Manuela Carmena devolverá el IBI de los locales culturales en año electoral
El Ayuntamiento de Madrid, gobernado por Manuela Carmena, subvencionará la actividad cultural por el importe del Impuesto sobre los Bienes Inmuebles (IBI) a los proyectos culturales que se desarrollan en locales en la ciudad de Madrid. Lo hará en 2019, año en el que la alcaldesa de la capital, que ostenta también el cargo de concejala de Cultura desde que dejó desierta esta área, optará a la reelección en los comicios municipales de mayo. Carmena lo ha anunciado el anuncio este martes durante el Debate del Estado de la Ciudad, el último de su mandato, que tuvo que ser pospuesto una semana después de que la regidora sufriera un accidente doméstico.
Aquellos que explotan actividades culturales como teatros, cines, librerías, galerías y demás locales destinados a la cultura podrán beneficiarse de esta medida, que tendrá un máximo de devolución de 15.000 euros. De esta manera, Carmena quiere evitar que grandes superficies se favorezcan sin límite de esta bonificación. Los propietarios pagarán este impuesto de competencia local, y luego el Ayuntamiento –previo reclamo– se lo devolverá hasta ese límite de 15.000 euros.
Esta no será la única medida destinada a promocionar la cultura en la capital. La alcaldesa también quiere que el 1,5% del presupuesto de las obras públicas de más de 5 millones de euros se destine a actividades artísticas en el espacio público.
Manuela Carmena dirige personalmente el Área de Cultura del Consistorio desde que decidiera relevar de este cargo a Celia Mayer en marzo de 2017, a la que reubicó en la delegación de nueva creación sobre Políticas de Género y Diversidad. Mayer acababa de volver de su permiso de maternidad y durante su ausencia la alcaldesa tomó las riendas del área que más quebraderos de cabeza le había producido, con las polémicas de los titiriteros o los trajes de los reyes magos, entre otras.
Carmena no ha querido delegar la gestión de Cultura a ninguno de sus concejales y es ella incluso la que comparece para dar cuentas a la oposición en las comisiones del ramo. Por eso no es casualidad que dos de sus medidas estrella anunciadas este martes en el Debate del Estado de la Ciudad hayan sido en este sentido.
Una moratoria para que no suba el alquiler
La vivienda es otra de las cuestiones en la que Carmena ha centrado el debate. Es una de sus “obsesiones”, aseguran fuentes de su entorno. Para ello, el Ayuntamiento de Madrid, a través de la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo (EMVS), ha encargado una 'macroencuesta' para tener “datos reales” de cómo está la situación de la vivienda en la capital.
La encuesta consta de 6.319 entrevistas a hogares madrileños, 300 por distrito. Con ella “el Consistorio quiere disponer de una radiografía de cómo se encuentra la vivienda en Madrid, los precios del alquiler, la subida de los mismos, cuántos propietarios hay y cuántos viven arrendados, entre otras cuestiones”, aseguran fuentes municipales.
Mientras llegan los resultados de la consulta, Carmena ha pedido durante el Pleno municipal de este martes una moratoria al Gobierno de Pedro Sánchez para que limite los incrementos del precio del alquiler. La alcaldesa solicitará al Ministerio de Fomento que dirige José Luis Ábalos una prórroga para que, durante al menos un año, los precios del alquiler en las renovaciones de contrato no puedan incrementarse más allá del IPC (Índice de Precios al Consumo).
El Consistorio lleva reclamando estos tres años al Ejecutivo central, antes dirigido por el PP y ahora por el PSOE, una reforma de la ley de Arrendamientos Urbanos. En ella piden que se limite el precio de los alquileres y una mayor inversión en vivienda pública. La actual oferta de vivienda protegida en la Comunidad de Madrid no alcanza el 2% del total. Para incidir en los precios del alquiler, la región debería contar con un parque de vivienda pública de en torno al 20% o 25%, recuerda Raquel Rodríguez, doctora arquitecta y profesora asociada del Departamento de Urbanística y Ordenación del Territorio de la ETSAM de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM).
Operación Campamento
Con estas premisas y tras aprobarse en Junta de Gobierno la Operación Chamartín para el desarrollo del norte de la ciudad, que tendrá que ser refrendada en un Pleno municipal, Manuela Carmena ha comenzado este martes sus propósitos para el próximo mandato –ya ha dicho que se presentará a la reelección–. La regidora ha rescatado durante el debate la llamada Operación Campamento, el desarrollo urbanístico en el suroeste de la ciudad, que lleva años también paralizada.
La alcaldesa ha anunciado la intención del Consistorio de que se construyan 11.150 viviendas en el entorno de la Autovía 5, donde actualmente se encuentran cuarteles del Ejército vacíos. El grueso del desarrollo de esa zona de la ciudad, ubicada en el distrito Latina, avanzaría en la próxima legislatura de revalidar el mandato Manuela Carmena.
Carmena pretende reunirse próximamente con la ministra de Defensa, Margarita Robles, y con el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, ministerios propietarios de los terrenos, para comenzar las negociaciones. El planeamiento urbano, que es competencia municipal, contempla que un 40% del total se destine a vivienda libre y el resto, el 60%, a vivienda con diferentes tipos de protección. El Gobierno local reservaría 1.100 viviendas para alquiler social.
Campamento comprende dos grandes ámbitos, que suman algo más de nueve millones de metros cuadrados de extensión. Ocupan los solares de las antiguas instalaciones militares y la superficie de suelo no urbanizado del remate suroeste de Madrid, por la que transcurren los arroyos de Valchico y Meaques.
La propuesta de Carmena no es nueva, se trata más bien de rescatar lo último que se aprobó en el Gobierno municipal en 2009 para el desarrollo de esta zona: el Plan Parcial de Reforma Interior del ámbito de las antiguas instalaciones militares. En éste hoy vigente, se propone, entre otras determinaciones, un máximo de 11.000 viviendas, de las cuales 7.000 tendrían algún grado de protección.
Faro contra la desigualdad
Finalmente, entre las medidas que la edil ha anunciado este martes durante el Debate del Estado de la Ciudad está la de impulsar un “faro sobre la desigualdad urbana en Madrid”, explican fuentes municipales. Actuaría como comisionado y tiene como objetivo apostar por el reequilibrio territorial, otro de los objetivos de la anunciada Operación Campamento.
Sería un espacio “permanente,” señalan desde el Consistorio, que analice las políticas públicas de las tres administraciones (Gobierno central, Comunidad de Madrid y Ayuntamiento), a las que la alcaldesa quiere integrar para terminar con el desarrollo desigual de la ciudad.
Las medidas anunciadas por la alcaldesa este martes tendrán que esperar a ser ratificadas los próximos cuatro años, en caso de que Carmena vuelva a conseguir el apoyo para gobernar. A excepción de la bonificación del IBI para locales culturales, que la regidora pondrá en marcha el próximo año en plena campaña electoral.