Una denuncia múltiple luchará contra los 18 años de tope laboral para 800 militares
En el año 2018 se cumplirá un siglo de la creación de la Escala de Complemento del Ejército español. Fue creada mediante una Ley firmada el 29 de Junio de 1918 con el fin de completar, tanto en tiempo de paz como bélico, los considerados cuadros inferiores del Ejército español, donde están los alférez, tenientes y capitanes. Se trataba de que personas con una carrera universitaria como mínimo pudiesen acceder al Ejército directamente con galones de alférez, pero con un matiz: la caducidad en el cuerpo, que hace que no puedan estar en él más de 18 años.
Ahora, hasta medio millar de militares que accedieron en su día al cuerpo de Complemento van a llevar al Ejército a juicio para demandar tanto que puedan seguir siendo militares cuando pasen esos 18 años, como que en el caso de ser despedidos puedan contar con una indemnización que llegue a los 33 días por año trabajado, de forma que se les tenga en cuenta el total de los años que han estado trabajando y no los distintos contratos parciales que hayan firmado.
La cifra exacta de afectados por esta normativa no está clara, aunque se calcula que son unos 800 los oficiales de Complemento con contrato actualmente. “Son indispensables y realizan una gran labor en sus puestos, que hay que defender para que sigan en ellos”, señala a eldiario.es Andalucía el abogado Fernando Osuna, encargado de la defensa de algunos de los militares que van a ir a juicio para solventar su situación.
Actualmente, los militares afectados se sienten discriminados con los criterios que rigen el mundo laboral en el Ejército, que les impide ascender en sus puestos de trabajo. Osuna especifica que los afectados, alférez de complemento sobre todo, “se tienen que salir del Ejército tras muchos años prestando servicios, con unas indemnizaciones ridículas, con lo que hay un trato muy desigual con respecto a cualquier trabajador que no sea militar”.
Sentencias a tener en cuenta
El letrado concreta que las últimas sentencias contra la Administración para acabar con su temporalidad “nos han animado a presentar batalla, ya que muchos se van a lo que se llama Reserva de Especial Disponibilidad después de como mínimo 18 años de servicio, incluso habiendo concatenado como mínimo tres contratos temporales después de haber superado como acceso un concurso-oposición para acceder al mundo militar”.
En estos casos, las compensaciones económicas son muy inferiores a lo que ocurre en el mundo laboral en general, según Osuna, que señala que son dados de baja al cumplir el contrato con el Ejército sin ningún tipo de indemnización por finalización de relación laboral.
Igualmente y debido a una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, que le dio la condición de fija indefinida en las Fuerzas Armadas a una interina del Ministerio de Defensa, se quiere esgrimir ese argumento “para cambiar esta penosa situación”.
“Se encuentran con una promoción interna que supone un beneficio, pero que solamente puede producirse si se está en posesión de una titulación universitaria de tipo técnico, como ingenierías, pero esto no se contempló cuando accedieron, donde sólo se requería una diplomatura universitaria”, indica el letrado.
De esta forma, al haber un número reducido de plazas para permanentes, muchos militares abandonan las Fuerzas Armadas de manera forzosa, “en lugar de ocupar las muchas vacantes sin cubrir en nuestra milicia que no están siendo ocupadas por integrantes de otras escalas”.
En el proceso judicial se intentará eliminar los problemas que supone que la normativa militar facilite una relación de carácter permanente a los oficiales de complemento, una vez el consejo asesor de personal diera el visto bueno, “pero existe una intención del Ministerio en no cumplir con lo que se ha legislado”, además de que “se le pone a la Escala de complemento muchas dificultades, entre ellas la imposibilidad de acceder a viviendas militares en los destinos donde se ofrecen”.
“Su preparación es incuestionable”
Fernando Osuna considera que la situación actual “es insostenible, porque son personas que tienen todas una carrera universitaria, algunas de muy alta puntuación, y lo único que quieren es seguir en sus puestos hasta la edad de jubilación y que no se vean en desempleo”, ya que “se dan casos extremos, como militares que son despedidos a los 38 años de edad porque han entrado en el cuerpo a los 20 años, y tras 18 años de servicio se quedan parados en plena vida laboral activa”.
Por su parte, desde el Ministerio de Defensa, en declaraciones a eldiario.es Andalucía, no se ha entrado a valorar este hecho, destacando que los militares que van a presentar la denuncia “pueden hacerlo si consideran que así se salvaguardan sus derechos”, aunque destacando que “no se va a valorar este asunto de forma previa” a la vez que se ha recordado las condiciones generales que regulan el trabajo del cuerpo de complemento, que coincide con lo reflejado en la denuncia, que Fernando Osuna especifica que, salvo retrasos, será presentada a principios de diciembre.
