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El Ayuntamiento de Huelva cargó hoteles y viajes a una empresa pública destinada a construir viviendas

Las facturas cargadas a la Empresa Municipal de Vivienda/ FOTO: Viva Huelva

Fermín Cabanillas

Huelva —

El Ayuntamiento de Huelva cargó varios viajes y estancias en hoteles en los últimos años a la Empresa Municipal de la Vivienda, un organismo que, precisamente, la pasada semana se anunciaba que será disuelto por considerarse ineficaz, dejando en la calle a las doce personas que tenía contratadas.

Unos cargos calificados por el primer teniente de alcalde del consistorio, Francisco Moro, de “normales”, y que ha desvelado el periódico Viva Huelva. Este medio ha tenido acceso a un lote de facturas que demostrarían un uso cuanto menos llamativo de los fondos de la empresa pública ahora disuelta, y que además ha dejado pendientes dos nóminas a sus trabajadores y cuatro pagas extras.

Un asunto del que, más que la cantidad, que asciende a 6.193 euros, llama la atención el hecho en sí, y también la explicación que este miércoles daba el alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, cuando sostenía que “el Ayuntamiento lo forman muchas empresas” y “cuando el alcalde viaja no sé de dónde sale el pago”. Es decir, según su criterio, se pueden cruzar facturas de un departamento a otro sin mayor problema.

Los fondos se emplearon para distintos usos, aunque casi siempre tienen que ver las facturas, consultadas por eldiario.es/andalucia, con viajes u hoteles. Entre esos viajes, el 13 de diciembre de 2011 Moro tenía que desplazarse a Madrid para acudir a la sesión constituyente del Senado -era senador electo- aunque fue acompañado a la capital de España, concretamente por el alcalde, Pedro Rodríguez (PP) y Ángel Sánchez, concejal de Presidencia, Comercio y Turismo. Podría haber sido un viaje de un solo día, pero partieron en la jornada del 12 de diciembre, y cada uno de los billetes de AVE desde Sevilla, en clase preferente, costó 126,90 euros. El hotel, en las tres reservas a nombre del alcalde, fue el NH Embajada (tres estrellas),con un coste de 108,87 euros por habitación.

La suma de los billetes de vuelta (105,90 cada uno) elevó la factura total de ese viaje a 1.024 euros, distribuidos en 9 facturas, que fueron cargadas a la citada Empresa Municipal de la Vivienda.

El mismo modus operandi se aplicó el 10 de mayo de 2012. El alcalde, Ángel Sánchez, Manuel Remesal (teniente alcalde de Cultura y Deportes) y dos trabajadores del área de comunicación se desplazaron a Madrid, con el fin de reunirse con responsables de ADIF. El viaje costó 1.056 euros, también con cargo a la misma empresa pública.

Un mes después, el alcalde se reunió con la ministra de Fomento, Ana Pastor, y viajó con cuatro personas más, dos de ellas cargos políticos, cargando a las cuentas de la empresa ahora disuelta 949,3 euros.

1,198 euros un viaje de una sola noche

Una de las facturas refleja un viaje de ese mismo día a Madrid, en este caso de María Isabel Balsera Martínez, que en aquella época ostentaba el cargo de consejera de la Empresa Municipal de la Vivienda. Una noche en un hotel de cuatro estrellas, el Tryp Ambassa, en pleno centro de la capital, en una habitación doble con desayuno incluido costó 132 euros, lo que unido al cargo del desplazamiento provocó una factura de 1.198,6 euros. No ha trascendido en calidad de qué viajó a Madrid ese día ni cuál era la función del desplazamiento, ni tampoco por qué era una habitación doble la que se contrató.

La relación de las facturas es amplia, y en algunas coincide que el teniente de alcalde Francisco Moro eligió hoteles de lujo para alojarse, como el Vincci Soma, de cuatro estrellas y situado en uno de los barrios más selectos de la capital, el de Salamanca. 620,20 euros costó ese viaje, de los que 151,20 euros fueron solamente para la habitación. Algo menos costó el alojamiento del 5-6 de diciembre de 2011, 340,16 euros, en el NH Paseo Prado, de cuatro estrellas. Efectivamente, estos dos últimos viajes también los pagó la Empresa Municipal de la Vivienda.

Una relación de gastos que para el portavoz del grupo socialista en el Ayuntamiento de Huelva, Gabriel Cruz, es más que suficiente para que el alcalde, Pedro Rodríguez (PP), explique si pudo haber un uso “sin control” en los fondos de la Empresa que “se va a disolver y despedir a toda su plantilla”, asociando este asunto con la gestión económica del Ayuntamiento, “con 373 millones de euros de deuda con los bancos”.

“¿Un escándalo? Es una estrategia”

Francisco Moro ha respondido mediante un comunicado, en el que asegura que “es una estrategia de los socialistas para cargar contra el Ayuntamiento de Huelva y tapar las vergüenzas de su candidato, Gabriel Cruz, en el Torrejón”. Se refiere al caso de la denuncia del retraso en la reforma de viviendas en el barrio cuando Cruz era delegado de Obras Públicas. En una nota de prensa en la que los dos primeros párrafos están dedicados a este último tema, Moro sí se detiene después a asegurar que “las facturas de la Empresa Municipal de la Vivienda corresponden a actividades y trámites normales del trabajo de una institución en la que el Ayuntamiento de Huelva no tiene nada que ocultar porque a pesar de no tener competencias en la materia, nosotros aprovechamos el tirón de la construcción para hacer viviendas sociales en Huelva”, para luego volver a referirse al tema de El Torrejón.

Los restantes cuatro párrafos del comunicado se refieren a Cruz y su gestión en la Junta, de modo que, por el momento, no hay respuesta que aclare por qué el Ayuntamiento de Huelva cargó gastos a una empresa pública destinada a construir viviendas, no como agencia de viajes. Y como tal parece que actuó en un caso concreto, el de María Dolores Vázquez Muñoz, concejal del PP en la localidad onubense de Cumbres Mayores y senadora popular por Huelva. Muñoz viajó a Madrid el 29 de noviembre de 2011 con cargo a la empresa de la vivienda, que le costeó los 390 euros del desplazamiento.

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