La tasa de menores de tres años escolarizados se ha duplicado en una década
Cada vez más niños menores de tres años acuden a una escuela infantil. En la última década, la tasa de escolarización de los niños de uno y dos años se ha duplicado en España (los de tres ya rozan el 100%), según el Sistema Estatal de Indicadores la Educación (SEIE), publicado esta mañana por el Ministerio.
En el curso 2016-17, último año que ofrece de referencia el informe, un 58% de los menores de dos años acudía a una escuela (un 32% en 2007); para los de un año la estadística era de 17% hace una década y del 38% en la actualidad.
Aunque la escuela pública ha avanzado posiciones en los últimos años, en esta etapa educativa aún tiene mucho peso la enseñanza privada, sea concertada o no, ante la escasez de oferta pública. La división ronda el 50% desde hace varios años entre ambas redes: la fotografía actual muestra que el 51,5% de los pequeños acude a un centro público, el 14,6% se matriculó en uno concertado y el 33,9% restante lo hizo en uno privado sin concertar.
Desde esa etapa y en adelante, la escolarización ya ronda el 100% en todos los cursos obligatorios y la presencia de la escuela concertada sube hasta situarse en el entorno del 30% en el segundo ciclo de Infantil, Primaria y la Secundaria Obligatoria, hasta los 16 años.
Menos repetidores
Los indicadores educativos también muestran una mejoría en las tasas de idoneidad en Secundaria, aunque un leve retroceso en Primaria. La tasa de idoneidad refleja el porcentaje de alumnos que está en el curso escolar que por su edad le correspondería (aunque no entra a estudiar a qué se deben los retrasos detectados: la mayoría son por repetición, pero puede haber otras causas como enfermedades largas o cambios de domicilio que hagan perder un curso).
Por su naturaleza, el ligero retroceso apuntado en la tasa de idoneidad de Primaria podría acabar afectando a la Secundaria en los próximos años. En datos, el 93,6% del alumnado de ocho años está en su curso, un punto porcentual menos que hace una década. Los de 10 años están prácticamente igual (89,7% frente al 90% de 2006) y los de 12 han mejorado un punto y medio (del 84,1% al 85,7%).
Es en Secundaria donde los porcentajes caen y ponen de manifiesto el problema que tiene España con la repetición, con una de las mayores tasas de Europa. Así, uno de cada cuatro alumnos de 14 años no está en el curso que le correspondería (lo está el 74,4%), dato que un año más tarde alcanza a casi uno de cada tres (un 31,4% no está en su nivel).
La buena noticia es que ambas cifras presentan una clara trayectoria ascendente, de mejora. Hace diez años, casi uno de cada dos alumnos de 15 años se había dejado algún curso por el camino (un 43%), mientras que los de 14 eran uno de cada tres (33,5%).
Las mujeres, siempre mejor
En este apartado, las mujeres mejoran a los hombres en todas las edades a lo largo de la última década. Y no lo hacen por poco: en la Secundaria, los porcentajes de mujeres en su curso superan en diez puntos de media a sus pares varones. En Primaria, con tasas de idoneidad rondando el 90%, las diferencias son menores.
Otro elemento diferenciador de la situación educativa de los alumnos está en la titularidad del centro: de media, los públicos presentan el doble o más de repetidores que los privados en todos los cursos, desde 1º de Primaria (1,1% en la privada frente al 3,3% en la pública) hasta 4º de la ESO (4,3% frente al 8,1%).
Por último, el abandono temprano educativo (las personas de 18 a 24 años que no pasaron de la Secundaria obligatoria) continúa la senda descendente que empezó con la crisis y el desplome de los empleos de baja cualificación. España se sitúa en el 17,9%, cuando hace una década estaba en el 31,7%. Roza el objetivo de alcanzar el 15% para 2020, aunque la meta está distorsionada respecto al objetivo europeo: donde nuestros vecinos tratan de alcanzar el 10%, España se conformó con el 15% “debido a su elevado porcentaje” de partida.
En este indicador destacan las diferencias regionales, con extremos muy diferenciados que van desde el 6,9% o 9,8% de Euskadi y Cantabria, respectivamente, hasta el 29,5% de Melilla o el 24,4% de las Islas Baleares. Lo mismo ocurre en el desglose por sexos: ese 17,9% de media se descompone en un 21,7% para hombres frente al 14% de las mujeres.