La detección de violencia de género en la sanidad pública valenciana se multiplica tras la pandemia: 1.400 casos en 2022

“Se trata de establecer un clima de confianza, una situación de empatía entre la paciente y el sanitario o sanitaria que está formado para abordar este tipo de situación. Si se aprecian lesiones que no cuadran con la historia que cuenta y se ve que puede haber indicios se puede preguntar abiertamente si puede ser un caso de violencia de género”.

Así explica la doctora en ginecología Ana Monzó, que además preside la comisión contra la violencia de género del departamento de salud del Hospital La Fe, en València, el funcionamiento del protocolo de detección de casos en la sanidad pública que solo el año pasado permitió detectar 1.468 víctimas en los diferentes recursos, la mayoría (más de un millar) por violencia psicológica y el resto, por agresiones físicas (más de 600) y sexuales. La suma supera los 1.468 casos porque hay ocasiones en que una misma paciente es víctima de varios tipos de violencia.

Monzó comenta que el año pasado los casos han vuelto a acercarse a los niveles prepandemia tras dos años marcados por las restricciones: “El aumento también tiene que ver con el hecho de que los doctores y doctoras cada vez preguntan más y cada vez hay más recursos de ayuda y las mujeres reconocen más los casos”.

En 2022 pasaron por el protocolo de detección de posibles casos en el sistema de salud un total 60.886 mujeres, de las que 60.233 aceptaron participar, con un resultado de 1.468 casos confirmados, por los 364 de 2020 y los 884 de 2021.

Según la doctora, si una paciente por miedo no quiere reconocer los hechos pero el profesional aprecia un riesgo real, “este puede solicitar la presencia de agentes de la autoridad para hacerle ver que se trata de una situación grave y para explicarle todos los recursos de ayuda que tiene a su alcance para denunciar”.

Fuentes de la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública han informado de que en total se han detectado 13.130 casos de violencia de género a través del programa de cribado de detección contra la violencia de género que arrancó de forma piloto en varios departamentos en 2013 y se extendió de forma generalizada al resto en 2015.

“La violencia machista no tiene cabida en nuestra sociedad; es una lacra que debemos combatir desde todas las esferas. En el entorno sanitario, contamos con una herramienta que se ha revelado de lo más efectiva: el cribado de detección contra la violencia de género. Desde su puesta en marcha, más de 530.000 mujeres han participado en las entrevistas que se realizan en los centros de atención primaria y urgencias hospitalarias, con un 2,5 % de casos positivos”, ha detallado el conseller de Sanidad Universal y Salud Pública, Miguel Mínguez.

La Comunitat Valenciana cuenta con varias guías de actuación para orientar a los y las profesionales del sistema sanitario a la hora de detectar activamente los casos sospechosos, intervenir en ellos y hacerles seguimiento (el protocolo de atención sanitaria a víctimas de violencia de género en los servicios de urgencia o el protocolo de atención a las agresiones sexuales, entre otros).

“La mujer espera en una sala separada para que pueda estar tranquila y, en menos de 30 minutos, pasa por triaje. Si hace falta explorarla, la acompañamos hasta la consulta y, además de la valoración física, entra en el Sistema de Información de Violencia de Género/Doméstica. En esta aplicación hay un cuestionario de valoración de riesgo. Si la puntuación es alta, llamamos a las fuerzas de seguridad, si no están ya con la mujer, y se gestionan los recursos necesarios, por ejemplo, un Centro Mujer 24 horas. Además, siempre hacemos una interconsulta con Trabajo Social para el seguimiento de los casos”, explica Elena Martínez Morcillo, médica adjunta en el Servicio de Urgencias del Hospital La Fe.

En este sentido, como adelanta Martínez Morcillo, el circuito sanitario se complementa y coordina con otros agentes intervinientes y servicios especializados (no sólo Trabajo Social o los Centros Mujer 24 horas sino también la Oficina de Asistencia a la Víctima del Delito, los juzgados de violencia de género y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, entre otros).