La sanidad andaluza atiende a 32.000 inmigrantes en situación irregular, 20.000 menos de los que dice Vox
El presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, ha vuelto a esquivar la petición que Vox tardó cinco minutos en recordarle nada más tomar posesión de su Gobierno: que colabore para ejecutar a deportación de 52.000 inmigrantes en situación administrativa irregular en la comunidad autónoma. Moreno Bonilla se ha escudado en que son las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, dependientes del Ministerio del Interior, las encargadas de gestionar la información y que se atenderán “siempre” sus solicitudes de información. Pero ha aportado una novedad: la sanidad andaluza atiende a 32.000 inmigrantes en dicha situación, 20.000 menos de los que dice el partido de extrema derecha.
Alejandro Hernández, portavoz del Grupo Parlamentario Vox en Andalucía, ha preguntado al presidente en la sesión de control del Pleno por la coordinación y cooperación con el Gobierno de la nación en materia migratoria, recordándole que, entre los acuerdos entre PP y Vox para investirle presidente está que la Junta deberá “apoyar material, humana y documentalmente a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que tienen encomendada la protección de las fronteras, garantizando una inmigración ordenada, legal, respetuosa con nuestra cultura occidental, vinculada siempre al mercado laboral”, algo prohibido por ley.
El portavoz del partido de extrema derecha ha citado palabras del presidente del PP, Pablo Casado, respecto a los “milones de africanos” que quieren alcanzar suelo europeo. “Lo que pasa es que ustedes muchas veces se apuntan al discurso de vox pero otras veces les preocupan los editoriales de El País o lo que digan los locutores de la Ser que atender a los compromisos suscritos. ¿Se comprometen a facilitar los datos que obran en poder de la Junta, señor Bonilla?”, le ha preguntado. “Tenemos un mensaje muy claro, y es que la entrada de inmigrantes esté supeditada a los intereses nacionales”, ha explicado.
El presidente andaluz ha insistido en que defiende “una política de inmigración regulada y ordenada, que luche contra las mafias”, y que esté “liderada por el Gobierno de la nación”, con “la coordinación como elemento básico”, apostando por “acuerdos laborales en origen”, por la “integridad territorial de la frontera”, por la “transparencia en el proceso migratorio” y por “trabajar con rigor y responsabilidad”
Moreno Bonilla ha señalado que existen “más de 32.000 personas” no registradas a los que se les presta atencion sanitaria. También ha criticado sobre la materia el “descontrol de la migración del Gobierno socialista, que un día abre los puertos y a otro los cierra”, o que denuncia y justifica las devoluciones en caliente“. ”Ese 'efecto llamada' lo estamos pagando todos los españoles“, ha lamentado.
