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Pelegrí reconoce desorganización en la construcción del canal Segarra-Garrigues

El canal Segarra-Garrigues a la altura de Taradell, cerca de Tàrrega (Lleida).

CatalunyaPlural

Barcelona —

El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Natural, Josep Maria Pelegrí, hace un primer reconocimiento de los factores irregulares que se han producido en la construcción del canal Segarra-Garrigues y en el desarrollo del proyecto. Ha calificado la gestión de la construcción de desorganizada, en declaraciones a la Agencia Catalana de Noticias.

La obra del canal Segarra-Garrigues es uno de los proyectos estrella del gobierno de Cataluña de los últimos años, pero la realización se ha visto inmersa en un conjunto de problemas e irregularidades que han hecho que se llegara a poner en cuestión su finalización.

CatalunyaPlural publicó una serie de reportajes exclusivos en los que se analiza a fondo los problemas de la magna obra pública y se apuntan los errores cometidos hasta ahora.

Desvio presupuestario

El consejero, que es además el segundo de la jerarquía de Unió Democrática de Cataluña (UDC), ve “más cerca” el final de la construcción del Segarra-Garrigues después de que el Gobierno aprobara la refinanciación para terminar las obras del canal . El presupuesto inicial de esta obra sumaba unos 1.500 millones de euros. Cálculos posteriores fijaban el presupuesto final en casi dos mil millones, en concreto 1.928 millones. Hay que recordar que el presupuesto inicial, que data de 2007 fue de 1.069 millones y el desvío al alza se situó en un 81%.

En una entrevista a la ACN Pelegri explica que ahora falta la “segunda pata”, el compromiso de los regantes. “Son factores que van en paralelo”, ha remachado. Para Pelegrí, el canal se ha puesto “en riesgo” por la “desorganización” en la ejecución de la obra, que avanzaba “sin tener en cuenta las necesidades globales”. Según Pelegrí, la “mala programación” respondía a la voluntad “de quedar bien con todos” e intentar “hacer en función de intereses que se iban manifestando a lo largo del tiempo”.

De hecho, la Generalitat evitó el fiasco definitivo de esta obra faraónica en una decisión tomada a principios de agosto. El gobierno catalán ha garantizado la financiación del canal Segarra-Garrigues para los próximos 4 años. Así lo acordó el Consejo de Gobierno que autorizó el departamento de Agricultura a refinanciar las obras. La Generalitat se compromete a seguir construyendo la red secundaria siempre que haya demanda de regantes. El acuerdo prevé pagar una deuda de 76 millones de euros al Estado, lo que permitirá poner en regadío 20.000 nuevas hectáreas y construir el pantano de L'Albagés. Esta última cifra, optimista, contrasta con los datos reales.

¿Proyecto fallido?

El canal se proyectó para regar 68.000 hectáreas, riega unas 3000. Respecto a la participación en la inversión de los futuros regantes, sólo unos 200 tenían, a mediados de julio lo habían hecho En contraste, se preveía que los 17.000 propietarios de tierras regables lo hicieran, lo que no ha sido, de momento. posible.

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