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Laxoa, la modalidad ancestral de pelota que sobrevive en el norte de Navarra: “Es un patrimonio que debemos conservar”

Partido de Laxoa en la plaza Bear Zana

Mattin Izaguirre Eguiguren

Baztan —
4 de agosto de 2025 21:45 h

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31 de julio. Mientras que en las vecinas Gipuzkoa y Bizkaia se celebra el día de San Ignacio –el patrón–, en Doneztebe –pueblo perteneciente al Alto Bidasoa, ubicado en el norte de Navarra y a orillas del río de ese nombre–, Tribuntzio Arraztoa, miembro de Laxoa Elkartea, se encuentra sentado en la plaza Bear Zana, lugar donde se celebrará, dos días después, la final de eso que da nombre a su asociación, laxoa. ¿Qué es? Es una modalidad de pelota cuyo origen se remonta a la Edad Media y que sobrevive en esta zona.

“El sábado se celebrarán las finales del cuadragésimo quinto campeonato de laxoa. A las 11:00 se jugará el partido por el tercer puesto, y a las 17:30 será la final”, comenta un Arraztoa ilusionado. Además, para acompañar a la tradición durante el día, se podrá disfrutar de la 'trikitixa' por el pueblo. “Será un día bonito, ya que es el más importante del año relacionado con esta modalidad”, continua Arraztoa. “Durante el campeonato –que se celebra en primavera y verano– no suele asistir mucha gente a los partidos normales, solo amigos y cuadrillas. Pero a la final suele venir más gente”, explica.

Doneztebe

Este viernes, en la plaza, no hay mucho ruido. A media tarde solo se ven niños jugando con sus padres al frontenis o a la pelota. Algunas cuadrillas pasan de un lado a otro, mientras que algún jubilado descansa en uno de sus bancos rocosos laterales. Pero Arraztoa sabe que la tranquilidad aparente se envolverá pronto en un día histórico y tradicional, dando pie, en apenas 48 horas, al recuerdo de aquellas tardes de frontón de la época dorada del laxoa.

Del 'jeu de paume' al laxoa: el origen medieval de la pelota vasca

Laxoa nació del ‘jeu de paume’ –el juego de palma– de la Edad Media, que se practicaba en Europa Central y, especialmente, en Francia. El 'jeu de paume’ es el origen de otros deportes de juegos directo –aquellos en los que la pelota se lanza de un equipo o jugador al otro sin necesidad de rebotar en la pared–, como el tenis. Por este motivo, los tantos se cuentan de la misma manera: 15, 30, 40 y juego. Sin embargo, “el tenis emigró hacia el norte y la pelota hacia el sur”, explica Arraztoa.

El 'jeu de paume’ tenía dos modalidades: ‘courte paume’ y ‘longue paume’. La primera se practicaba en interiores, como monasterios, claustros o ‘trinquets’ –canchas cerradas– situadas en palacios. Era un juego reservado a nobles y clérigos. La segunda, en cambio, se jugaba al aire libre, en murallas, prados o ‘pilotasoros’. La pelota vasca cuenta cuatro modalidades tradicionales de juego directo: laxoa, rebote, bote-luzea y paxaka. Las tres primeras nacieron del ‘paume longue’, mientras que la última deriva del ‘courte paume’.

De todas ellas, laxoa es la modalidad autóctona más antigua de la pelota vasca. Además, fue el deporte rey hasta el último tercio del siglo XIX. Según Arraztoa, “se practicaba en toda Euskal Herria, incluso en zonas de Aragón o Valencia”. “Tal y como recoge la prensa valenciana, en el siglo XIX se jugaba con guante navarro, guante de cuero”, apunta.

Tribuntzio Arraztoa, miembro de Laxoa elkartea, en la plaza Bear Zana

En los primeros años, se jugaba en los 'pilotasoros': unos prados –antecedente de la plaza libre–, donde vecinos provenientes de distintos caseríos se reunían los domingos para celebrar un día festivo. La jornada comenzaba con la misa y, después, se disputaba un partido de laxoa antes de la comida. Por la tarde se jugaba la revancha y, al terminar, se bailaba agarrado. “En el pueblo estaba prohibido por los curas, pero allí arriba, en los montes, era posible. Al atardecer se merendaba y todos a casa”, comenta Arraztoa.

Además, hasta el último tercio del siglo XIX, todos los pueblos contaban con una plaza libre, un espacio reservado para el juego a largo. Arraztoa observa el frontón de la plaza y señala la fecha de su construcción. “Esta plaza es del año 1855. A mediados del siglo XIX se construyeron la mayoría de las plazas que todavía se conservan”, comenta.

