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Liberbank plantea un nuevo ERE con despidos y reducciones de jornada

Liberbank puso en marcha en 2016 un plan de cierre de oficinas que afectó a más de 300 establecimientos.

Rubén Vivar

Liberbank, la entidad financiera en la que se integró Caja Cantabria, quiere aplicar un nuevo Expediente de Regulación de Empleo (ERE), el cuarto desde el año 2011. La entidad dirigida por Manuel Menéndez ha convocado este próximo lunes a los representantes de los trabajadores de Liberbank y de Banco Castilla La Mancha -entidad participada- a una reunión en Madrid para comenzar las negociaciones.

En el escrito remitido a los sindicatos, al que ha tenido acceso eldiario.es, se comunica “la intención de la empresa de iniciar el procedimiento de despido colectivo”, que “afectará potencialmente a la totalidad de los centros de trabajo del banco”. La dirección también prevé aplicar reducciones de jornada y de movilidad geográfica, según consta en el requerimiento.

Esta convocatoria llega apenas unas semanas antes de que concluya durante este mismo mes de junio el ERE que actualmente está en vigor, que se inició el 1 de enero de 2014 y que ha supuesto unos recortes salariales de entre un 10 y un 30%. También en 2016 Liberbank puso en marcha un plan de cierre de oficinas que afectó a más de 300 establecimientos, más de medio centenar en Cantabria.

Banco Castilla La Mancha, clave

Sibank (antes CSICA), sindicato mayoritario en Liberbank, ha acusado al consejero delegado, Manuel Menéndez, y a su equipo directivo, de “incumplir” los compromisos adquiridos, al tiempo que ha reclamado una negociación por separado entre los representantes de los trabajadores de Liberbank y del Banco Castilla La Mancha (BCLM).

Según apunta esta organización, Liberbank cerró el ejercicio 2016 con beneficios -129 millones de euros-, mientras que BCLM registró unas pérdidas de 111 millones -tuvo que reducir patrimonio para no entrar en causa de disolución-, de modo que “la entidad participada está lastrando el balance de la matriz”. Por ello, Sibank cree que “no puede admitir que la dirección de Liberbank traslade a la plantilla de esta empresa las consecuencias contables de su desastrosa gestión en el Banco Castilla La Mancha”.

“Se trata de juntar en una única mesa de negociación a la dominante y a la filial y así tener una disculpa para aplicar recortes al conjunto de la plantilla, sin tener en cuenta las circunstancias de cada una de las empresas”, denuncia el sindicato, que apunta que en una negociación conjunta los representantes de Liberbank quedan “postergardos” a pesar de ser la matriz.

“Dicho de otro modo: BCLM pone las pérdidas y los trabajadores de Liberbank pagan las consecuencias”, concluye.

“Cronificar el ERTE”

En este sentido, Sibank acusa a la dirección del banco de utilizar la reforma laboral “de un modo torticero” para “socializar en Liberbank las pérdidas de BCLM” y así “cronificar el ERTE que venimos padeciendo salvajemente desde junio de 2013”.

Igualmente, para este sindicato “resulta lamentable que todas las ayudas públicas, los recortes y el sacrificio padecido por los trabajadores durante cuatro años no hayan dado los frutos a los que la dirección se comprometió, siendo el único responsable de incumplir el compromiso el consejero delegado, Manuel Menéndez, y su equipo directivo”.

Finalmente, CSICA ha apuntado que va a participar en la composición de la comisión negociadora pero sin considerar “legítima” una comisión mixta integrada por representantes de Liberbank y del BCLM. A este respecto, sostiene que existen criterios fijados en la doctrina jurisprudencial para que ambas entidades sean consideradas a efectos laborales como un grupo de empresas.

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