Inteligencia artificial, una nueva aliada para fotógrafos y videógrafos

Poco a poco la inteligencia artificial (IA) ha irrumpido de forma inquietante en la industria de la fotografía y el vídeo. Su gran capacidad, precisión y rapidez en el procesamiento de datos están cambiando no solo los procesos de trabajo, sino que ha empezado a suscitar el miedo en muchos profesionales que ven peligrar su trabajo por las capacidades que ofrece la IA.

Pero hasta el momento, la IA no es capaz de transmitir emociones ni de expresarse de forma creativa como lo puede hacer un fotógrafo o videógrafo profesional. Tampoco es capaz de mostrar la subjetividad de la mirada de un creador humano. En cambio, sí que puede ser capaz de exponer una fotografía o vídeo de forma perfecta y de aplicar cuestiones técnicas complejas de forma muy rápida. Con lo cual, si un profesional de la fotografía o el vídeo es capaz de combinar las bondades técnicas de la IA, con su creatividad y sensibilidad, ésta se convertirá en la aliada perfecta para subir de nivel.

En cierta manera, es normal que haya reticencias por parte de muchos profesionales hacia la IA, ya que ha irrumpido muy rápido, y normalmente, lo novedoso, hasta que no está bien testeado, suele producir rechazo, pero todo aquel profesional, que pierda el miedo y sepa aprovechar las ventajas que ofrece la IA, obtendrá muchos más beneficios que prejuicios. En cambio, todos aquellos a los que les pueda el miedo a lo desconocido perderán la oportunidad de obtener una posición de ventaja sobre su competencia.