Sin embargo, a finales del XIX, con la aparición de la chistera de mimbre –empleada en el joko garbi y en el rebote–, la cesta punta, la cesta del rebote y los frontones de pared izquierda, junto a nuevas herramientas y especialidades, desplazaron al juego a largo, que quedó prácticamente arrinconado. Solo sobrevivió en los valles del norte de Navarra: el Valle de Baztan, Bertiz, Ultzama o Bortziriak. “Desde entonces, se ha mantenido en estas zonas con muchos altibajos. Actualmente, solo se practica aquí, en los valles de Baztan y Malerreka”, lamenta Arraztoa.

La época dorada

El partido más grande que se ha celebrado en la historia de la pelota fue uno de laxoa, disputado en la plaza Urdanibia de Irún en 1846. “Fue un partido calificado internacional. Por una parte, jugaban los franceses, y por otra, los provincianos, que eran los guipuzcoanos”, explica Arraztoa, orgulloso. Al partido asistieron 12.000 personas. “Cuentan que se jugaron más de 150.000 francos de la época. Muchos perdieron caseríos, ganado...”.

Otro de los partidos históricos se jugo en la plaza de Lamiarrita en Arizkun. “Esa es una de las plazas históricas del laxoa. De hecho, existen unos versos de 1893 relativos a un gran desafío entre los de Aldude y los 'baztandarrak'”, recuerda Arraztoa. En los mejores años, además del poderío que tuvo en el reino de Navarra, laxoa también alcanzó un notable auge en Gipuzkoa, hasta la llegada del rebote, que lo fue desplazando progresivamente a finales del siglo XIX.

Arraztoa rememora aquellos tiempos: “La plaza de las murallas de Hondarribia es otra de las históricas. De vez en cuando, aún solemos organizar algún partido de exhibición”, señala. En sus días de esplendor, laxoa “era prácticamente el único deporte”, al menos hasta la llegada de las disciplinas modernas a los territorios vascos. “Cuando apareció el frontón de pared izquierda en las modalidades indirectas, laxoa desapareció”.

Doneztebe: epicentro de laxoa

El sábado 2 de agosto ha amanecido con un sol tímido, pero, a medida que avanza el día, la luz va iluminando el pequeño municipio de Doneztebe –que no llega a los 2.000 habitantes–. Juan Telletxea, concejal de Deportes del pueblo, señala que es “un día grande”. “Se está viendo a muchos aficionados de laxoa en el pueblo. Aunque el deporte tuvo más fuerza en el pasado, sigue manteniéndose vivo. Diría que Doneztebe es el lugar al que más gente acude, de entre los pueblos donde aún se juega”, recalca.

El público en la plaza Bear Zana

A las 11:00 de la mañana se ha disputado el partido entre Arraioz Sagardia y Oitz B, correspondiente al tercer puesto del campeonato de laxoa. Al finalizar el encuentro, ha habido un 'triki-poteo' para animar el ambiente y a los espectadores. Entre ellos, se puede ver a extranjeros y turistas. Idiomas como el catalán o el inglés estadounidense se escuchan entre las gradas laterales. Uno de los vecinos cuenta que en agosto es muy común que americanos visiten Baztan, Bortziriak o Malerreka, ya que antiguamente muchos autóctonos de estas zonas emigraron a “hacer las Américas” en busca de un futuro mejor, y “ahora muchos de sus hijos o nietos vienen a conocer el pasado de sus padres o abuelos”.

“Siempre me ha gustado la pelota”, comenta Arraztoa. “Creo que es un patrimonio que debemos conservar, de generación en generación, de padres a hijos, de familia en familia. En muchos momentos de la historia, esta dedicación ha salvado la modalidad”, agrega.

Laxoa Elkartea: la lucha por mantener vivo

Los primeros campeonatos de laxoa se disputaron entre 1961 y 1964. Después, la modalidad cayó en el olvido. “Solo se jugaba en las fiestas de los pueblos, en uno o dos partidos al año”, relata Arraztoa. “Pero en el verano de 1979 conseguimos organizar cuatro partidos. Los demás pueblos mostraron interés, y al año siguiente creamos la asociación Laxoa Elkartea”. Desde entonces, el campeonato de interpueblos se celebra anualmente, alcanzando en 2025 su edición número 45. Además de organizar todas las actividades relacionadas con laxoa, la asociación también se ocupa de conservar la paxaka con guante, modalidad que han recuperado desde hace años.

El objetivo principal de la asociación es cuidar la modalidad. Son conscientes del tesoro que tienen entre manos, al recordar que laxoa es la única modalidad da pelota vasca declarada Bien de Interés Cultural (BIC). “Para nosotros es algo nuestro, algo que nos pertenece y que no debemos dejar perder. Lo hemos conocido toda la vida, se ha practicado siempre. Y fuera de aquí, no se practica, no se juega, ni siquiera se intenta. Se dice que Pamplona es la ‘capital mundial de la pelota’, pero ¿de qué pelota? Los juegos directos de pelota son totalmente desconocidos”, lanza.

