Pedro Sánchez emplaza a PP y Ciudadanos a negociar los Presupuestos: “Vamos a tender puentes a izquierda y derecha”
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha sido el encargado de clausurar el XXI Congreso Nacional de la Empresa Familiar que se ha celebrado estos días en Valencia. Sánchez, que ha estado acompañado del presidente del Instituto de Empresa Familiar, Francisco Riberas, ha intervenido en este foro apenas unas horas después de que Pablo Casado reclamara ante este mismo auditorio el bloqueo del proyecto de Presupuestos para 2019 y la convocatoria de elecciones generales anticipadas.
Pedro Sánchez, quien ha comenzado su intervención con un recuerdo para la exministra Carmen Alborch, fallecida hoy hace una semana, frente a la petición de bloqueo a las cuentas realizada por Casado, ha ofrecido a todos los partidos “de izquierda y derecha”, incluidos PP y Ciudadanos, acordar los presupuestos del próximo año si “hay voluntad real de que no haya bloqueo”, al asegurar que el veto “tiene que ser el pasado”.
El presidente del Gobierno ha mostrado su voluntad de “lograr los mejores presupuestos que necesita España”, que tienen como base las cuentas presentadas por el Ejecutivo en Bruselas, “son el reflejo de nuestro compromiso con la Unión Europea, un compromiso por garantizar la salud de nuestras cuentas públicas con los cumplimientos con el pacto de estabilidad presupuestaria”. Sánchez ha reivindicado unos presupuestos “adecuados a nuestra economía” y se ha mostrado confiado en conseguir su aprobación: “nos tendría que mover el interés general”. “Ahora empieza la negociación parlamentaria”, ha sentenciado.
Se ha referido a los desafíos de su Gobierno para la próxima legislatura, como son la reforma educativa; un nuevo estatuto de los trabajadores; la financiación del estado del bienestar; de las pensiones; y la apuesta por el Medio Ambiente: “no hay tiempo que perder”.
Sánchez, quien se ha referido al Corredor Mediterráneo como una infraestructura clave y prioritaria que se debe acometer, se ha comprometido con la reducción sostenible de la deuda pública: “es un objetivo prioritario, por el coste de oportunidad, por justicia intergeneracional y porque necesitamos margen para hacer frente a futuras crisis”.
Por último, el jefe del Ejecutivo ha reconocido la ralentización económica, “aunque seguimos liderando el crecimiento en la zona euro”. Por ello, se ha mostrado partidario de apostar por una mejora de la productividad y la competitividad a través de la educación, la ciencia o la reindustrialización.
