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Recta final hacia un gobierno progresista para desbancar al PP en Córdoba

Isabel Ambrosio (PSOE) encabezaría el gobierno progresista en la capital cordobesa.

Carmen Reina

La hoja de ruta que los resultados del pasado 24M arrojaron en Córdoba cumple ya dos semanas y afronta los últimos días de negociaciones antes de que el próximo sábado se constituya el Ayuntamiento. La mayoría minoritaria obtenida por el PP (11 concejales) abría la vía para un pacto entre las fuerzas progresistas, que sí suman los 15 concejales necesarios para ostentar la mayoría absoluta en el pleno municipal: 7 del PSOE, 4 de Ganemos Córdoba y otros 4 de IU. Las últimas reuniones entre estas tres formaciones señalan que se está gestando el acuerdo de gobierno, aunque con dudas hasta el final de si será un bipartito (PSOE+IU) o también Ganemos Córdoba entrará en un ejecutivo tripartito.

Lo que las tres formaciones han dejado claro desde el inicio es su idea de impedir que el PP gobierne de nuevo en la capital y, a partir de ahí, los contactos y conversaciones a dos entre PSOE, Ganemos Córdoba e IU se han producido incesantemente en las dos semanas posteriores a las elecciones. Pero ha habido más avances. Los últimos encuentros, entre el pasado domingo y este martes, han sido ya una reunión a tres bandas para tratar de concretar las medidas que se incluirían en un programa de gobierno común, a partir de los documentos que cada una de las formaciones han elaborado previamente para proponer un acuerdo. Y sin dar por hecho el pacto, los representantes de las tres fuerzas progresistas sí dicen algo abiertamente que da una pista sobre el rumbo de las negociaciones: “Hay más puntos de acuerdos que desacuerdos”.

Según lo expresado por las tres fuerzas, lo que parece claro es que todas ellas apoyarán la investidura de la candidata socialista, Isabel Ambrosio, como nueva alcaldesa de Córdoba, la única manera de que los 11 votos del PP –aunque sumara 2 más de Ciudadanos y 1 de UCOR (al acta de concejal acaba de renunciar Rafael Gómez 'Sandokán')- no serían suficientes para que el popular José Antonio Nieto siguiera en el cargo cuatro años más.

A partir de ahí, las negociaciones llevadas a cabo hasta el momento han dejado dos vías aún abiertas para conformar el gobierno municipal y que no se cerrarán hasta este miércoles. El PSOE tiene claro que, pese a que le apoyarán la investidura de su candidata como alcaldesa, no se arrojaría a tumba abierta a un débil gobierno local con sólo sus 7 concejales y 22 ediles en la oposición. Quiere, según ha expresado en estos días que, al menos una de las otras dos fuerzas progresistas, le acompañe y entre a formar parte del ejecutivo local.

Reedición de un gobierno municipal compartido en Córdoba

Y ahí, Izquierda Unida es la que se ha mostrado más dispuesta, según ha trascendido de las distintas reuniones de negociación, en las que parece que socialistas e IU habrían encontrado ya su sintonía común para reeditar un pacto de gobierno que ambas formaciones ya llevaron a cabo en dos mandatos: 1999-2003 y 2007-2011. Aun así, la formación celebrará este miércoles 10 de junio un referéndum entre sus militantes y simpatizantes para rubricar el acuerdo que ven con buenos ojos desde su dirección.

Del otro lado, Ganemos Córdoba lo deja todo abierto a lo que decida también el mismo miércoles 10 de junio su asamblea, el órgano decisorio de esta organización novel. Hasta el momento, los representantes de su comisión de negociación con el resto de partidos han explorado las posibles vías que el escenario electoral ha dejado y hasta un acuerdo programático, pero serán en última instancia todos sus integrantes en asamblea quienes decidan si finalmente entran a formar parte del gobierno local.

Lo que parece estar claro es su apoyo a la investidura de la candidata socialista para no dejar gobernar al PP, pero si Ganemos Córdoba entrará o no en el gobierno municipal sólo se sabrá por boca de su asamblea. La candidatura ciudadana ha puesto sobre la mesa 36 medidas para acceder a formar gobierno con lo que considera esencial para dar el sí a PSOE e IU. Porque hasta el momento, del resultado de sus reuniones y encuentros en la calle con los vecinos a los que han consultado, se contempla por igual tanto la posibilidad de apoyar la investidura de la candidata socialista y pasar luego a la oposición como la de dar el paso y entrar a compartir las responsabilidades del gobierno del Ayuntamiento de Córdoba.

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