Obama no quiere ir solo a la guerra
Obama ha tomado la decisión de no tomar ninguna decisión hasta que el Congreso permita el uso de la fuerza contra el régimen de Asad. En una decisión sorprendente que no estaba en los cálculos de nadie, y más desde la derrota de Cameron en la Cámara de los Comunes, el presidente ha pasado la responsabilidad al legislativo, donde el resultado de la votación es imprevisible.
“Leading from behind”, lo llamaron algunos cuando Obama dejó que Cameron y Sarkozy llevaran la iniciativa en la guerra contra Gadafi. Luego los republicanos utilizaron esa idea para burlarse del presidente y de sus supuestas carencias de liderazgo. Aun así, Obama nunca pidió permiso al Congreso para intervenir en Libia.