Los vecinos de la localidad navarra de Viana se movilizan para paralizar la apertura de una planta de Biogás

Los vecinos de la localidad navarra de Viana, así como los de algunos municipios del entorno, llevan días movilizándose para tratar de paralizar un proyecto impulsado por la empresa B. Power Gen II SLU para la instalación de una planta de biogás en un polígono industrial de Viana. Alegan que su apertura llevaría a esta localidad a recibir casi 130.000 toneladas de residuos diarios para el funcionamiento de la planta, lo que generaría un “importante” daño medioambiental. Por el momento ya han conseguido que el Ayuntamiento se haya posicionado por unanimidad en contra de la planta y confían en que el Gobierno foral no conceda la autorización.

Este tipo de plantas generan biogás, una fuente de energía incluida en el grupo de las energías renovables que se produce a través de la descomposición anaerobia -sin oxígeno- de materia orgánica. Para ello mezclan residuos agrícolas, ganaderos, agroindustriales, lodos de depuradoras o residuos domésticos. Con la biometanización se produce el biogás, en el que predomina el metano y que, una vez depurado, se inyecta en la red general de gas natural.

Lo que a simple vista parece algo positivo, la generación de energía renovable, ha contado con un rechazo frontal desde el comienzo por los vecinos de Viana, que denuncian además que se enteraron del proyecto a través del Boletín Oficial de Navarra (BON) del 13 de junio en el que se incluía el anuncio a exposición pública del expediente de concesión de autorización ambiental integrada a fin de realizar alegaciones al proyecto de la “Planta de biometanización y fertilizantes”. “Nadie de la empresa o del Ayuntamiento nos ha informado de las características del proyecto”, lamenta un vecino de la localidad. “Lo han anunciado en verano para que a los vecinos no presentásemos alegaciones porque la administración está en cuadros. No se debería permitir presentar un proyecto a exposición pública en verano”, añade Ángela Marín, de la plataforma que han creado varios vecinos de Viana y otros municipios del entorno contraria a la planta de Biogás.

Así, desde hace semanas, los vecinos comenzaron con las movilizaciones, que empezaron con una charla informativa sobre el proyecto a cargo de la fundación ecologista Sustrai. Más de 150 personas acudieron a la convocatoria por la “inquietud” que había generado en el municipio la llegada de una planta de este tipo. Se les explicó que en plantas de similares características gestionan un volumen anual de 124.500 toneladas de residuos procedentes mayoritariamente de purines y estiércol de macrogranjas, de residuos de industria láctea y bebidas alcohólicas o aguas residuales, entre otras, lo que supondría la circulación diaria de entrada y salida de 26 camiones de 25 toneladas.

“Esta planta va a generar biometano y CO2 para la venta, así como digestato, un residuo fertilizante que supone el 80%-90% de los residuos gestionados. Esta cantidad abrumadora de digestato, y que debe distribuirse posteriormente en terrenos agrícolas, es un elemento potencial de contaminación de suelo y acuíferos por su mala gestión, con la posibilidad de contaminarlos con nitratos, además de otros compuestos”, explicaron desde la Fundación Sustrai.

“Viana es una localidad que vive principalmente del cultivo de uva para el vino y la contaminación generada por la planta podría afectar negativamente a la producción”, lamenta Ángela Marín. Viana está incluida en la denominación de origen de los vinos de Rioja.

Los vecinos temen a su vez que una macroplanta de esas dimensiones en el municipio tenga un “efecto llamada” para macrogranjas que vean con buenos ojos instalarse en la comunidad foral para suministrar de purines a la planta de biogás. “Con los residuos que se generan aquí no les llega, necesitan muchas más toneladas”, apunta Ángela Marín, de la plataforma vecinal 'No a la planta de biogás'.

Por el momento los vecinos ya han conseguido unificarse bajo una plataforma con la que presentar alegaciones al proyecto para su paralización. Además, han logrado que el Ayuntamiento de la localidad haya apoyado por unanimidad una moción contra la planta presentada por el equipo de Gobierno municipal (PSN, Geroa Bai y EH Bildu) y que ha sido respaldada también por UPN.