El duelo desautorizado

“Eres muy joven, ya tendrás otro bebé”. Eso fue lo que escucho Anabel B. cuando perdió al que iba a ser su primer hijo. Con seis meses de gestación encima, un accidente truncó esa vida que latía en su interior. “En mi entorno trataron de animarme, seguro que con buena intención, pero sinceramente me hubiera ayudado más el silencio. Y, sobre todo, no pude quitarme hasta muchos meses después la sensación de que el bebé que perdí no tenía importancia para nadie”. Anabel B. vivió lo que se conoce como un ‘duelo desautorizado’, ya que no contó con el apoyo de la red social. Es algo relativamente frecuente en la pérdida durante el embarazo o al poco tiempo del nacimiento de un bebé. Aunque para muchos constituye algo banal, sin importancia ni trascendencia futura, la pareja que lo sufre queda conmocionada.

Desde hace más de 10 años en Vitoria se desarrolla el programa, ‘Brazos Vacíos’ destinado a la atención a mujeres y parejas tras la pérdida del embarazo o del recién nacido que pretende ayudarles a sentir el reconocimiento y validación de la pérdida sufrida y su derecho al duelo que en general se les ha negado.

Ana Pía López García de Madinabeitia, enfermera especialista en Salud Mental, es la responsable del proyecto en el Centro de Salud Mental Salburua, perteneciente a la Red de Salud Mental Araba y a Osakidetza. Es el único programa de estas características que existe en España.

El duelo desautorizado es un gran desconocido dentro de lo que es el ritual de los duelos de la muerte.

Sí. Los duelos relacionados con pérdidas de gestación y de bebés al poco de nacer siempre han sido muy denostados, poco considerados. Socialmente tampoco se puede enjuiciar en 2016 prácticas que llevan muchos años detrás. Antes, cuando una mujer perdía un hijo durante la gestación o durante el parto al poco de nacer lo que se hacía era recomendarle que tuviera otro hijo cuanto antes, no había ningún contacto con el feto que había perdido por esa sensación de que ojos que no ven corazón que no siente. El bebé no se les daba ni a las mujeres ni a los maridos. En aquel momento, los maridos participaban muy poco en cuestiones de gestación, de parto y de la crianza de los hijos. Los duelos desautorizados son una categoría de duelos que tienen unas características propias, como un duelo por una mascota, por una persona con la que has tenido una relación en el pasado y que ahora está felizmente casada con otra persona, las parejas homosexuales tienen muchos dificultades para expresar el duelo por personas que han fallecido y han sido sus parejas….Los duelos perinatales entran dentro de esta categoría. No están reconocidos porque no se reconoce la vida en primer lugar. Porque si no se reconoce la vida, tampoco la muerte ni el derecho al duelo consiguientemente.

Incluso hablamos de niños recién nacidos que igual mueren a los pocos días

Eso es, o de bebés prematuros que igual nacen en unas condiciones muy delicadas de un riesgo de vida altísimo.

Se trata de una cuestión social

Se trata de un duelo que ha permanecido oculto y sigue permaneciendo oculto. No es un tema de conversación fácil. Así como un duelo por un ser querido con el que has tenido una relación parece que tienes derecho a estar mal durante temporada, estar un poco aislado socialmente, de forma voluntaria para recuperar tu estado anímico, tu serenidad, se demora un poco la vuelta al trabajo…..Pero con la pérdida de un hijo por un aborto, por ejemplo, dependiendo en que semana de gestación se haya producido ese aborto tienes derecho a una baja maternal o no. Con lo cual se supone que tienes que ir rápidamente a incorporarte.

Eso no ha evolucionado con el tiempo

No ha evolucionado porque tiene que ver con las leyes también. En cuanto a registro civil son bebés que no se pueden registrar en el registro civil como hijos nacidos porque según la ley española uno no es persona o tiene capacidad jurídica como persona hasta que lleva 24 horas de vida. Entonces bebés que nacen muertos, que mueren dentro del útero de sus madres, que mueren al poco de nacer sin llegar a cumplir las 24 horas de vida autónoma no son considerados personas y no tienen derecho ni a un nombre siquiera.

Pero aunque legalmente no estén, ese tipo de ritos pueden ser importantes para los padres.

En principio, el duelo no es una enfermedad mental ni un trastorno psicológico, ni psiquiátrico. Es una reacción adaptativa de un hecho que sucede a lo largo de nuestra vida, pero no tiene que convertirse en un transtorno psiquiátrico. Es algo que te deja muy tocado durante una temporada, pero que generalmente se pasa. Pero se pasa no porque pase el tiempo sino porque lo incorporas a tu vida y porque te vas adaptando a esa situación y a vivir con esa ausencia dentro de ti.

Con vuestro programa ponéis el foco en el derecho al duelo

Es un programa que lleva 14 años en funcionamiento, un programa sanitario y reo que eso es algo que hay que recalcar. Es un programa público y gratuito de Osakidetza, desde la red de salud mental de Araba. Es el único programa de estas características que hay en todo el Estado. Personas en estas circunstancias ha habido siempre y siempre se les ha atendido, pero la novedad de crear un programa era que todas las pérdidas que se generaban fueran a parar al mismo centro de salud mental para que fueran atendidas de una manera un poco más especializada y específica.