La movilidad del futuro según Citroën: autónoma, asequible y segura
La concentración de la población mundial alrededor de grandes núcleos urbanos ya había revolucionado las necesidades de movilidad antes incluso de la llegada de la pandemia que lentamente vamos dejando atrás. La covid-19 ha reforzado esa tendencia e impulsado a los ciudadanos a buscar formas de desplazarse más limpias, seguras, flexibles y que respeten la llamada distancia social.
A la espera del coche autónomo, que claramente puede contribuir a descongestionar las ciudades y calmar su tráfico, aunque a un coste elevado sobre todo en un principio, fabricantes como Citroën han comenzado a idear soluciones intermedias como la que acaba de dar a conocer, desarrollada junto a otras dos marcas francesas de prestigio internacional, la cadena hotelera Accor y la empresa de publicidad exterior JCDecaux.
Las tres firmas se han unido en un colectivo creativo y comprometido, The Urban Collëctif, centrado en una movilidad del futuro segura y que ayude al bienestar diario. La primera propuesta nacida en el seno de este proyecto consiste en un modelo de código abierto que se compone de dos partes: una plataforma de movilidad autónoma y eléctrica, The Citroën Skate, y Pods específicos para diferentes usos y servicios. El patín puede acoger cualquier complemento o carrocería compatible desarrollado por una empresa asociada.
Por el momento, el colectivo ha pensado en tres servicios de movilidad concretos: Sofitel En Voyage, que ofrece una experiencia exclusiva de movilidad urbana; Pullman Power Fitness, una nueva forma de hacer deporte durante los desplazamientos, y JCDecaux City Provider, servicio innovador de movilidad urbana a demanda.
Lo que Citroën ha imaginado es un modelo revolucionario de movilidad de código abierto, colectivo y compartido, que suministra una movilidad autónoma y adaptada a la demanda. Este modelo se basa en una flota de The Citroën Skate, robots de transporte que se desplazan continuamente por la ciudad asociados a Pods que facilitan experiencias únicas. El patín de Citroën es el soporte, el vector de la movilidad, y el Pod montado sobre él permite a los usuarios elegir el tipo de servicio que necesitan en cada momento.
Esta solución tecnológica basada en vehículos sin conductor, autónomos e interconectados, que se desplazan silenciosamente, podría incrementar la fluidez del tráfico al menos en un 35%, según cálculos de Citroën. Con ese fin, The Citroën Skates se han diseñado para circular en carriles específicos y están preparados para integrarse en el entorno urbano de la forma más eficiente y económica.
Soluciones adaptadas a las necesidades personales
Veamos en qué desarrollos específicos ha pensado The Urban Collëctif. El primero es Sofitel En Voyage, una invitación inédita a viajar por la ciudad en condiciones excepcionales de confort y servicios y con una vista perfecta hacia el exterior. Se trata de un paralelepípedo con estructura de cristal y marquetería donde se disfruta de un ambiente íntimo pero completamente abierto al exterior.
Dotado de puertas correderas automáticas, el Pod permite que dos o tres pasajeros se instalen cómodamente a bordo, con sus maletas alojadas en un espacio específico. Una banda de luces de led les proporciona todo tipo de información: mensajes personales, noticias, meteorología, hora de llegada y duración del trayecto...
Todo está pensado para disfrutar al máximo de la experiencia. Un bar se abre como una flor con un solo toque para ofrecer bebidas y algo para picar, y se dispone de revistas, flores frescas, equipo de sonido, cargadores por inducción y un sistema de iluminación configurable. Una tableta táctil permite comunicarse por videoconferencia con un conserje de Sofitel para, por ejemplo, obtener reservas en un restaurante o un teatro.
Por su parte, el Pullman Power Fitness se ha concebido para combinar lo útil con lo agradable aprovechando el tiempo de transporte para ponerse en forma, es decir, trasplanta la experiencia de las conocidas salas de fitness Pullman a un vehículo equipado con una máquina de remo en uno de los lados y una bicicleta en el otro. Aunque el usuario se desplaza a bordo de una burbuja acristalada que le permite ver en todo momento, su intimidad se halla preservada por unos motivos dicroicos en forma de celosías con los colores propios de la marca.
El ocupante cuenta con un entrenador digital que, a través de una pantalla holográfica, lo anima en su práctica deportiva, le suministra información sobre el trayecto y le hace divertirse durante su sesión de cardio. El esfuerzo realizado en el remo o en la bici se aprovecharía, además, para recargar las baterías de The Citroën Skate.
Por último, el JCDecaux City Provider constituye un servicio complementario entre transporte público y medios de movilidad individual, pues es capaz de trasladar de manera simple y ergonómica a todos los que se desplacen con maletas, con un carrito de bebé, en silla de ruedas, solos o en compañía. Haciendo uso de la inteligencia de la conducción autónoma, el vehículo pretende optimizar el tiempo y la distancia a un tiempo de traslado agradable y reposado en el corazón de la ciudad.
En este caso se dispone de dos acogedores espacios enfrentados bajo un techo ajardinado: un espacio abierto, protegido de la intemperie por un toldo, y otro espacio cerrado, pero acristalado y luminoso, gracias a una iluminación ambiental con una disposición original.
Hasta cinco personas pueden acomodarse en el interior para desplazarse en ese entorno luminoso, acogedor y dotado de una gran visibilidad de la ciudad. En el interior, los usuarios cuentan con tomas USB para cargar sus dispositivos portátiles y dos pantallas interactivas que les informan de servicios útiles o actividades culturales o turísticas, hacia las que la célula puede encaminarlos si así se le solicita.