Partido de Laxoa en la plaza Bear Zana

Respecto al futuro y las nuevas generaciones, Arraztoa se muestra esperanzado: “También se celebra el campeonato de chavales. Nuestro objetivo es mantener lo que tenemos, porque expandirlo es muy difícil. De momento, lo importante es que vengan jóvenes por detrás”. La asociación cuenta con dos escuelas, una en Irurita y otra en Doneztebe, donde en primavera se reúnen un par de días a la semana. “Estaría muy bien si los chavales también se involucraran en la organización. En la asociación estamos los de siempre, hay algunos jóvenes, y esperamos que continúen”.

Aun así, la asociación tienen desafíos de cara al futuro. “Un reto pendiente que tenemos es la introducción del laxoa en los colegios. El problema es que los profesores de educación física, aunque sean de la zona, no conocen la modalidad y, en vez de promoverlo, se dedican a enseñar bádminton o rugby”, lamenta.

Para la asociación, introducir el deporte en el currículo de Educación Física sería un gran paso. “Así llegaríamos también a las chicas. De momento, ellas se acercan a mirar, no juegan, pero se aproximan. Es otra de las asignaturas pendientes. Animaría a las chicas a jugar. Quizás habría que adaptar los guantes, pero por lo demás, sería un avance muy importante”, explica Arraztoa.

Partido de Laxoa en la plaza Bear Zana

Por otra parte, también existen gastos: guantes, pelotas, organización, … Todo supone un esfuerzo económico. La asociación cuenta con algunos pequeños patrocinadores, además del apoyo del Ayuntamiento o el Gobierno de Navarra. “Pero a veces hemos tenido que dejar proyectos por falta de dinero. Laxoa es la única modalidad de pelota en Navarra declarada BIC por el Gobierno, y esperamos que esa declaración sirva para mantener los elementos imprescindibles. Sin embargo, estamos viendo cómo desaparecen plazas, y cuando una plaza se pierde, el juego del laxoa desaparece automáticamente”, explica. Desde el Ayuntamiento, Telletxea comenta que “laxoa siempre tendrá las puertas abiertas”. “Siempre hay una partida presupuestaria destinada a darles una subvención, y esa es la principal forma de ayuda del Ayuntamiento”, responde.

Entre amigos y pelotaris: la final en Bear Zana

A las 17:00 de la tarde del día de la final, algunos habitantes se van acercando poco a poco a Bear Zana. Otros salen del restaurante Santamaria hacia el frontón, después de la comida junto a los pelotaris. A y media, el frontón luce espléndido: familiares, turistas, jóvenes, mayores, cuadrillas. Todos esperan a que comience el encuentro entre Doneztebe The moment –Julen San Miguel, Asier Mutuberria, Josu Juanenea y Koldo Legarra–, que visten de rojo, y Oitz A –Ioritz Zelaieta, Iker Bureau, Laurendi Zelaieta y Ugutz Zelaieta–, que visten de azul. El año pasado, los ganadores fueron los locales.

Final del partido de Laxoa

Arraztoa explica brevemente las reglas: “Es un juego directo. Se ubican cuatro pelotaris en cada bando con su correspondiente guante de cuero. Se miran entre ellos y se lanzan la pelota de un lado al otro. Es como el tenis, pero sin red, con guantes y en una plaza grande. Si la pelota, en su primer bote, cae fuera de los límites, es tanto para el equipo contrario. Además, si la pelota va arrastrándose por el suelo y supera toda la plaza, también es tanto. ”El primero que logra 9 juegos gana el partido. Para ello hay que superar los 15, 30 y 40 para ganar cada juego. Como Arraztoa señala: “Se trata de ganar terreno. Cuanto más terreno ganes, mejor”.

En el partido, además de Arraztoa y Telletxea, estaban presentes Arantxa Arregi (alcaldesa de Doneztebe), Andrea Lusarreta (presidenta de la Federación Navarra de Pelota Vasca), Iñaki Lizaso (presidente de la Federación Guipuzcoana de Pelota Vasca) y Juan Manuel Hernández (presidente de la Federación Canaria de Pelota). Telletxea comentaba antes del partido: “Desde el ayuntamiento queremos agradecer a Laxoa Elkartea por el trabajo que está haciendo y nombrar especialmente a Tiburtzio Arraztoa, por sus años de dedicación”.

Finalmente, el partido ha durado alrededor de dos horas y quince minutos, con un resultado peleado de 9-6, con la victoria del equipo de Doneztebe. Al terminar el encuentro, los pelotaris se mezclan entre el gentío y comienzan los abrazos, risas y charlas. En realidad, parece ser que para ellos lo de menos es el resultado. Lo verdaderamente importante, quizás, sea que un año más el laxoa ha demostrado que sigue vivo.

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