumentos no le satisficieron a la fiscal, quien pidió prisión provisional, aunque la juez no se pronunciará de forma inmediata, según fuentes judiciales, ya que podría esperar a que declare hoy el primo de Luis Alberto Samaniego, que fue el presidente de la Asociación Vallisoletana de Empresarios de la Construcción (Aveco).
Ante la petición del fiscal, la respuesta del abogado defensor fue tajante. “No hay posibilidad de fuga” ni de “destruir pruebas”. Según el informe del letrado, Luis Antonio Samaniego “tiene propiedades en Valladolid, hijos y nietos. Y 65 años”. Además, las pruebas “están en el Ayuntamiento”, por lo que preguntó “cómo se van a destruir”.
Así las cosas, el abogado defensor reveló que su cliente –Luis Alberto Samaniego- “no va a ser el chivo expiatorio de nadie” ni se va a “comer todas las culpas”, porque “todo el mundo del Ayuntamiento de Valladolid sabía a quién se contrataba”
Estos contratos menores, que en la capital vallisoletana ya se considera una trama, fueron denunciados por el PSOE y ante ello, el Ayuntamiento se personó en la causa, aunque en la declaración de ayer la abogada municipal no se presentó.
Según los datos que el Grupo Socialista maneja el exjefe de Mantenimiento habría gestionado 11,2 millones de euros, con 1.314 contratos adjudicados entre 2000 y mayo de 2014.
Hace unas semanas, la Policía registró el despacho de Luis Alberto Samaniego para investigar sobre las adjudicaciones de servicios y obras menores a 13 empresas en las que él mismo aparece como administrador único o que están vinculadas a sus familiares.
La denuncia socialista revela que la trama empezó cuando Samaniego tomó posesión como jefe de Mantenimiento, en el año 2000, y “no ha cesado de hacerlo -cada vez con un mayor número de empresas y paulatinamente con más adjudicaciones y más dinero-”, según la versión del PSOE.
