Una fosa de víctimas del franquismo se abre en Castellón en el aniversario de la muerte del dictador
A lo largo de la mañana de este martes tendrán lugar los trabajos de apertura de las fosas comunes ubicadas en el Cuadro civil del Cementerio de San José en Castellón. Son tres las familias que esperan poder recuperar los restos de sus parientes represaliados, José Monfort, Eduardo Isaac y Rafael Prades. El mismo grupo que realizó los trabajos en la fosa de Paterna, ArqueoAntro, ha comenzado las tareas de localización.
Según relata Carmen Arnal, nieta de Rafael Prades, presente durante los trabajos, los arqueólogos se han topado con restos humanos desconocidos cuando apenas llevaban medio metro excavado. Estos restos se encuentran por encima de los del represaliado y se estima que fueron trasladados allí debido a las obras de construcción de un crematorio construido en 1989. La sorpresa del hallazgo retrasará la recuperación de los cuerpos, aunque se prevé que los trabajos concluyan en los próximos días.
“Personalmente no siento tristeza, hoy es un día de emoción y alegría de ver que al final hemos podido recuperar los restos de mi abuelo. Ahora hay que cotejar los restos con las pruebas de ADN, así que todavía toca esperar un poco. Cuando los tengamos, los incineraremos y nos los llevaremos. Eso lo tenemos claro”, apunta Carmen.
“Ahora podemos por fin pasar página, se ha solucionado algo que llevaba sin resolver muchos años. En parte se ha hecho justicia… pero por otra parte no ha habido ningún tipo de arrepentimiento o disculpa por parte de nadie. Tampoco ha habido, ni esperamos que haya, ningún tipo de reconocimiento para las víctimas. Nadie las va a reconocer”, sentencia Arnal.
Más recuperaciones de cara al año que viene
Las familias de los tres represaliados y el Grup de Recerca de la Memòria Histórica ven así por fin cumplida su petición, si bien una cuarta familia habrá de esperar hasta 2019 para poder recuperar a su ser querido –y otras seis permanecen a la espera-. Esto se debe, según informas fuentes del Ayuntamiento, a que el consistorio trató de evitar que el comienzo de los trabajos se demorasen en exceso en procesos de licitación y concurso, por lo que el servició se adjudicó a través de un contrato menor –inferior a 15.000-, que solo cubre la recuperación de los restos de tres de esos cuatro represaliados.
Los trabajos de identificación se prolongarán todavía durante aproximadamente un año, hasta que los restos de otros siete represaliados reclamados por sus familias sean recuperados. Será un laboratorio de Madrid el encargado de cotejar los restos que se recuperen con las muestras de ADN de los familiares. El Grup per la Recerca de la Memòria Històrica estima que en la fosa se arrojaron los cuerpos de más de 500 personas de las cerca de mil que fueron fusiladas a lo largo del río Seco.
