Avance Hellraid, cambiando plomo y zombis por espadas y demonios
Es inevitable, cuando pensamos en id Software lo primero que nos viene a la cabeza son juegos shooters. Si pensamos en Nintendo lo asociamos a plataformas, igual que en Codemasters llevan escrito a fuego en su frente que ellos hacen juegos de conducción. En el caso del Techland lo primero que se nos viene a la mente hoy en día son juegos de zombis dado el empeño puesto por este estudio por hacernos pasar ratos tan divertidos como terroríficos con la saga Dead Island, así como con el prometedor Dying Light.
Desde Techland nos tienen acostumbrados a eso, a juegos en primera persona capaces de ofrecer una buena libertad de acción en un mundo hostil en el que nos las tendremos que ver con hordas y horas de no muertos, siempre haciendo uso de armas de lo más diversas, entre las que por supuesto encontramos las de fuego. Y eso sin olvidar la acción cooperativa de Dead Island.
Sin embargo Hellraid, el proyecto que preparan en paralelo a Dying Light, es diferente, o al menos parece querer serlo. Surgido sin hacer tanto ruido, ahora tenemos nuevos detalles de este proyecto que cambiará el apocalipsis zombi por un mundo de fantasía medieval, con espadas, esqueletos, demonios y todo lo que ello conlleva.
Hellraid es una propuesta que mezclará la acción frenética en primera persona con tintes RPG, algo que ya hemos podido ver en los anteriores títulos del estudio, y todo como siempre bajo una perspectiva en primera persona. La acción nos llevará a protagonizar una epopeya en la que nos las tendremos que ver con decenas de seres de ultratumba, ya sean como decimos esqueletos o criaturas mitad humanas mitad bestia haciendo uso de nuestra maña a la hora de movernos por el escenario y de decenas de armas, habilidades y magias.
También estará presente la libertad de acción de Dead Island, ya que tendremos más de una forma de eliminar a nuestros adversarios y cumplir los objetivos. En este sentido se espera una buena variedad, al igual que se espera la introducción de diferentes enemigos finales capaces de ponernos las cosas bastante difíciles dada su velocidad o su fuerza. Saber defenderos, atacar, esquivar y utilizar el entorno será crucial para salir vivos de cada enfrentamiento.
Para avanzar entre toda esta barbarie contaremos como decimos con un buen puñado de armas, cada una de ellas con características propias que además podremos mejorar. Además no existirán las clases de personaje predefinidas, por lo que no encontraremos restricción alguna a la hora de optar por un tipo de combate u otro más allá de las que nos impongamos nosotros mismos al optar por invertir nuestros puntos de experiencia en una rama u otra. Así pues esto abre las puertas a tener un soldado con armadura pesada capaz de manejar magia, algo que no suele estar permitido en los juegos más clásicos.
Para hacer evolucionar a nuestro personaje contaremos con un amplísimo árbol de habilidades con decenas de opciones a desbloquear y caminos a seguir. Por supuesto encontraremos opciones típicas de los RPG como mejorar nuestra habilidad de combate con armas a dos manos, resistir a determinado tipo de magia, obtener más salud, mayor destreza y un largo etcétera, lo que sin duda servirá para atraer a los amantes del rol que busquen una buena dosis de acción más directa. También podremos aprender nuevos hechizos y mejoras para nuestras armas, las cuales podremos aplicar después de encontrar las instrucciones correspondientes para su realización.
Por lo que hemos podido ver en sus cinemáticas, Hellraid no escatimará en brutalidad y frenetismo, ofreciendo una gran sensación de inmersión gracias a la fluidez de imagen y a esa estética oscura que desprende su apartado artístico. Técnicamente se cimentará sobre el Chrome Engine 6, la última versión del motor gráfico de Techland que se estrenará con Dying Light, lo que garantiza que los efectos de iluminación y partículas luzcan a un gran nivel, aunque también descarta su lanzamiento en la vieja generación de PS3 y Xbox 360, siendo un exclusivo de PC, PS4 y Xbox One.
A fin de redondear la faena contará con un modo cooperativo a cuatro jugadores con el que disfrutar de su modo campaña avanzando por la historia en buena compañía. Este modo a cuatro desbloqueará misiones inéditas enfocadas en la superación de diferentes oleadas de enemigos. Como siempre en estas modalidades será esencial compensar las debilidades de nuestros compañeros si queremos sobrevivir el mayor tiempo posible.
En definitiva nos encontramos ante un título que, aunque aparentemente se geste a la sombra del prometedor Dying Light, puede llegar a ofrecer mucha diversión a los amantes tanto del rol como sobre todo a los de la acción más frenética. Su ambientación es una delicia, aunque bien es cierto que nos falta ver nuevas localizaciones e incluso zonas que destaquen saltándose un poco el tono gris que inunda la gran mayoría del juego.
La atmósfera parece asfixiante, y la acción requiere de maña y concentración a la hora de superar cada combate, lo que a buen seguro puede entusiasmar a un buen número de jugadores acostumbrados a propuestas exigentes. Ahora queda por ver si el sistema de personalización del personaje y de las armas, objetos y hechizos resulta tan atractivo como parece a fin de que cada uno pueda llegar a obtener su propia experiencia de juego, lo que sin duda alguna serviría para enriquecer un modo cooperativo que podría ser la auténtica guinda del pastel.
Lo dicho, dejamos atrás a los zombis. Bienvenidos sean los esqueletos y los malvados señores de la oscuridad. Nuestra afilada espada les está esperando.