El Gobierno de Cantabria suma un nuevo cambio en su organigrama con el cese del director general de Juventud

El Gobierno de Cantabria ha aprobado este jueves un nuevo cambio en su organigrama, con lo que se acerca al medio centenar de ceses o dimisiones entre sus altos cargos cuando se ha cumplido poco más de la mitad de la legislatura. En este caso, el Consejo de Gobierno que preside María José Sáez de Buruaga (PP) ha ratificado el cese, a petición propia, de Joaquín Rueda como director general de Juventud, Cooperación al Desarrollo y Voluntariado, así como el nombramiento de Blanca Fernández como nueva responsable de estas competencias.

Según ha informado el Ejecutivo autonómico mediante una nota de prensa, Blanca Fernández González (Santander, 1975) es diplomada en Magisterio, Especialidad Audición y Lenguaje, y en Educación Social por la Universidad de Oviedo, además de Máster en Protección a la Infancia y a la Adolescencia por la Universidad de Cantabria.

Desde febrero de 2025 ha desempeñado las funciones de directora del Centro de Accesibilidad, Atención y Cuidados en el Domicilio (CADOS) del Instituto Cántabro de Servicios Sociales. Previamente, ha trabajado en la Sección de Medidas Judiciales del Gobierno de Cantabria, supervisando las medidas judiciales susceptibles a menores de edad y los seguimientos de los Menores Extranjeros No Acompañados (MENAS) tutelados por el Ejecutivo autonómico. 

También ha prestado servicios como técnica especializada en infancia en el Programa de Acogimiento Familiar, en el Programa de Intervención Familiar y en el Servicio de Atención a la Infancia, Adolescencia y Familia del Gobierno de Cantabria, al que se incorporó en el año 2007.

Ceses y dimisiones

El Gobierno de Buruaga se ha caracterizado a lo largo de estos dos años de legislatura por el continuo baile de nombres, con ceses y dimisiones constantes en áreas que han cambiado de responsables hasta en dos y tres ocasiones, además de una remodelación del Ejecutivo en sus puestos más altos que la presidenta de Cantabria vendió como un “nuevo impulso” tras superar apenas los primeros 12 meses desde que tomó posesión.

Así, cerca de medio centenar de mandatarios autonómicos de primer nivel han sido relevados o han renunciado al puesto en el Gobierno de Cantabria, entre consejeros, directores generales, secretarios generales o responsables de entes y empresas públicas, que también han sido objeto de controversia por la inestabilidad de sus mandos directivos.

Uno de los departamentos más cuestionados por los constantes cambios ha sido la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte, donde han cesado un total de 15 altos cargos. Entre otros, la propia consejera, su jefe de gabinete, dos secretarios generales, el director general de Turismo, el director general de Cultura, la directora de Cabárceno, el director de CANTUR, la directora de la Fundación FIS, el director de la Sociedad Regional de Cultura, Turismo y Deporte, el director artístico del Palacio de Festivales o la responsable de recursos humanos de CANTUR.

Con este nuevo nombramiento, en poco más de dos años de legislatura, Buruaga ha cambiado a uno de cada cuatro altos cargos de su Gobierno. En el baile de ceses se han incluido algunos consejeros como el de Ganadería, Pablo Palencia, que solo duró un año y dos meses. Al tiempo, se prescindió también de la titular de Cultura, Eva Guillermina Fernández, aunque en un rocambolesco giro de guion se anunció al día siguiente que pasaría a un escalón inferior como directora general de Cultura.