El empresario chino que ha surtido a la Generalitat Valenciana con 48,1 millones en material sanitario lleva su centro comercial de Ontinyent a preconcurso de acreedores

La crisis de la COVID-19 ha llevado a muchos empresarios a una paradoja. Mientras sus negocios más rentables se han hundido, los que antes eran deficitarios se han convertido en una mina de oro. Ese es el sentimiento que debe tener el empresario chino Chen Wu Keping, una de las personas clave en la Comunitat Valenciana durante los momentos más duros de la pandemia. Keping se convirtió en el suministrador de cabecera de material sanitario cuando el mercado mundial se colapsó y permitió a la Generalitat Valenciana respirar tranquila durante los meses más duros, entre marzo y junio. Gracias a los contactos de este emprendedor, el Gobierno valenciano pudo anunciar que tenía mascarillas y equipos de protección cuando había un desabastecimiento total.

Por estos servicios, que continúan en la actualidad, el empresario Keping había cobrado hasta mitad de julio 39 millones de euros. Hasta la fecha, el montante facturado es de 48,1 millones. Y eso que ni su material ni sus aviones fueron los más baratos. Pero este emprendedor chino ha tenido que ver cómo otra pata importante de sus negocios comenzaba a tener problemas. Con las restricciones impuestas, tanto antes como durante el estado de alarma, su centro comercial El Teler de Ontinyent ha pedido el preconcurso de acreedores. La información ha sido adelantada por el Periòdic d'Ontinyent y, según este rotativo, la petición de preconcurso ha sido motivada para evitar que fuera un acreedor el que solicitara el concurso, con la correspondiente pérdida de control de la empresa, que habría pasado a manos de un administrador.

El empresario Keping ha visto disparada su liquidez en estos últimos meses gracias a las inyecciones de la Generalitat que, según han confirmado públicamente la administración, llegó a hacer pagos por adelantado para asegurarse el material. De hecho, su sociedad Comité Textil ha visto cómo su facturación e ingresos se han disparado de manera exponencial en los últimos meses. Por su parte, el centro comercial y de ocio el Teler, que controla a través de la sociedad Comercio Fácil, ha visto cómo sus ingresos hundían.