Moncloa deja el futuro de la financiación autonómica a expensas del 21D
La cita electoral del 21 de diciembre se ha convertido en una frontera para el Gobierno de Mariano Rajoy. Desde la aprobación de un futuro modelo por la financiación autonómica a la negociación de los presupuestos de 2018, la fecha de las elecciones autonómicas catalanas decidirá la evolución política y económica del país.
El futuro sistema de financiación autonómica depende del resultado del 21D. “Las elecciones en Cataluña son claves y lo fundamental es que los independentistas pierdan la mayoría para poder avanzar”, señaló el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en la celebración del 39 aniversario de la Constitución de este miércoles en el Congreso.
Montoro descartó que hubiera una reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPPF) antes de que se conozca el resultado de los comicios catalanes. “No hay perspectiva para convocarlo”, insistió Montoro, aunque sí recordó que ya está programado para la próxima semana un comité técnico del CPP y el próximo 28 de diciembre tendrá lugar un comité preparatorio para preparar un Consejo a partir de enero.
A pesar de los continuas llamadas de algunos presidentes de comunidades autónomas del PP y el reiterado reproche de los socialistas a la ruptura de la palabra dada por el presidente Rajoy de tener un nuevo sistema de financiación autonómica este año, Montoro reiteró que “en temas de financiación autonómica es muy importante esperar a Cataluña. El clima político en España cambiará a partir de las elecciones catalanas, será más fácil alcanzar el consenso político a partir del 21D”.
En el mismo sentido se expresó la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que admitió este miércoles que no se convocaría la Conferencia de presidentes autonómicos (donde se debaten y adoptan acuerdos sobre asuntos de especial relevancia para el sistema autonómico) hasta después de los comicios en Catalunya.
La tensión electoral catalana que bloquea el nuevo modelo de financiación no significa, según Montoro, que no se estén dando pasos hacia el futuro sistema. “Vamos a tener los trabajos preparados, pero sobre todo vamos tener identificadas las diferencias que han puesto sobre la mesa las comunidades autónomas para revisar el modelo”, ha añadido.
Cuenca del Mediterráneo frente a otras autonomías
En este sentido la vicepresidenta del Gobierno explicó que “las comunidades autónomas de la cuenca del Mediterráneo quieren un modelo mientras que el resto quieren otro”. Una dicotomía que no es mala para el Ejecutivo de Mariano Rajoy ya que no sitúa la discusión entre los dos polos tradicionales de PP y PSOE. Esta situación puede favorecer las negociaciones, según la vicepresidenta.
De hecho, solo hace dos días se reunieron los representantes de los gobiernos de Asturias, Galicia y Castilla-León para que se tenga en cuenta sus principales problemas en la negociación de actual modelo de financiación autonómica: la pérdida de población, el envejecimiento o la lucha contra los incendios forestales, entre otros.
Aunque algunas voces en Moncloa habían apuntado que la comisión territorial que ha puesto en marcha el PSOE en el Congreso podría recoger algunas ideas sobre financiación autonómica, más por darle algo de contenido ya que el Gobierno prefiere no entrar en la reforma constitucional, Montoro rechazó que “el trabajo de esa comisión se centre en la financiación de las comunidades autónomas”.
Fuentes de Hacienda han insistido en que el supuesto calendario para presentar un nuevo modelo de financiación antes del 31 de diciembre de este año es un empeño del PSOE pero que las circunstancias políticas han retrasado una reforma de reparto de las finanzas regionales.
De todas maneras, Montoro también rechazó las prisas porque “la financiación autonómica no es el tema más importante para los ciudadanos. A la gente le importa más el empleo y a los pensionistas les importa más su pensión. Lo importante es la creación de empleo, en tres años podemos tener la mejor situación de empleo de la historia. Un país lleno de parados con pensiones bajas no es viable. La solidaridad no es entre territorios sino entre españoles, la solidaridad interterritorial son empleos y pensiones”.
Los Presupuestos también penden de Catalunya
Una vez que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, rebajó este miércoles la urgencia de una reforma constitucional ya que entiende que es en el seno de la Unión Europea donde se dan los cambios que afectan realmente a los españoles, el líder del PP señaló que a partir de enero se retomarán las negociaciones con los grupos parlamentarios, especialmente con el PNV, para aprobar las cuentas públicas de 2018.
La crisis política y social en Catalunya más la aplicación del artículo 155, que supuso la intervención de la autonomía catalana por el Gobierno central, provocó que los nacionalistas vascos dieran un paso atrás y se negarán a seguir con las reuniones de negociación de los presupuestos hasta que se calmaran las aguas en el ámbito catalán.
Aunque las últimas encuestas sobre los comicios catalanes ofrecen un resultado incierto donde no se da una mayoría del bloque independentista ni del constitucionalista, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, aseguró que “el procés está kaputt, el esquema está agotado”.
