La gasolinera de la avenida de Lluís Suñer de Alzira ya es municipal, paso previo para su desmantelamiento

El Ayuntamiento de Alzira ya es propietario de la gasolinera de la avenida de Lluís Suñer, una vez se hizo efectiva ayer la compraventa con los cinco herederos del inmueble, comprometida el pasado mas de julio.

Así lo han explicado este jueves en rueda de prensa el alcalde, Diego Gómez; la regidora de Seguridad, Infraestructuras y Urbanismo, Sara Garés, y el concejal de Servicios y Obras Públicas, y regidor de Deportes, Fernando Pascual.

Hay que recordar que es una parcela de 2.114 m² con una edificación destinada a oficinas y almacén, una zona destinada a área de servicio y gasolinera, con sus correspondientes depósitos subterráneos para el almacenamiento de combustible. Según la valoración técnica, el valor residual del suelo es de 255.000 euros. A esa cantidad hay que descontar las tareas de descontaminación y recuperación del suelo contaminado, que asciende a 63.000 euros aproximadamente, y los trabajos de demolición, presupuestados en 23.500 euros. Por lo tanto, el precio final de compraventa es de 186.900 euros.

El alcalde, Diego Gómez, ha hecho una valoración política muy positiva, dado que “hemos resuelto en el plazo de una semana dos expedientes ‘históricos’. El primero, el del convenio para poder desbloquear la ordenación de la carretera de Albalat, y el segundo, este, con el que se da solución a una reivindicación vecinal de hace muchos años”. El alcalde ha agradecido el gran trabajo que ha hecho el personal técnico de los departamentos de Secretaría, Urbanismo y Servicios Públicos, así como la paciencia y la confianza del vecindario de la zona. Por último, ha declarado que “esta compraventa es el fruto del trabajo, la gestión y la negociación del actual equipo de gobierno, al cual no se puede acusar de inmovilismo. También cumplimos uno de los acuerdos del Pacto de la Vila, y volvemos la confianza que nos dio la ciudadanía alcireña y que será reforzada cuando, en breve, la gasolinera desaparezca y empiecen los trabajos para recuperar el espacio para el pueblo donde se incorporarán el mural de la antigua Avidez y el busto dedicado a Luis Suñer, que eran dos compromisos adquiridos con anterioridad”.

La concejala de Seguridad, Infraestructuras y Urbanismo, Sara Garés, ha valorado que “la gasolinera dejará de ser una preocupación para el vecindario”. A continuación, ha explicado el procedimiento para llegar a la compraventa: “El interés del equipo de gobierno empieza el 2015, cuando se constata la falta de actividad de la gasolinera y su cierre, con la consiguiente preocupación por el estado de los depósitos y la contaminación del suelo. Después de abrir dos expedientes, de informar las consellerías de Industria y Medio Ambiente, el 2016 se inician las conversaciones con el propietario para adquirir y sanear la gasolinera. Hay varias circunstancias que impidieron el acuerdo, pero el interés se mantuvo. Una vez aclarada la titularidad de la gasolinera, se emprenden de nuevo las conversaciones con los representantes legales de los herederos de Francesc Cucarella, y es cuando se llega al acuerdo actual, que consideramos beneficioso para las dos partes”.

El concejal de Servicios y Obras Públicas, y regidor de Deportes, Fernando Pascual, ha valorado que “este acuerdo es muy importante, que soluciona una reivindicación de la Asociación de Vecinos del Alborgí desde hace 20 años, cuando surgieron los problemas de olor de hidrocarburos. Es un trabajo muy hecho por este equipo de gobierno”. A continuación, ha explicado el que se hará a partir de ahora: “El 27 de septiembre empezarán los trabajos de limpieza de los cinco depósitos. Después, se realizará el desmontaje de la gasolinera. Estos dos trabajos tendrán una duración aproximada de 3 o 4 semanas. A continuación, con un georadar se verá el nivel de contaminación del suelo. Con la valoración que se haga, se realizarán las tareas de descontaminación”. Una vez acabada esta fase, ha anunciado que “se elaborarán unas bases porque arquitectas y paisajistas puedan presentar diseños del espacio. Un jurado elegirá tres de los proyectos presentados y se abrirá un periodo de participación ciudadana para votar el proyecto que finalmente se realice”.